Sonia Von Lepel: “El Estado que no prioriza lo social usa el sistema penal para maquillar negligencia”

La crisis que se vivió esta semana en el Penal de Tacumbú, desnudó, una vez más, las falencias en el sector y la problemática que supone una falta de políticas públicas al respecto. Ante esto, desde El Nacional, mantuvimos una entrevista exclusiva con la abogada Sonia Von Lepel, comisionada del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNPT), quien afirmó que al país le falta una fuerte inversión social y una correcta reinserción.

“Si el Estado paraguayo no garantiza derechos tan básicos como el de la educación, la salud vamos a seguir teniendo más crisis. Un Estado que no prioriza aspectos sociales, no invierte en educación, en programas sociales, lo que hace es evadir su responsabilidad de poder garantizar el derecho de la ciudadanía y utiliza el sistema penal para maquillar su negligencia”, señaló.

La profesional sostuvo que el problema no está solamente instalado en Tacumbú, sino en todos los centros de reclusión del país. “Cerrar Tacumbú y abrir las nuevas cárceles no es la solución. En el mundo está demostrado que la construcción de nuevas cárceles no cambia nada”, afirmó.

Penitenciaría de Minga Guazú. Foto: Gentileza.

Explicó que esto supondría traslados masivos, lo cual no garantiza nada y que el verdadero problema está en la falta de separación de las personas privadas de libertad procesadas y de aquellas condenadas. “No es la misma cosa de los que tienen una condenada, necesitan respuestas distintas, si vos cerrás Tacumbú, no va a cambiar nada”, remarcó.

Al respecto, dijo que lo que sí se debe hacer es poder dotar a las penitenciarías con la cantidad necesaria de funcionarios, capacitados, competentes, bien pagados, que puedan velar por los centros reclusorios, así como políticas públicas acordes

“En estos 10 años pasamos de 4 mil a 17 mil la población de personas privadas de libertad. Se ha mantenido en un 70% las personas con prisión preventiva y un 30% de personas condenadas. Es una cuestión superprogresiva, nunca hubo una disminución, ni siquiera en pandemia”, alarmó.

También criticó el uso excesivo del sistema penitenciario porque el Estado paraguayo históricamente no invierte en el tema social, lo que causa el aumento del cinturón de pobreza, desigualdades, migración del campo a la ciudad, sistema educativo colapsado, alto nivel de abandono escolar, los chicos salen a trabajar desde pequeños y no hay oportunidad laboral.

“Todos estos derechos que debe garantizar el Estado paraguayo, no lo hace y eso hace que el sistema penitenciario crezca porque hay más robos. No tenemos programas sociales, hay algunos aislados que no impactan realmente”, remarcó.

Vista aérea de la Penitenciaría de Tacumbú durante los disturbios. Foto: gentileza.

Aseguró que el crimen organizado está instalado en el sistema penitenciario y que las autoridades no tienen la capacidad de manejo, lo que conlleva es a que se debe recurrir a la negociación para la convivencia.

El crimen organizado cogobierna las cárceles porque no se garantizan derechos humanos mínimos”.

Sobre el punto, indicó que es urgente convocar a los tres poderes del Estado, cuyos representantes se tienen que sentar a dialogar sobre el grado de responsabilidad que tiene cada uno. “El Poder Legislativo, que quiere mantenerse al margen, tiene que sentarse a hacer mea culpa por medidas populistas que no resuelven el problema”, agregó.

Destacó que es importante reconocer que efectivamente es una crisis más, pese a que las autoridades no lo quieran ver de esa manera. “La situación es crítica, pero es mucho más compleja y obedece al problema de la política criminal”, señaló.

Un elemento muy alarmante es el que el 70% de los reclusos están con prisión preventiva, “no sabemos si son o no culpables, solamente el 30% tiene condena y el Poder Ejecutivo, a través del Ministerio de Justicia, no tiene una política de readaptación social, equipos técnicos fortalecidos, formados, no hay oportunidad laboral, un proceso de formación”, sentenció.