Nacionales
Tiempo de vacaciones: conocé Itapúa y su mística
En Itapúa se encuentran tres de las grandes reducciones jesuíticas. Foto: Gentileza.
El departamento de Itapúa se extiende en la ribera derecha del río Paraná, en su parte norte tiene una zona de tierras altas muy bien regadas por pequeños ríos y grandes arroyos. En su faja central predominan suelos aptos para la agricultura y más al sur tiene tierras bajas aptas para el pastoreo.
Su capital es la ciudad de Encarnación, cuenta con nuevas rutas de acceso, largos puentes, acondicionamiento de costas, avenidas costaneras, nuevas urbanizaciones, construcción de aeropuerto y otros emprendimientos que le confieren una nueva fisonomía, pero sin perder su identidad forjada por el proceso de incorporación de colectividades extranjeras que le confieren una estampa cosmopolita.
Por la calidad y diversidad de su gente, por el volumen y variedad de su producción y por su clima, este departamento es conocido por sus carnavales y playas concurridas en verano. En sus distritos viven colectividades de alemanes, ucranianos, holandeses, belgas, japoneses, brasileños, eslavos, polacos e inmigrantes de otra procedencia que se integraron totalmente a la forma de vida nacional, pero sin perder sus rasgos culturales originarios.
Itapúa alberga a 30 distritos municipales diseminados a lo largo de las rutas 1 y 6, ruta Graneros del Sur o la ribera derecha del río Paraná. Todos ellos cuentan con servicios turísticos de buena calidad.
Reducciones jesuíticas
El departamento de Itapúa es el depositario de tres de las grandes reducciones jesuíticas que existieron en el Paraguay: Santísima Trinidad del Paraná, Jesús de Tavarangué y San Cosme y San Damián.
Trinidad es una de las más interesantes y sugestivas ruinas jesuíticas entre todas. Es la reducción mejor conservada y más extensa del país. Fue fundada en 1706 y contaba con una población de 3.000 indígenas guaraníes. Fue redescubierta cerca de dos siglos después de su abandono. Cuenta con una Plaza Mayor, lugar de reunión del pueblo y un Museo Jesuítico localizado en la antigua sacristía, donde se pueden apreciar esculturas y una maqueta de la misión. Sus principales arquitectos fueron los padres Juan Bautista Prímoli, de Milán, y el catalán José Grimau. No totalmente concluida, esta misión poseía una de las mayores y más bonitas iglesias. Esta reducción cuenta con el mayor templo construido entre todos los que conforman las reducciones jesuitas
Jesús de Tavarangué se encuentra casi frente a Trinidad, su iglesia no llegó a ser terminada debido a la expulsión de los Jesuitas del país. Su concepción arquitectónica era totalmente diferente de las otras, en estilo morisco, único en todas las reducciones. Fue fundada en 1685 a orillas del río Monday, aunque el asentamiento tuvo que mudarse varias veces por la hostilidad de los brasileños que los atacaban y llevaban como esclavos, hasta llegar a lo que hoy queda a 38 km de la ciudad de Encarnación. Llegó a tener cerca de 3000 habitantes para 1750. Ambas Reducciones han sido declaradas Patrimonio Universal de la Humanidad en 1993 por Unesco.
-
Destacado
Peña deja la cumbre del G20 en ambulancia tras sentir dolor en el pecho
-
Lifestyle
“Bungee jumping training”: saltar para estar en forma
-
Política
Falleció el abogado José Fernando Casañas Levi
-
Deportes
¿No habrá premiación si Olimpia grita campeón este domingo?
-
Deportes
Cuando Lionel Messi no conocía a Antonio Sanabria
-
Agenda Cultural
Paraguay e Irlanda celebran el legado de Madame Lynch
-
Deportes
¡Olimpia aguanta con uno menos y conquista su estrella 47!
-
Política
En redes sociales despiden a Casañas Levi