José Asunción Flores: conmemoración a 52 años de su ausencia

Este martes 28 de mayo, a las 15:00 horas, en el Auditorio Ruy Díaz de la Manzana de la Rivera (Ayolas 152 c/ El Paraguayo Independiente), se realizará un homenaje por los 52 años del fallecimiento del compositor paraguayo José Asunción Flores, creador de la guarania. La entrada al evento es libre y gratuita.

El evento contará con la participación del docente y cantautor José Antonio Galeano, quien abrirá el homenaje destacando el legado de Flores. Posteriormente, se proyectará el audiovisual José Asunción Flores, producido por el Ateneo Cultural José Asunción Flores, con guion y selección de imágenes de Antonio V. Pecci, sonido de David da Pozzo y supervisión de Óscar Fadlala.

Para finalizar, la Orquesta de Cámara de la Ciudad de Asunción (OCMA), dirigida por el maestro Miguel Ángel Echeverría, interpretará una selección de guaranias.

El maestro Flores

José Asunción Flores nació en Asunción el 27 de agosto de 1904, en el barrio Chacarita. Desde temprana edad, trabajó como vendedor de diarios y lustrabotas para ayudar a su madre, Magdalena. A los diez años, huyó de un entorno familiar violento y se embarcó hacia el Alto Paraguay, trabajando durante un año en una empresa taninera en Puerto Guaraní.

De regreso a Asunción, continuó su vida de trabajo y frecuentes escapadas. Su madre lo llevó al director de la cárcel, quien lo integró a la Banda de Policía bajo la dirección del italiano Nicolino Pellegrini. Allí estudió teoría musical y solfeo y se destacó rápidamente, tocando primero el bombardino y luego el trombón.

Interesado en la música nativa, Flores comenzó a experimentar con ritmos tradicionales paraguayos. En 1925, creó la obra Jejui, interpretada por la Banda de Policía. Luego, desarrolló la primera guarania, Arribeño resay, con versos de Rigoberto Fontao Meza, seguida de otras como Ñasaindýpe y Ka’aty.

En 1928, conoció al poeta Manuel Ortiz Guerrero, con quien colaboró en obras emblemáticas como India, Kerasy y Panambi vera. Tras la muerte de Ortiz Guerrero en 1933, Flores se trasladó a Buenos Aires, donde fundó la Orquesta Ortiz Guerrero, logrando éxito en teatros y radios, y grabando discos para el sello Odeón.

Flores estudió con maestros argentinos y europeos, iniciando una etapa de composiciones sinfónicas, con obras como Mburikao, Pyhare pyte y Ñanderuvusu. Estas piezas fueron aclamadas en Buenos Aires, destacándose por su técnica avanzada y recursos musicales modernos.

A pesar de su éxito, el régimen stronista en Paraguay prohibió la difusión de su música durante 35 años debido a su adhesión al Partido Comunista y su denuncia de la situación de los presos políticos. Flores recibió el apoyo de figuras como Pablo Neruda y Jean-Paul Sartre.

En la década de 1960, sus obras llegaron a Europa, donde grabó con orquestas rusas, obteniendo reconocimiento internacional. Falleció en Buenos Aires, el 16 de mayo de 1972, a los 68 años. Sus restos fueron repatriados a Paraguay en 1991 y reposan en una plaza dedicada a él y a Ortiz Guerrero.

Cada 27 de agosto, el Ateneo Cultural José A. Flores organiza un acto artístico-cultural en su honor. Además, sus obras son difundidas por diversas orquestas y centros de estudio en Paraguay. La Secretaría Nacional de Cultura lidera la campaña para que la guarania sea declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.