Opinión
Otro golpe pandémico: migración de estudiantes de colegios privados a instituciones públicas
La pandemia se ha quedado en el globo, algunos países pudieron salirse del atolladero que eso implicaba, especialmente China, país donde se originó la catástrofe. Paradójicamente, los amigos chinos, hoy en día, están disfrutando de la vida como si no hubiera pasado nada. Los entretelones del origen del virus siguen en un cuento chino que creo que pasa a la historia como uno de los secretos imposibles de poder revelarlo. Las informaciones en torno a la incubación de este virus nos torturarán por mucho tiempo.
La pandemia trajo una serie de situaciones complejas, tanto negativas como positivas, las negativas ya las tenemos en nuestra piel, pues se vincula con el aspecto financiero, una economía lastimada y difícil de reactivarla a corto plazo, algunos referentes de la economía local van en contra de la tesis de una recesión económica; arguyen que la economía se ha levantado en esta pandemia.
En el sector educativo, la pandemia ha atacado con todo, hasta ahora, las clases siguen en modalidad híbrida y totalmente virtual. En el nivel universitario sigue en modo virtual. Las consecuencias altamente negativas para el estudiantado será difícil y complicado evaluar a corto plazo. Se deberán contratar especialistas que puedan medir con parámetros e instrumentos confiables el nivel de daño que esta pandemia ha hecho al sector educativo en todos los niveles del sistema educativo paraguayo.
La gestión del gobierno para paliar los embates de la pandemia se ha visibilizado que fue muy precaria y con muchos altibajos, quizás esto le costó el puesto al exministro de educación, Eduardo Petta. Ahora, el actual, está aún en luna de miel con el estamento educativo, tímidamente va mostrando lo que puede hacer para contener a la comunidad educativa del país. Los padres no están contentos aun con el actual sistema paliativo aplicado en esta pandemia. ¿Dos años perdidos? ¿Envíos de materiales en “pdf”, es la solución? Son preguntas que como padre de familia se hace a la hora de reflexionar sobre el momento educativo actual.
El factor económico afectó sustantivamente al bolsillo de muchos paraguayos, y de todas las clases económicas, incluso afectó y golpeó a las familias cuyos hijos van a colegios privados, este fenómeno se puede constatar con la matrícula de este año en las instituciones educativas públicas. Según datos publicados en varios medios de prensa, se estima que cerca de 23.000 estudiantes del sector privado migraron a instituciones públicas.
¿Cómo podemos interpretar este fenómeno? Quizás alguna respuesta la encontremos en la economía subterránea que va por los 65 %, o más incluso. Esto visibiliza que la sociedad paraguaya está segmentada en grupos bien identificados: familias con seguridad financiera que apuestan a los colegios privados que ofrecen una mejor calidad de formación y un grupo de familias que, por inseguridad laboral, o perdida de los puestos de trabajo permanecen o apuestan a las instituciones públicas que no implican mucha erogación monetaria. La migración de colegios privados a colegios públicos quizá se deba al factor de la informalidad de la economía del país. Para cerciorarnos de los factores que inciden en el fenómeno de la migración el MEC tendría que realizar estudios cualitativos cuantitativos de este fenómeno.
El cierre de pequeñas instituciones privadas, debido a la pandemia que originó una deserción y abandono de las aulas, fue un golpe y llamada de atención a las autoridades del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC). Un efecto contradictorio para un país emergente y carente de modernización del sistema educativo que necesita la apertura de más instituciones de enseñanza para paliar el déficit en la formación actual del estudiantado paraguayo.
El fenómeno de migración de estudiantes del sector privado al público no es solo de Paraguay, sino también internacional, es decir, en Latinoamérica: Panamá, México, Argentina, Venezuela, entre otros.
Definitivamente estamos ante el fenómeno de las visibilizaciones. Este virus, no solo trajo miserias y muertes, sino también un estirón de orejas a los gobernantes y controladores de la cosa pública. Estos faltaron a su pueblo, a sus electores, descuidando lo esencial para el desarrollo de sociedad: Educación y Salud, ejes fundamentales para la garantía del desarrollo óptimo de una nación.
Con un pueblo sumido en la ignorancia y, además, enfermo, no se puede evolucionar como individuo. Los responsables de la desidia en la cual está sumida la sociedad, deben ser juzgados con la vara más alta de la justicia.
Este artículo se enriquecerá en las próximas entregas con algunas entrevistas con referentes de la comunidad educativa.
(*) Doctor en Lingüística, Lenguas, Filosofía, Educación y Didáctica.
Universidad de Kiel, Alemania.
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Olga Beatriz Amarilla
24 de mayo de 2021 at 23:28
Excelente artículo Doctor, y también debemos cultivar el hábito de la lectura, y sin problemas los que no tiene acceso a internet para las clases virtuales!