Paraguay da un salto en la vigilancia aérea

Paraguay está por dar un paso crucial en la modernización de su defensa aérea con la adquisición de su primer radar primario, el TPS-78 de la empresa estadounidense Northrop Grumman. Esta compra marca un hito en la historia del país, que hasta ahora solo contaba con radares secundarios para el control del tráfico aéreo comercial y civil.

Este radar es el primero de un total de nueve que se implementarán bajo un plan aprobado por el Congreso, de los cuales seis serán fijos y tres móviles. La inversión busca mejorar la seguridad del espacio aéreo, especialmente en zonas utilizadas para vuelos clandestinos vinculados al narcotráfico.

Paraguay controlará su espacio aéreo

Detalles técnicos y cronograma de entrega

Según el experto en aeronáutica e historiador de la aviación, Antonio Luis Sapienza, el radar tendrá un rango de detección de 440 kilómetros y podrá operar tanto en modalidad fija como móvil.

“El contrato de compra se firmó el 22 de febrero, y el plazo de entrega es de 30 meses, aunque podría concretarse antes. Es un radar de última generación que debe ser fabricado específicamente para Paraguay”, explicó Sapienza, en entrevista exclusiva con El Nacional.

Este período de espera permitirá además la formación del personal militar encargado de su operación y mantenimiento. Un total de 60 oficiales y suboficiales de la Fuerza Aérea Paraguaya serán capacitados en el manejo del sistema, tanto en tareas de control aéreo como en mantenimiento técnico.

“Todo el personal debe hablar inglés con fluidez, ya que los entrenamientos serán impartidos por técnicos de la empresa fabricante. Actualmente, algunos ya dominan el idioma y otros están en proceso de aprendizaje”, agregó el experto.

Ubicación estratégica y operatividad

El radar será instalado en Concepción, una ubicación clave para la detección de vuelos ilícitos en el norte del país. Su cobertura se extenderá hasta Mariscal Estigarribia e incluso abarcará parte del Chaco Paraguayo, donde también se han identificado rutas aéreas irregulares.

A diferencia de los radares secundarios actuales, el TPS-78 podrá detectar cualquier tipo de aeronave, incluso aquellas que intenten volar sin identificarse.

“Los radares secundarios, como los que hoy tenemos en los aeropuertos Silvio Pettirossi y Guaraní, solo identifican aviones con un código de transponder. Las aeronaves ilegales no tienen estos dispositivos, por lo que hasta ahora no eran detectadas”, explicó Sapienza.

Con este nuevo radar, las aeronaves sospechosas podrán ser interceptadas por la Fuerza Aérea mediante aviones EMB-312 Tucano o A-29 Super Tucano, que podrán obligarlas a aterrizar o salir del espacio aéreo paraguayo.

“Actualmente, Paraguay no tiene una ley de derribo de aeronaves, pero con esta tecnología se podrá identificar y actuar ante vuelos no autorizados”, destacó el historiador.

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Un hito en la historia del control aéreo paraguayo

Paraguay ha tenido una trayectoria limitada en cuanto a sistemas de radar. Los primeros radares fueron adquiridos en 1980 para el entonces Aeropuerto Presidente Stroessner (hoy Silvio Pettirossi) y el aeródromo de Mariscal Estigarribia. Sin embargo, estos quedaron fuera de servicio en los años 90.

En 2010, el país adquirió un radar secundario de origen español INGRA, actualmente en uso en el aeropuerto Silvio Pettirossi, pero este solo es útil para el tráfico civil.

“Esta es la primera vez en la historia que Paraguay contará con radares primarios. Es un paso gigantesco en la vigilancia aérea del país y en la lucha contra el narcotráfico”, enfatizó Sapienza.

Perspectivas y próximos pasos

El TPS-78 será solo el primer radar de un plan mayor que busca dotar al país con seis radares fijos y tres móviles, mejorando significativamente la capacidad de monitoreo del espacio aéreo paraguayo.

Con la entrega prevista en un máximo de 30 meses y la capacitación en marcha, Paraguay se encamina hacia una nueva era en su seguridad aérea, con un sistema de control más efectivo, autónomo y soberano.