Rompiendo paradigmas: con memes, maestra demuestra que aprender puede ser divertido

En un mundo cada vez más globalizado, la labor docente sigue siendo un gran desafío para captar el interés de los alumnos en todas las edades y niveles. Formar ciudadanos capacitados siempre fue y seguirá siendo un reto para todos los profesores, por lo que recurrir a métodos de enseñanza que se adapten al público es clave en la formación.

Motivados por el contenido interactivo en sus redes sociales y por este Día del Maestro, desde El Nacional, contactamos con la profesora Miryam Buzó, docente del Colegio Experimental Paraguay-Brasil (CEPB) y de la Facultad de Filosofía de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) quien comentó durante la entrevista el por qué la enseñanza puede ser divertida con el método correcto.

“Utilizo las redes sociales para reflejar con humor la situación de los profesores, por ejemplo: hago memes sobre la relación con los padres, el trato con estudiantes, eventos relacionados con el ámbito educativo o noticias graciosas. Los estudiantes me siguen en las redes como Facebook, Instagram o TikTok y les gusta mi contenido, es una manera de estrechar vínculos con muchas personas y dar a conocer que la labor docente puede ser divertida”, destacó la profesional.

En cuanto a la enseñanza en el aula, la maestra indicó que considera que el uso adecuado y pertinente de la tecnología es una herramienta fundamental que los docentes de diversos niveles educativos podrían aprovechar. “Hay muchas técnicas y estrategias didácticas que se pueden utilizar para hacer las clases más atractivas y lograr un aprendizaje significativo”, remarcó.

La maestra añadió que planificar clases dinámicas forma parte de la labor de los docentes, pero esto requiere de tiempo, creatividad y esfuerzo. “Depende de la voluntad de los profesores planear actividades que motiven a los estudiantes a querer aprender. Hoy en día es todo un desafío que los niños y jóvenes presten atención en clase, debido a que están acostumbrados a la pantalla del celular o la computadora, ellos son nativos digitales y se sienten atraídos por los materiales audiovisuales”, señaló.

La profesora Miryam Buzó celebró con alegría el día del Maestro. Foto: Gentileza

La pandemia como impulso para valorar la labor pedagógica

“Con la pandemia muchas personas se dieron cuenta del valor de los docentes, de la importancia del encuentro con los profesores en el aula y cómo tuvimos que aprender rápidamente a utilizar la tecnología para seguir cumpliendo nuestras funciones. Docentes de todos los niveles educativos hemos tenido que adaptarnos a la situación de emergencia y seguir enseñando a pesar de la difícil situación que atravesábamos”, indicó.

En ese contexto, continuó relatando que es muy importante adaptarse camaleónicamente a los nuevos tiempos, no tener miedo a la tecnología, al contrario, tenerla como aliada para generar nuevos conocimientos y utilizarla como herramienta para que las clases sean más dinámicas. “A todos los colegas los felicito en nuestro día y los aliento a seguir formando mejores personas, capaces de aprender por ellos mismos”, dijo.

La función del docente no se acaba cuando toca el timbre de la salida”.

“Seguimos siendo docentes en la casa, en el supermercado, en la calle, en las redes. Nuestros estudiantes y exalumnos reconocen nuestra labor con gratitud, aunque a veces no la demuestren directamente. Tenemos la oportunidad de formar a excelentes profesionales y ciudadanos de bien, depende de nosotros enseñar a pensar, fomentar el pensamiento crítico en niños y jóvenes para que puedan tomar las mejores decisiones para su presente y su futuro”, finalizó la entrevistada.

La profesora Miryam Buzó recibió el cálido saludo de sus alumnos, hoy ya mayores de edad. Foto: Gentileza