Carmen Alvarenga y su valiente lucha: “El cáncer de mama no es fácil, pero no hay que rendirse”

En pleno mes de la concienciación sobre la detección precoz del cáncer de mama, las historias positivas pretenden transmitir fuerza a quienes enfrentan la dura batalla y alerta a quienes deban acudir a sus controles constantes.

En una conversación llena de valentía y esperanza con El Nacional, Carmen Alvarenga, sobreviviente del cáncer de mamas, relata su intensa lucha contra la enfermedad desde que fue diagnosticada en 2015. A través de su experiencia, Carmen comparte los momentos más duros que enfrentó, desde el primer descubrimiento del nódulo hasta las múltiples quimioterapias y cirugías que marcaron su camino.

A lo largo de los casi 10 años de tratamiento, su fe en Dios, el apoyo de su familia y la fuerza interior fueron sus pilares fundamentales. Hoy, tras superar esta difícil etapa, su mensaje está enfocado en la importancia de la detección temprana y el poder de no rendirse ante la adversidad. Carmen nos invita a ver la vida con optimismo y a no dejar que el miedo defina el camino.

– ¿Podrías darnos un breve resumen de lo que fue tu caso?

A mí se me detectó en el 2015, palpándome los senos, un nódulo. Enseguida fui al mastólogo, me dijo para hacer los estudios, creo que los mastólogos enseguida se dan cuenta cuando el nódulo es maligno, pero hay que confirmar con los estudios. Empezando por la mamografía, ecografía, tras varias consultas confirmamos. En esos momentos de palpación, nunca pensé que a mí me podría llegar a pasar ese momento de decir “tengo cáncer de mama”. Para ratificar el diagnóstico hicimos también resonancia magnética, después la biopsia donde te confirman esa enfermedad.

– ¿Qué fue lo más importante que te dio ánimos y aliento para sobrellevar el tratamiento?

Es lo peor que te puede pasar recibir esa información, antes de eso uno siempre tiene esperanza, pero cuando llega el positivo, es sinónimo de muerte, es como que llega la muerte en vida, pero gracias a Dios, desde ese momento, me contuvo él al mirar mis estudios. Me dijo que él es el profesional que me va a sacar cualquier duda de mi caso, luego me contuvo mi familia, mi esposo y mis hijos. Pero sobre todo estaba Dios, le pedía que me pueda contener la prueba que me daba esta enfermedad.

– Sin duda, es el momento de mirar hacia adelante ¿Cómo tomaste la noticia cuando supiste que superaste el cáncer?

Desde ese momento empecé a combatir la guerra de esa enfermedad y yo, empezaron las consultas con el oncólogo, gracias Dios tuve los medicamentos necesarios, me llegó con 16 quimioterapias, 28 radioterapias, la mastectomía y el tratamiento hasta hoy en día que es con hormonas. Todos estos procesos de casi 10 años, yo estoy en 8 días de sobrevivencia, hasta hoy en día sigo con mi tratamiento y controles. Cada vez que me tengo que hacer los estudios y no me sale nada, para mí es volver a nacer, porque no es fácil.

No es fácil, pero tampoco es imposible. Con esta lucha, ganaremos la batalla.

– Por último, quisiera pedir un mensaje de aliento para todas aquellas compatriotas que están atravesando la enfermedad.

Le puedo recomendar a mis amigas, a mis congéneres, sobre todo a las que tiene más de 40 años, que se hagan los estudios para la detección temprana, una vez que se detecta temprano, es mucho más llevadero el tratamiento. Decirle mucha fuerza a las mujeres y si de por ahí no hay mamógrafo disponible, busquen, que seamos responsables como mujeres para que nuestras familias estén con nosotros. No dejemos que otras personas decidan, busquemos nosotras mismas, porque no es fácil sobrellevar una enfermedad cuando es tardío, porque esta guerra tenemos que combatirla temprano, con Dios, la familia, el médico, el tratamiento.