Las denuncias de discriminación por VIH siguen en aumento

A 40 años de aparecido el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) que causa el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), Paraguay sigue registrando hechos de discriminación, tanto en el ámbito público como en el privado, a personas que viven con el virus, pese a que el país cuenta con la Ley N° 3940/2009.

El abogado Francisco Benítez Añazco, coordinador del Centro de Denuncias de VIH y Derechos Humanos, señaló a El Nacional que la organización recibe a diario denuncias desde distintos puntos del país de personas que viven con VIH y son vulneradas en sus derechos, incluso dentro de sus propias familias.

“Nosotros permanentemente estamos registrando casos de discriminación y negación de derechos a personas que viven con VIH”, afirmó Benítez Añazco. Agregó que el Centro “registra las denuncias, realiza un monitoreo y seguimiento de la evolución de los casos, mediante un equipo de abogados y trabajadoras sociales”.

Sobre las denuncias que reciben, el abogado informó que “en el ámbito privado, por ejemplo, tenemos casos de familias que dejan de compartir la mesa, los espacios comunes, e inclusive hasta el baño con quienes viven con VIH”. “En muchos de los casos hasta los echan de la casa”, agregó.

“También tenemos registradas situaciones extorsivas, de personas que viven en pareja y conocen el estado serológico del otro, y al separarse lo usan para extorsionar al otro miembro de la pareja, ya sea para seguir la relación, y también como mecanismo de violencia intrafamiliar”, afirmó el abogado.

Benítez Añazco indicó que muchas de las denuncias que recibe el Centro tienen que ver con situaciones registradas en el mercado laboral, con empresas que no contratan a quienes postulan las vacantes aunque tengan un perfil requerido, y desvinculaciones arbitrarias de quienes tienen un estado serológico positivo.

Ya en 2001, ochos años antes de sanciona la Ley N° 3940 en el país, la ONUSIDA indicaba que el estigma relacionado con la infección por el VIH podría ser el obstáculo más grande que enfrenten las personas, comunidades, políticos y los líderes religiosos a la hora de trabajar respuestas a la problemática sanitaria que representa el virus.

Avance legal

El abogado considera que la Ley N° 3940/09 resultó una gran conquista en su momento para quienes conviven con el VIH, pero que a poco más de 10 años de su promulgación, la legislación “se encuentra desfasada y no refleja la realidad de quienes viven en esta situación”.

“La 3940 significó un gran avance respecto de la Ley N° 102/91, que definía al VIH como una enfermedad infecto contagiosa, y eso tenía un resultado negativo en cuanto a los derechos de todas las personas que vivían con VIH, porque afectaba directamente los derechos laborales”. “Esto quedó definitivamente demostrado cuando en 1993 se sanciona el Código del Trabajo que establecía que la patronal podía despedir alegando el resultado positivo de VIH como una causa justificada”, agregó.

Benítez Añazco destacó las innovaciones que incorporó la Ley N° 3940, como la confidencialidad del estado serológico y el carácter voluntario de la realización del test, que antes con la vigencia de la Ley N° 102 era de carácter obligatorio. “Esto introdujo el respeto a la dignidad, y la intimidad de todas las personas”, afirmó.

“Otros aspectos valorables de la 3940 es que establece como un eje principal y como una medida de prevención el tema de la educación, más que el conocimiento del estado serológico de las personas; también, la prohibición del despido de una persona por su serología, y una innovación que hasta ese momento en Paraguay no existía, que es el concepto de lo que es la discriminación, aquí se establece un marco regulatorio en ese sentido”, argumentó.

Entre las falencias, el abogado, señaló el hecho que la ley solo castiga episodios de discriminación registrados en el sector público, pero no en el ámbito privado. Dijo que además, y pese al tiempo transcurrido desde su promulgación, la 3940 es una Ley muy poco conocida, lo que “favorece que sigan produciéndose episodios de rechazo y discriminación”.

El Centro de Denuncias de VIH y Derechos Humanos es una iniciativa de la Red de Oenegés que trabajan la temática del VIH, conformada por  11 organizaciones entre las que se encuentran la Fundación Vencer, Vivir (de Ciudad del Este), UNES, que agrupa a mujeres trabajadoras sexuales; y Panambí, que nuclea a personas trans.

El Centro tiene habilitada la línea de WhatsApp (0985) 649-119 para recepcionar las denuncias de personas afectadas por violaciones a los DDHH o discriminación.