Connect with us

Opinión

18 de diciembre: la fecha más esperada

POR Martín Ramírez Machuca
Dr. en Lingüística, Lenguas, Filosofía, Educación y Didáctica. Universidad de Kiel, Alemania.

Este domingo 18 de diciembre será un dia atípico, pues se llevarán a cabo las elecciones internas de los partidos que pugnarán por el sillón presidencial en el 2023. Lo interesante de esta contienda electoral es la paleta de partidos y colores que representan una gama interesante de ideologías. La lucha más interesante estaría entre los contendientes de la ANR: Fuerza Republicana vs. Honor Colorado que, en realidad, los nombres de esos movimientos son solo invenciones arbitrarias que no tendrían nada que ver con las intenciones reales de los referentes de esos movimientos.

Por un lado, Alianza Republicana tratará de mantenerse en el poder, esto representaría un continuum del actual Gobierno, cuya administración durante estos cinco años ha sido muy criticada por la sociedad, por la debilidad del propio presidente de la República, quien ha zafado varias veces el cháke de un juicio político azuzado por Honor Colorado, movimiento que lo ha mantenido a raya durante estos años de gobierno.

Por otro lado, el movimiento Honor Colorado cuyo líder tiene la carga de por vida de haber sido nombrado como “significativamente corrupto” por el Gobierno de los EE.UU., tratará  de convencer a los electores que podría ser una opción para gobernar nuevamente el país. Desde esta perspectiva, y si los electores tuviesen dos dedos de frente, como me decía mi finada abuelita, no mancharían sus deditos en la tinta azul por este movimiento. El movimiento Honor Colorado ha tenido confrontación casi diaria con el movimiento oficialista durante todo el gobierno actual.

Es una desfachatez e inmoralidad que un expresidente haya tenido tanto poder y control sobre las autoridades del actual gobierno. Se puede inferir que esto ha creado una suerte de inseguridad  al actual presidente para gobernar adecuadamente.

En la carpa opositora, la Concertación, en este caso, reúne a una buena cantidad de candidatos o duplas que también intentarán romper la hegemonía de los partidos tradicionales para el siguiente periodo presidencial. De esa pléyade de duplas debe salir la pareja airosa que tendrá que enfrentarse con la ANR. De acuerdo a la temperatura actual, se percibe que la dupla Alegre-Núñez tendría más posibilidades que los otros héroes que se presentan por esta aglutinación de partidos con diferentes ideologías; asunto por el cual, durante el proceso de formación de la Concertación, fue tema de discusión por los reclamos de los partidos no tradicionales, pues el PLRA tiene la estructura suficiente como para lograr resultados positivos en esta pelea.

Se podría pensar que una vez que haya salido la dupla ganadora, los demás partidos que conforman la Concertación deben apoyar a esta, con el fin de lograr el objetivo  de tumbar al enemigo: la ANR. El plan es derribar al enemigo a como diese lugar. Estimo que esta estrategia no es muy democrática que digamos, si ese es el único objetivo de la tan mentada Concertación, creo que nos esperan otros cinco años de fracaso, mismo futuro nos depararía con cualquier candidato ganador de la ANR.

Los que están fuera de la Concertación y que entrarán con todo para las generales quizás tengan un poco más de posibilidades para lograr algún cambio en el país; estarían observando desde afuera cómo van las cosas para luego planear cómo lograr la atención de los electores que están hastiados de la misma cantinela que se repite cada cinco años.

Lo positivo que se puede observar en el caldeado momento de nuestro espectro político es el cambio en la Fiscalía General del Estado, una nueva figura emerge  para tratar de recuperar la credibilidad de esa institución, aunque todo está en la nebulosa, pues como cada gobierno trata de ajustar un Ministerio Público a su medida, no se sabe. Esta vez,  la favorita era la exministra Cecilia Pérez, quien no fue la elegida por el number one del momento.

Se espera del nuevo fiscal general que pueda reorganizar esa institrución que está en el ojo de la tormenta. Por otra parte, el embajador estadounidense, hace unos días, insistió en que se debe desterrar la corrupción imperante en el país para que esta nación pueda avanzar y levantarse del letargo en el cual está sumido.

Es lamentable, por donde se lo mire, que una delegación extranjera tenga que aconsejar, advertir, guiar, orientar y, a veces, amenazar a un país “soberano” sobre sus cuestiones domésticas. Es otra pueba más de la inutilidad de los gobernantes y de las instituciones  locales que deben velar por el respeto del Estado de derecho en el país.

Ojalá que las internas que se desarrollarán mañana sea una fiesta democrática y con resultados positivos para la sociedad, aunque como ya he  anticipado, no hay muchas luces entre los candidatos, y temo que una vez más perdamos cinco años de vida, de esperanzas y de ganas de levantar al país.

Exhorto a los lectores que votarán mañana a denunciar cualquier situación que se aparte de los cánones legales.

 

Correo electrónico: [email protected]

Click para comentar

Dejá tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Los más leídos

error: Content is protected !!