La Corte tiene allanado el camino para reivindicar a Kattya, sostiene su defensa

El abogado Robert Marcial González, abogado de la exsenadora Kattya González habló acerca de la decisión del Ministerio Público que pidió la desestimación de las denuncias contra José Luis Torales y María Soledad Blanco, ex asesores de Kattya, debido a que no se encontraron pruebas que lleven a un cobro indebido de honorarios.

“Desde el punto de vista jurídico el rigor de verdad el tema no tiene incidencia, debido a que por estrategia procesal, el planteo ante la Corte cuestionó o solicitó el control de Constitucionalidad únicamente sobre las reglas de juego, es decir, a la Corte se le facilitó el trabajo, se le sacó esa carga de decidir esas cuestiones propias de la política”, sostuvo.

“Simplemente, se le dijo que controle la regularidad del procedimiento previsto para validar una decisión tan relevante como la perdida de investidura de un parlamentario, porque el senado violó grosera y abiertamente su propio reglamento”, expresó.

“Pero desde una mirada política el tema es relevante porque se hizo justicia con dos ciudadanos que habían sido objetos de una persecución miserable, y volviendo al tema de Kattya, ni siquiera tenía sustento esta acusación para justificar el atropello”, dijo.

“La Corte tiene allanado el camino y se están desenmascarando oficialmente que Kattya fue víctima de una maniobra desvergonzada y al margen del Derecho”, añadió.

“Esperemos que la Corte este a la altura. Todos los ciudadanos comunes necesitamos saber si encontramos en la Corte Suprema de Justicia un espacio donde podamos reivindicar nuestros derechos, un espacio de tutela judicial efectiva, porque en la medida en que la Corte no emita un mensaje claro de que va a proteger derecho y garantía estamos todos en jaque”, comentó.

“Que la Corte tolere un atropello semejante sería la claudicación absoluta, sería entregar la bandera de la República, sería que ellos han decidido humillarse ante el poder político y eso desataría un conflicto institucional muy importante y por qué no, una convulsión social”, señaló.