El federal, un ave de humedales

POR Alberto Yanosky.

Biólogo y conservacionista.

Un tema recurrente tiene que ver con la vegetación y la fauna que es propia de ciertas comunidades naturales. Difícilmente veamos a un pájaro campana en un pastizal, ya que es un ave de bosque, e inclusive del bosque profundo y principalmente un bosque alto y húmedo. También es cierto que existen aves de pastizales, como muchos semilleros del grupo de los Sporophila que no encontraremos en los bosques. Los humedales, zonas extensivas de agua permanente o anegada gran parte del año, tiene una vegetación muy característica, con plantas de las que ya hemos hablado en varias oportunidades, con especies higrófitas, higrófilas y palustres que nos indican ciertas características de sus hojas y de sus raíces. Podríamos hablar mucho de esta vegetación tan característica que está adaptada a las altas condiciones de humedad y anegación, pero quisiera enfocarme en esa fauna cuya presencia nos denota un humedal.

Y hoy quisiera hablar del federal, esa bella ave roja y negra que es muy vistosa y difícilmente pase desapercibida y con imágenes de José Maria Paredes, se la ve aún más bella. Es un ave de la familia de los ictéridos y casi siempre asociada al guajó (peguajó) o guaho (guahoty), en donde su fuerte y brillante color rojo y negro resaltan en el verde las hojas del peguajal o guahoty, a veces no los vemos, pero su vocalización es inconfundible, así que los podemos identificar por su canto, allí están, entre las verdes hojas del guajó (Thalia). Los pichones suelen ser negruzcos y se van poniendo color naranja hasta adoptar el color de adulto, así que a no confundirlos en los ambientes acuáticos con otras aves que podrían llegar a tener colores similares. Su pico es fino, fuerte, puntiagudo y negro, que utilizan para romper y abrir su alimento que consiste en semillas, frutas, insectos y otros invertebrados que siempre cosecha o caza en los humedales. Cuando vemos un federal sabemos que allí hay agua, como cuando vemos el guajó, sabemos que ese piso tiene agua y seguramente meternos allí significa mojarnos y hasta veces en zonas muy profundas, a pesar de que el guajó está enraizado.

La vida del federal transcurre en los humedales, esteros, bañados, siempre con la presencia de estas plantas como el guajó que le dan abrigo, sustento, alimentación. Se dice que es un ave “paludícola”, ya que habita esos ambientes acuáticos donde tenga la vegetación que necesita. Los vemos moverse entre la vegetación de un lado a otro, siempre dentro del guahoty y es allí donde construye su nido con forma de taza en donde colocan los huevos. El número de huevos suele ser de tres y en promedio uno es el que llega a adulto, ya que sufren mucha depredación. Los federales son monógamos, y no es posible diferenciar machos de hembras (no hay dimorfismo sexual aparente). Tanto macho como hembra construyen los nidos y alimentan a los pichones, pero solo la hembra se encarga de la incubación de los huevos. Existen registros de que sus nidos son parasitados por otras aves como algunos tordos o guyra hu. La especie no tiene problemas de conservación en sí, solo que cuando se afectan los humedales, también se degradan las comunidades vegetales y como consecuencia desaparecen los federales de estos ambientes acuáticos.

Se lo conoce como tordo de cabeza roja o escarlata, cardenal de bañado, y así va adoptando ciertos nombres comunes que describe a esta especie tan característica. Su nombre científico es Amblyramphus holosericeus. Los parientes del federal, otros ictéridos, tienen la habilidad de imitar otras voces o vocalizaciones y hasta hace muy poco se pensaba que el federal no podía hacer mimetismo vocal; sin embargo, un hallazgo reciente demostró el mimetismo vocal con un anó en el sur de Brasil. Se cree que este tipo de comportamientos surge para evitar la depredación y hacer más eficiente la alimentación grupal que se da a veces con bandadas mixtas.

Tenemos una gran responsabilidad en mantener ambientes acuáticos saludables que puedan albergar esta bella ave, como así también todos los productos y servicios del ecosistema para mantener sus poblaciones saludables, como así también las de otras especies que habitan estos humedales. Dentro de los humedales es bueno natural o artificialmente permitir la existencia de las plantas acuáticas como el guajó que además tiene propiedades depurativas, limpiando las aguas y siendo utilizada para las construcciones de humedales artificiales. Si estos humedales artificiales permiten la existencia del federal, entonces estaremos haciendo una gran contribución a la biodiversidad.

Agradezco la provisión de imágenes excelentes de parte de José María Paredes.