Connect with us

Política

Senado podría duplicar penas a beodos al volante en casos de accidentes fatales

En el Senado se impulsa un proyecto de ley que busca aumentar las penas para conductores que, bajo los efectos del alcohol o drogas, provoquen accidentes de tránsito con víctimas fatales.  Consideran que la legislación actual, que contempla hasta ocho años de cárcel en casos agravados de homicidio culposo, es insuficiente para hacer frente a la gravedad de estos hechos, especialmente cuando la conducción en estado de ebriedad es un factor determinante.

“Lo que modifica o cambia de la culpa al dolo es la intencionalidad”, explicó uno de los impulsores de la iniciativa, el senador opositor Eduardo Nakayama en una reciente entrevista a la 1080 AM, refiriéndose a la diferencia entre un acto deliberado y uno negligente. A su criterio, los accidentes causados por conductores ebrios deben considerarse como “culpa grave”, dado que las personas que eligen manejar bajo la influencia de alcohol o drogas asumen conscientemente un riesgo mayor.

Propuesta de aumentar las penas al doble

En su propuesta, Nakayama sugiere que la pena máxima en estos casos se eleve al doble, pasando de ocho a quince años de prisión. “No es posible que la expectativa sea solamente de dos años por manejar ebrio, y hasta ocho años en casos agravados de homicidio culposo. Esto debe aumentar”, aseveró. Para el senador, esta medida no solo busca justicia para las víctimas, sino también disuadir a los conductores de asumir conductas irresponsables.

Una necesidad urgente para reducir accidentes

La propuesta de Nakayama se produce en un contexto en el que el número de accidentes de tránsito es una de las principales causas de muerte en Paraguay. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, el alcohol es un factor importante en una gran proporción de estos incidentes. Nakayama lamenta que “con impunidad se sigan sucediendo accidentes tan horribles”, y considera que el endurecimiento de las penas podría ser un paso efectivo para reducir estos trágicos sucesos.

Un llamado a la conciencia

Nakayama subrayó que su propuesta no pretende castigar de manera desproporcionada a los conductores, sino generar un impacto que incentive prácticas de conducción más seguras y responsables. “No se trata de salir a matar”, enfatizó el senador, al tiempo que destacó la diferencia entre un accidente leve y uno en el que las consecuencias fueron agravadas por decisiones imprudentes. En su opinión, no puede seguir tolerándose la impunidad frente a los accidentes causados por conductores irresponsables, y el aumento de las penas busca ser un mensaje claro de que las autoridades no permitirán que estos comportamientos queden sin sanción adecuada.

Click para comentar

Dejá tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Los más leídos

error: Content is protected !!