Autoridades investigan extraño fallecimiento de niño de 9 años en Eusebio Ayala

Un niño de tan solo 9 años falleció en extrañas circunstancias en el Hospital San Roque, ubicado en la ciudad de Eusebio Ayala, departamento de Cordillera. En principio, los médicos alertaron de que presentaba supuestos signos de maltrato cuando llegó hasta el lugar donde fue atendido hasta que se dio su deceso.

De acuerdo a los datos, fue traslado hasta el centro asistencial por su abuela y una vecina. Presentaba un golpe a la altura del tobillo, que data de al menos hace 8 días y la causa de muerte fue septicemia generalizada.

En ese contexto, el comisario Juan Ferreira, jefe de la Comisaría 7.ª de Eusebio Ayala, explicó que, si bien el fallecimiento se dio a las 13:30, la madre se presentó recién a las 14:00 para retirar el cuerpo.

“Ayer, de acuerdo al reporte médico y el informe que hemos enviado al MP, un niño de 9 años ingresó al hospital para su atención médica. Este chico quedó en observación hasta las 13:30, cuando se produjo el deceso. A las 16:00, a raíz de una llamada al 911, nos constituimos hasta el hospital para cerciorarnos de la situación. Fuimos atendidos por la médica de guardia, quien nos comentó que este chico ingresó con un cuadro de infección que tuvo a raíz de un golpe a la altura del tobillo”, dijo el jefe policial a la 650 AM.

El testimonio de sus familiares es que la lesión ocurrió supuestamente jugando al fútbol, no obstante llama la atención que recién después de ocho días lo hayan trasladado para su atención. Para los investigadores, existen hechos muy llamativos a ser aclarados.

“El cómo ocurrieron los hechos es lo que hay que investigar bien porque no es normal que un chico de 9 años pierda la vida a consecuencia de un golpe que recibió en el tobillo”, remarcó el uniformado.

Este hecho en sí ocurrió en la zona de Caraguatay, ubicado aproximadamente 30 km de la ciudad de Eusebio Ayala, “allí ellos tienen también un hospital, sin embargo, vinieron a la ciudad de Eusebio Ayala para que lo atiendan”, cuestionó Ferreira.