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¿Realmente Paraguay está siendo responsable con los vertidos hospitalarios?

Planta de Tratamiento de Aguas Residuales. Foto: MOPC.

Planta de Tratamiento de Aguas Residuales. Foto: MOPC.

El vertido de líquidos tratados en la planta del Gran Hospital de Coronel Oviedo, próximo a inaugurarse, generó un clima de desconfianza en la comunidad de Caaguazú. Tal es la magnitud de las protestas y negativas, que debieron suspenderse las obras de desagüe del líquido tratado al río Tebicuary, generando un desvío a la planta de Essap, que deberá gestionar su higiene.

Pese a contar con un sistema de tratamiento, que según el propio MOPC es un modelo en tecnología, la falta de información clara y accesible para la ciudadanía es uno de los principales factores que alimentan la incertidumbre, según explicó el experto ambiental Claudio Jariton en una entrevista con El Nacional. Sin embargo, la situación plantea una pregunta más amplia: ¿realmente Paraguay está garantizando un manejo adecuado de los efluentes hospitalarios?

Jariton sostiene que la transparencia en los análisis de los vertidos es clave para generar confianza. El especialista también cuestiona la situación en otros hospitales del país, particularmente en Asunción, donde afirma que el tratamiento de residuos hospitalarios es casi inexistente y con un bajo nivel de control.

En contraposición, la comunidad ovetense demuestra una mayor preocupación ambiental, lo que podría explicar por qué el sistema implementado en esa ciudad genera más debate que el vertido de desechos líquidos de los centros asistenciales de la capital, así como de frigoríficos, los cuales muchas veces terminan en el alcantarillado sin tratamiento previo.

1. ¿Por qué considera que se genera desconfianza sobre el vertido de líquidos tratados en Coronel Oviedo, a pesar de contar con una planta de tratamiento?

La desconfianza surge porque no se informa adecuadamente a la población. La transparencia se logra mediante la publicación de los análisis del vertido, que incluyen parámetros como la Demanda Bioquímica de Oxígeno (DBO), sólidos suspendidos, cantidad de colonias bacterianas y nivel de desinfección del efluente tratado. Estos resultados deben compararse con los estándares exigidos por la normativa ambiental para que la comunidad pueda comprobar que el tratamiento se realiza correctamente y que no se está generando contaminación.

2. ¿Qué garantías ofrece el Gobierno para asegurar que los efluentes de la planta cumplen con los estándares ambientales y no representan un riesgo para la comunidad? ¿Cómo pueden hacer un seguimiento los ciudadanos?

El Gobierno debe garantizar que los vertidos cumplan con los estándares ambientales a través de análisis periódicos. Estas muestras deben ser estudiadas en laboratorios certificados, como los de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) o el Instituto Nacional de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN). Para el seguimiento, la ciudadanía puede exigir la publicación de estos informes y su comparación con los parámetros establecidos en la legislación vigente.

3. ¿Cuál es la situación de los demás hospitales del país, especialmente aquellos ubicados en Asunción? ¿Existe algún tipo de control?

Por lo que he observado, el tratamiento de residuos en los hospitales es casi nulo y el control es muy limitado. Muchos establecimientos no cuentan con sistemas adecuados para el manejo de sus desechos líquidos y no se observa una fiscalización estricta por parte de las autoridades competentes.

4. ¿Cómo considera que se monitoreará el impacto ambiental del vertido en la zona y qué medidas se deberían tomar en caso de irregularidades?

El monitoreo del impacto ambiental es un proceso que debe iniciarse antes de que una industria o instalación opere, a través de un Estudio de Impacto Ambiental. Cualquier emprendimiento con ciertas características debe contar con un regente ambiental, es decir, un profesional matriculado encargado de velar por el cumplimiento de las medidas establecidas en dicho estudio. Si no se cumplen los compromisos ambientales, la empresa puede recibir sanciones, multas o incluso la revocación de su licencia hasta que corrija sus procesos para evitar la contaminación.

5. Dado que en Asunción muchos frigoríficos vierten sus desechos líquidos al alcantarillado sin tratamiento previo, se desconoce la situación de los centros asistenciales, incluso de los más grandes hospitales tan to públicos como privados ¿por qué cree que solo se cuestiona más el sistema implementado en Coronel Oviedo?

A mi parecer, la población de Coronel Oviedo está más preocupada por el medio ambiente que la gente de la capital. En Asunción, los vertidos industriales sin tratamiento parecen estar más normalizados, mientras que en Coronel Oviedo existe una mayor exigencia de transparencia y cumplimiento de las normativas ambientales.

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