El 2022, la oportunidad de elegir

El año 2022 presenta varios desafíos. Una de las primeras cuestiones que nos resuena es que este año los partidos y movimientos políticos elegirán a sus candidatos, quienes pugnarán por la presidencia y los escaños del Congreso en el año 2023. Sin embargo, no es lo único que el Paraguay tendrá que elegir.

¿Qué más tendrá que elegir Paraguay? El país tendrá que elegir qué postura tomar en las negociaciones de Itaipú en el año 2023 al finalizar el pago de la deuda. ¿Queremos mantener la tarifa que hoy tiene el componente de servicio de la deuda y con eso generar un fondo? O ¿Queremos bajar la tarifa y aprovechar el uso de la energía? Y a su vez, si vamos por una u otra opción, uno se encuentra con la pregunta de ¿para qué?… fondo para educación, o salud, o infraestructura o para todo esto, o energía barata para hogares o industrias, entre muchas otras opciones.

El año 2022 también está marcado por eventos deportivos de gran impacto como el Mundial de Fútbol a realizarse en Qatar, donde por cierto la Albirroja tiene un panorama muy complicado para clasificar. No obstante, en cuanto a eventos deportivos se refiere, en Asunción se estarán desarrollando los juegos ODESUR, ocasión en la que para mostrar nuestra mejor cara tendremos que elegir entre generar reparaciones superficiales o profundas de infraestructuras (especialmente de las calles).

En la entrada de este año no se pueden dejar de mencionar las perspectivas económicas, para el que se espera que el PIB crezca 3,7 %. Este crecimiento se ve amenazado por la condición climática de sequía que ha marcado el cierre de la última parte del año anterior. Las primeras cosechas de la soja no han logrado tener un buen rendimiento y lo poco que se ha cosechado tampoco cumple con los estándares de calidad para provisión industrial, según indican los referentes del sector. El gobierno ha optado por ayudar a los más pequeños productores, medida que parece ser razonable con la situación actual. Aquí es donde debemos elegir seguir los programas tradicionales o potenciar la introducción de tecnologías, incluyendo la utilización de energías alternativas en zonas que las requieran y las que permitan generar resiliencia en el sector agrícola.

Relacionado a la decisión sobre la tarifa de Itaipú, es momento también de elegir entre potenciar a otros sectores de la economía ¿desarrollo industrial?, ¿ser un hub logístico?, o centrarnos en aquello que ya nos hemos especializado (agropecuario) o por qué no, a ambos. También es buen momento para elegir los programas que ayuden a formalizar la economía. La pandemia nos ha resaltado las enormes dificultades causadas por un sistema donde predomina lo informal.

En cuanto a normativas, tampoco debemos dejar de lado que es momento de elegir en tratar la nueva Ley de Contrataciones Públicas (donde incorporemos o no reservas de mercados a Mipymes), la nueva Ley de Servicio Civil, las innovaciones en el régimen de seguridad social, la modernización de la Ley de Responsabilidad Fiscal, entre otros.

Las cuestiones sobre las que debemos tomar decisiones y elegir, en este año, van más allá de optar por uno u otro precandidato para las elecciones presidenciales. En ese sentido, el miedo de que recursos estatales sean destinados a actos proselitistas siempre está presente y estos recursos son bienes muy escasos, que, si elegimos utilizarlos de mala manera, es probable que año tras año sigamos escribiendo artículos como este y lamentando que hemos perdido un tiempo valioso.

A ellos el mensaje de que el discurso “de que, si se manejan bien los recursos, según el informe de un organismo internacional, igual no alcanza” ya no va más. Si bien puede que los recursos no alcancen para solucionar todo hoy, existen pequeñas inversiones que pueden generan grandes resultados. Les dejo un solo ejemplo: Según un estudio del Banco Mundial, tener un aula escolar con buena iluminación, con protección contra el calor y el frío, que utilice estímulo de colores y complejidad visual, permite mejorar en 16 % el rendimiento de los alumnos. Que este 2022 sea un año de buenas elecciones.

Investigación para el Desarrollo

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