Temporada de natación: ¿Qué debemos tener en cuenta para “sumergirnos” en este deporte?

En plena temporada, aumenta la cantidad de visitas a las piscinas y los clubes donde las lecciones de natación tienen un pleno auge. Es por ello que, a la hora de sumergirnos al “deporte más completo”, debemos tener en cuenta una serie de recomendaciones para hacerlo de forma segura.

Desde El Nacional, contactamos con la profesora Rebecca Páez, experta en educación física y en este deporte, quien nos comentó sobre algunas prácticas más seguras para todos y en especial para los más pequeños de la casa.

¿Podrías recordar la importancia de este deporte y desde qué edad los niños pueden practicarlo?

No solamente por una cuestión de seguridad, sino también para evitar los temidos ahogamientos, es importante que todos aprendamos a nadar. Algunos centros más especializados ofrecen desde los tres meses de edad, con algunas especificaciones, como por ejemplo el acompañamiento de un adulto de confianza, que suele ser la madre o el padre, una piscina de agua templada, cerrada, entre otros.

También debemos saber que este deporte ayuda a desarrollar la caja torácica, previniendo las formas más graves de enfermedades respiratorias. Tenemos alumnos asmáticos que logran sobrellevar la enfermedad gracias a la constancia en este deporte.

Natación en niños. Foto: Rebecca Páez.

¿Cuáles son las recomendaciones médicas que los padres o encargados deben tener en cuenta antes de inscribirlos?

Lo primero que pedimos es un certificado médico expedido por el pediatra o médico de cabecera, para que podamos conocer hasta cuándo le podemos exigir y qué tipo de entrenamiento va acorde con el alumno.

Es muy importante que los padres o responsables comprendan a los profesores en cuanto a la disciplina que se quiera impartir, si bien desean estar cerca de sus hijos, es indispensable que permitan al docente realizar su trabajo, siempre y cuando se puedan tener en cuenta las medidas básicas de seguridad.

¿Cómo podemos detectar si la piscina o el lugar donde quiero acudir está en buenas condiciones?

Es muy importante percibir la calidad del agua, la transparencia, que no tenga un aspecto turbio o verde, así también el olor en el lugar. Por otro lado, los docentes deben tener un número limitado de estudiantes, para poder atenderlos con seguridad y deben estar conscientes de la altura del alumno respecto a la profundidad de la piscina.

En caso de que sea un alumno que recién está aprendiendo a nadar, se debe exigir la presencia del profesor dentro del agua, para atender cualquier movimiento que pudiera poner en riesgo su integridad.

Natación en niños. Foto: Rebecca Páez.

¿Algún mensaje para los adultos que no saben nadar y aún no se aventuran a aprender?

Que no tengan miedo, el primer paso es vencer ese obstáculo. Una vez en el agua, se abren muchas oportunidades, como las bondades de este deporte, así también la seguridad ante otras oportunidades donde uno vaya a un lugar donde haya piscinas o cauces.

También deben saber que, el saber nadar, ayuda a identificar los potenciales peligros como ríos o el mar, donde uno acude y debe tener otro tipo de cuidados, pero al estar orientado, puede hacerlo con mayor precaución.

Siempre digo que les ayuda a rejuvener ¿Quieren volver a ser jóvenes? ¡Practiquen natación!