¿Cómo prevenir accidentes por animales ponzoñosos en el hogar?: consejos del Ministerio de Salud

Edgar Sanabria, encargado de Vigilancia de Accidentes por animales ponzoñosos del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), brindó importantes recomendaciones para prevenir accidentes relacionados con animales ponzoñosos, como los alacranes, que son cada vez más comunes en los hogares. Sanabria subraya la importancia de tomar medidas preventivas para mantener a salvo a las familias y sus mascotas.

En primer lugar, Sanabria enfatiza que los alacranes suelen encontrarse en lugares húmedos y oscuros, como baños y cocinas, por lo que recomienda la instalación de tela mosquitera en los registros, una protección efectiva y económica que cuesta aproximadamente G. 15.000. Asimismo, es crucial evitar la presencia de cucarachas e insectos, ya que estos sirven de alimento para los alacranes.

Una sugerencia interesante que ofrece Sanabria es la utilización de luz ultravioleta, la cual permite a las personas observar y detectar la presencia de estos arácnidos. Para ello, recomienda adquirir linternas de luz ultravioleta y apagar todas las luces en el entorno para maximizar la visibilidad. Los alacranes, al ser expuestos a esta luz, se tornan fluorescentes y se vuelven más fáciles de distinguir en la oscuridad.

El experto advierte sobre las consecuencias de las picaduras de alacranes en las mascotas. Menciona que los perros, menos hábiles que los gatos, suelen ser picados en el hocico, lo que puede tener graves consecuencias para su salud.

Finalmente, Sanabria desaconseja el uso de creolina como método para repeler y matar a los alacranes, ya que puede resultar en una intoxicación tanto para los humanos como para las mascotas. Sugiere la aplicación de las medidas preventivas mencionadas anteriormente para garantizar la seguridad en el hogar.

En resumen, la prevención y la conciencia son claves en la lucha contra los accidentes por animales ponzoñosos. Siguiendo las recomendaciones de Edgar Sanabria, las familias pueden reducir significativamente el riesgo de encuentros no deseados con alacranes y garantizar un entorno más seguro tanto para los seres humanos como para sus fieles compañeros de cuatro patas.