Familiares de secuestrados renuevan exigencias al gobierno

A un mes y medio del secuestro del exvicepresidente Oscar Denis Sánchez, la única novedad palpable son los anuncios que harán esta mañana su familia, y las familias de los otros secuestrados, el policía Edelio Morínigo y el ganadero Félix Urbieta, quienes convocaron a una rueda de prensa a las 11:00 en el ex Seminario Metropolitano.

La convocatoria de los familiares de las víctimas de los grupos armados irregulares que operan en el norte, cuyo título, “Que vuelvan los tres”, adelanta la tónica de la reunión, se da unos días después que el ministro del Interior Euclides Acevedo sorprendiera al país con la noticia de un inminente rescate de Denis, y también de Morínigo y Urbieta, desaparecidos desde 2014 y 2016, y de quienes nadie suponía que estuvieran todavía buscándolos.

El secretario de Estado, sin embargo, parecía muy convencido de sus palabras, con “cierto grado de verosimilitud”, según dijo. Destacó la recompensa de Gs. 1.000 millones ofrecida por el gobierno de Mario Abdo Benítez a quien aporte información sobre el paradero de Denis y sus captores. “Está rindiendo sus frutos”, afirmó. Pero, esto fue el viernes, y la “extracción inminente” de Denis, de la que habló Acevedo, está tardando en concretarse.

Lo que digan esta mañana la familia Denis, cuya vocera es Beatriz, la hija mayor del político y ganadero de Concepción; la madre del policía Morínigo, Obdulia Florenciano; y las hijas del ganadero Urbieta, quizás guarde relación con estos anuncios de Acevedo, que hasta el momento no han pasado del terreno discursivo.

Lo de Acevedo encaja perfectamente con la tónica del Ministerio Público que hace dos semanas imputó a seis supuestos captores de Denis, en un anuncio hecho por el fiscal de la causa Federico Delfino que presentó a los medios los nombres de los imputados, quienes continúan con paradero desconocido y supuestamente en poder del exvicepresidente, y cuyo anuncio no convenció para nada a la familia.

Los Denis jugaron limpio desde un principio, cumplieron con las demandas del grupo armado que se llevó al jefe de la familia; también cumplieron con los pedidos del gobierno y se llamaron a silencio varias semanas, hasta que la falta de resultados hizo que las hijas renovaran sus apariciones públicas y sus exigencias al presidente Abdo Benítez de devolverles con vida a su padre.

Desde entonces no han cejado en sus esfuerzos por mantener el drama familiar en la agenda política, sumando a las familias de Edelio Morínigo y Félix Urbieta, cuyos secuestros parecían ya olvidados.

El secuestro

Óscar Denis fue secuestrado el miércoles 9 de septiembre por una supuesta brigada indígena del Ejército Paraguayo del Pueblo (EPP), junto a uno de los trabajadores de su estancia, el joven indígena Adelio Mendoza, que fue liberado cinco días más tarde.

La Fuerza de Tareas Conjuntas (FTC), que tiene su base de operaciones en el Comando Nacional de Defensa Interna (CODI), desplegó unos 1.000 hombres, blindados y transporte de tropas en la zona, además de contar con el asesoramiento de expertos colombianos en contrainsurgencia, con tecnología de rastreo de última generación; esfuerzos que sin embargo no han rendido los resultados esperados hasta el momento.

El secuestro de Denis se suma a otros 14 plagios perpetrados por el EPP y constituye una fuerte presión para el gobierno de Abdo Benítez, de parte de los distintos sectores políticos, ciudadanos y empresariales, especialmente del gremio de ganaderos al que pertenece el exvicepresidente.

En un principio, la liberación de Mendoza aumentó las expectativas de la familia por el pronto regreso del ex vicepresidente, pero las esperanzas pronto se desvanecieron con el correr de los días y la falta de noticias.