Iglesia criticó el autoaumento en el Congreso y la precarización de los jubilados

Los impopulares aumentos autoasignados por los legisladores y la especulación con los fondos jubilatorios fueron objeto de crítica en la misa de Caacupé. “Mientras los congresistas se autoasignan sueldos y sobresueldos a los jubilados se les quiere recortar el fruto de tantos años de trabajo honesto, fatigoso, perseverante”, objetó el monseñor Valenzuela.

El monseñor Ricardo Valenzuela leyó la Carta al Pueblo Paraguayo donde en tramos la Iglesia Católica manifestó su postura con respecto a los grandes problemas que aquejan a la población y ante la corrupción de la clase política.

La situación de de precariedad que aqueja a los adultos mayores no le es ajena a la Iglesia y así lo manifestó el monseñor Ricardo Valenzuela durante la lectura de la carta, afirmando que es inmoral especular con la jubilación de los ancianos.

“Es imposible no pensar en este punto en nuestros queridos jubilados, cuyos fondos están siempre en zozobra y a quienes el seguro social considera una carga y por consiguiente los trata con desmedro y menoscabo a la hora de recibir atenciones de salud. No se puede especular con la jubilación de los ancianos, de las personas que trabajaron tres décadas para poder vivir honradamente sus días postreros. Sumar y restar y hacer cálculos en desmedro de los jubilados es idolatrar un sistema económico y convertirlo en un ídolo que devora a nuestros padres, abuelos y abuelas”, cuestionó.

Valenzuela contrastó esa situación con los aumentos que se autoasignaron los legisladores del Senado y la Cámara de Diputados, mientras la población vulnerable tiene que padecer.

“Mientras los congresistas se auto asignan sueldos y sobresueldos a los jubilados se les quiere recortar el fruto de tantos años de trabajo honesto, fatigoso, perseverante”, expresó.