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Inteligencia artificial de diagnósticos: medicina e informática para salvar vidas
Dr. Oxades Gamarra. Foto: Gentileza.
Dentro de los constantes avances tecnológicos, la relación de la sociedad con la inteligencia artificial (IA) es compleja y variada. Por un lado, hay un gran entusiasmo por las posibilidades que esta herramienta ofrece, como por ejemplo, mejorar la atención médica, optimizar procesos en diversas industrias y facilitar tareas cotidianas.
Sin embargo, mientras la sociedad reconoce el potencial positivo de la IA, también hay un nivel considerable de preocupación y escepticismo sobre su impacto futuro, también existe un temor significativo en torno a su crecimiento.
Pero un equipo de profesionales, de la mano del Dr. Oxades Gamarra, concretaron una innovadora manera que podría salvar cientos de vidas. Gamarra lidera un proyecto revolucionario que promete transformar la forma en que se diagnostican los accidentes cerebrovasculares (ACV).
Su trabajo se centra en el desarrollo de herramientas avanzadas que emplean inteligencia artificial (IA) para analizar imágenes médicas, como resonancias magnéticas y tomografías computarizadas.
Desde El Nacional, nos pusimos en contacto con el profesional, a fin de conocer más detalles sobre esta propuesta que busca mejorar la calidad de vida de los pacientes y salvar vidas.
– ¿Qué le motivó la creación de este proyecto de innovación?
La motivación principal para la creación de este proyecto surge de la necesidad de mejorar la detección temprana y precisa de accidentes cerebrovasculares (ACV). En Paraguay, como en muchos otros países, los ACV son una de las principales causas de mortalidad y discapacidad. La idea de utilizar algoritmos de inteligencia artificial (IA) para este propósito nació de la observación de que, aunque existen tecnologías avanzadas, no siempre están disponibles en todos los centros de salud, y el tiempo es un factor crítico en la intervención en casos de ACV.
El Dr. José Luis Vázquez, el Dr. Diego Pinto, y el Dr. Carlos Méndez, junto con un equipo técnico altamente calificado, se unieron con la visión de desarrollar una herramienta que pudiera ser utilizada por médicos de guardia en cualquier hospital, para tomar decisiones rápidas y bien informadas. Esta colaboración interdisciplinaria, que integra conocimientos médicos e informáticos, añadió un nivel adicional de motivación para avanzar en este innovador proyecto, ya que en Paraguay este tipo de trabajos rara vez se llevan a cabo.
A través del proyecto denominado “Diagnóstico de accidente cerebrovascular (ACV) por medio de imágenes utilizando algoritmos de inteligencia artificial” implementado por el Grupo Oxades S. A., recibimos un incentivo por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) a través del Programa Proinnova, que recibe apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
– ¿Podría explicarnos cómo los algoritmos de IA están mejorando la precisión y rapidez en la detección de ACV en comparación con los métodos tradicionales?
Los algoritmos de inteligencia artificial desarrollados en este proyecto están diseñados para analizar rápidamente imágenes médicas, como tomografías computarizadas (CT), identificando patrones que son indicativos de un ACV. A diferencia de los métodos tradicionales, que dependen en gran medida de la observación manual por parte de un radiólogo o médico especialista, los algoritmos de IA pueden procesar grandes cantidades de datos en segundos y con una precisión notable.
Esto no solo permite una detección más rápida, sino también más precisa, ya que los algoritmos están entrenados para reconocer incluso los signos más sutiles de un ACV, que podrían pasar desapercibidos en un análisis convencional. Esta combinación de rapidez y precisión es crucial para asegurar que los pacientes reciban el tratamiento adecuado lo antes posible, lo que puede hacer la diferencia entre una recuperación completa y la discapacidad permanente.
– ¿Cuáles son los mayores desafíos que enfrentó en el desarrollo de estas herramientas?
Uno de los mayores desafíos en el desarrollo de estas herramientas fue la integración de conceptos informáticos y médicos, un aspecto en el que los responsables técnicos desempeñaron un papel crucial. En Paraguay, este tipo de trabajos interdisciplinarios no es común, y encontrar un lenguaje común entre ambos campos requirió un esfuerzo significativo. Además, el proceso de entrenar los algoritmos de IA con datos de alta calidad y asegurarse de que los modelos fueran lo suficientemente robustos como para manejar la variabilidad en las imágenes médicas también fue un reto.
Otro desafío importante fue garantizar que la herramienta no solo fuera precisa, sino también fácil de usar por los médicos, muchos de los cuales pueden no estar familiarizados con las tecnologías más avanzadas. La implementación de una interfaz de usuario intuitiva y el diseño de un sistema que pudiera integrarse sin problemas en el flujo de trabajo clínico existente fueron aspectos cruciales que requirieron una atención especial.
– ¿Qué impacto espera que tenga esta tecnología en la práctica médica, especialmente en términos de intervención temprana y reducción de secuelas en pacientes con ACV?
Esperamos que esta tecnología tenga un impacto significativo en la práctica médica, particularmente en la mejora de los tiempos de respuesta en casos de ACV. Al proporcionar a los médicos una herramienta rápida y precisa para la detección de ACV, creemos que podemos reducir drásticamente el tiempo entre la llegada del paciente al hospital y el inicio del tratamiento. Esto, a su vez, debería llevar a una disminución en las secuelas graves asociadas con los ACV, como la parálisis y otras discapacidades permanentes.
Además, al facilitar un diagnóstico temprano, esta tecnología podría mejorar las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes, especialmente en áreas donde el acceso a especialistas en neurología es limitado. En última instancia, nuestro objetivo es que esta herramienta, sea una parte integral del protocolo de emergencia en hospitales de todo el país, ayudando a salvar vidas y reducir el impacto devastador de los ACV.
– ¿Cuál es el siguiente paso para su equipo tras el desarrollo de estos algoritmos de IA? ¿Existe la posibilidad de ampliar su uso a otros campos médicos?
Después del desarrollo y la validación de estos algoritmos de IA para la detección de ACV, el siguiente paso para nuestro equipo, es la implementación piloto en varios hospitales del país en los que nuestra empresa OXADES se encuentre presente.
Queremos asegurarnos de que la herramienta funcione en un entorno clínico real y recopilar datos adicionales para mejorar aún más su precisión y utilidad. También estamos explorando la posibilidad de adaptar esta tecnología a otros campos médicos, como la detección de otras enfermedades neurológicas o la identificación temprana de tumores. El éxito de este proyecto ha demostrado el potencial de la inteligencia artificial en la medicina, y creemos que esta tecnología puede ser expandida para abordar una amplia gama de desafíos médicos, siempre con el objetivo de mejorar los resultados de los pacientes y apoyar a los profesionales de la salud en sus decisiones críticas.
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