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Opinión

El Parque Guasu. La biodiversidad en riesgo

POR Esther Prieto
Jurista, especialista en derechos humanos por la Universidad de Estrasburgo, Francia.

A inicio del año 2021, la Comisión de Planificación, Urbanización y Ordenamiento Territorial de la Municipalidad de Asunción llamó a una audiencia con el objetivo de modificar el Plan Regulador de la ciudad, el que había sido aprobado por Ordenanza Municipal N.º 163 de 2018 “que unifica y actualiza el Plan Regulador de la Ciudad de Asunción”, cuyo ítem f) “establece como zona especial el aeropuerto internacional y su zona de influencia”. Las opiniones vertidas en dicha audiencia fueron comentadas en El Nacional, en su edición del 28 de febrero de 2021. En ese contexto, en abril de 2022 dos concejales municipales instaron a la Intendencia Municipal a defender el Parque Guazú Metropolitano ubicado en la zona del aeropuerto internacional, ante la posible construcción de un edificio que sería destinado a la Universidad Politécnica de Taiwán, con un espacio previsto de 11 hectáreas dentro del parque.

En el año 2010, el parque con 125 hectáreas de superficie había sido inaugurado por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) como territorio de preservación de sus habitantes genuinos, aves y mamíferos de especies singulares, convirtiéndose en poco tiempo en el sitio preferido de esparcimiento para las familias del área metropolitana. Hoy, la enorme riqueza de biodiversidad del parque se halla en peligro, ante la posibilidad de la construcción de dicho local universitario, por lo que la ciudadanía viene a manifestarse a través de una campaña de recolección de firmas, que ya ha llegado a cerca de 25.000 adherentes. Son voces ciudadanas que, junto con la organización “Salvemos el Parque”, se pronuncian a fin de evitar la mencionada construcción, en salvaguarda de la riqueza de la biodiversidad.

El terreno del parque es propiedad del Ministerio de Defensa [1] y se halla ubicado en el Municipio de Asunción, cuenta catastral N.º 15-0192-0, inscripta en el Registro General de la Propiedad como Finca N.º 15.784, y cedida en usufructo al MOPC. El Municipio de Asunción ejerce el control de las construcciones en su jurisdicción a través de las ordenanzas, de modo que para la construcción se necesita su aprobación. Ocurre que el proyecto referido se opone a la Ordenanza Municipal 163/18, la que aprobó el Plan Regulador de la ciudad de Asunción que establece reglas específicas para las construcciones en la zona del Aeropuerto internacional, donde se ubica el Parque Guazú, por lo que en el año 2019 quedó trabado el proyecto, con un acuerdo de término de contrato con la empresa constructora, que había sido adjudicada. Varias instituciones públicas han intervenido en este proceso.

El proyecto de construcción había sido pactado con un acuerdo -carta intención- firmado en el Ministerio de Industria y Comercio por el entonces ministro Gustavo Leite y el embajador de Taiwán, Alexander Yui, en el año 2017, con una evaluación previa de impacto ambiental que, según estudio de expertos, adolece de errores. Más tarde, en mayo de 2018, se promulgó la ley que crea la Universidad Politécnica de Taiwán.

En realidad, el acuerdo es frágil, ya que no ha tomado en cuenta que Paraguay ratificó el Convenio sobre Diversidad Biológica en el año 1993 [2], adoptado durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medioambiente y Desarrollo “Cumbre de la Tierra”, celebrada en Río de Janeiro, Brasil, en el año 1992. En su tópico sobre “Conservación in situ”, el convenio establece que “el Estado parte promoverá la protección de ecosistemas y hábitats naturales y el mantenimiento de poblaciones viables de especies en estados naturales “art.8. La palabra hábitat está escrita en  mayúscula en el texto original, debido a la relevancia que el convenio le otorga.

En otro punto, el convenio establece en el tópico de “Educación y Conciencia Publica” que “los Estados Parte cooperarán, según proceda, con otros Estados y organizaciones internacionales en la elaboración de programas de educación y sensibilización del público, en lo que respecta a la educación y la utilización sostenible de la diversidad biológica”, art.13. Resulta irónico que la entidad educativa que tiene a su cargo la sensibilización sea la que pretende ocupar parte de la reserva protectora de la biodiversidad. Claro que Taiwán no es Estado Parte de la normativa internacional, porque no ha sido hasta hoy aceptado como miembro de las Naciones Unidas

La reacción de la ciudadanía es razonable ya que Paraguay tiene la costumbre de no proteger los compromisos contraídos ante la comunidad internacional. Lo digo porque desde la ratificación del convenio referido, puedo traer a la vista una serie de situaciones en las que nuestras áreas silvestres protegidas, no solo fueron amenazadas, sino avasalladas y destruidas sin contemplación. Algunas pocas se salvaron, gracias a la manifestación de ambientalistas, intelectuales, indigenistas y otros exponentes de la población. Recuerdo, porque estuve con ellos, cuando integrantes de la Comunidad Aché de Ypetimi, llegaron al Ministerio del Ambiente con sus relucientes flechas y  rostros pintados, con señales de guerra, como emblema para salvar el Parque Nacional Caazapá, un pedazo de su territorio ancestral, logrando un acuerdo firmado en el año 2010. Sin embargo, aunque protegido por dicho acuerdo, el parque Caazapá sigue siendo víctima de piratas de los pocos bosques que le queda.

Son muchos las desaciertos y contradicciones legales que se plantean en el caso del Parque Guazú Metropolitano,  por lo que sería pertinente suspender definitivamente la construcción de la universidad en el predio del parque, y dejar que la biodiversidad se encargue del desarrollo de su propia vida, con la riqueza brindada por la naturaleza. El paradigma del “buen vivir” en las culturas indígenas promueve la sostenibilidad de toda la Creación, a través de un sistema de equilibrio en el relacionamiento con el tekoha, fuente proveedora de alimentos, y en la práctica cotidiana del tekó porá para la buena convivencia. La protección de la biodiversidad ha sido históricamente sostenida por todos los pueblos indígenas del mundo, quienes, con su sabiduría nos muestran el camino correcto que es simple: Cuidar los bienes de la naturaleza es salvar la vida. ¡¡Felices Pascuas!!

 

[1] Relatorio de Impacto Ambiental, RIMA CTCA N.º 1-982 Ministerio de Obras Públicas, año 2016
[2] Ley N.º 253/1993
1 Comment

1 Comentario

  1. Adela Fiori

    17 de abril de 2022 at 16:29

    👏👏👏👏👏 Totalmente de acuerdo.Una universidad no debe construirse jamás en un Parque, en un espacio verde público importante con su flora y fauna caractetísticas y ciudadanos q la usan para mejorar y mantener la salud.
    El Parque Guasú es salud!!!

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