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Censo Nacional proveerá información clave sobre población paraguaya

(Foto: Gentileza).

(Foto: Gentileza).

Este miércoles resulta un día histórico por la realización del Censo Nacional de Población y Viviendas 2022, que proporcionará información actual, completa, ubicación, condiciones, origen, tipo de actividad y otras características fundamentales de todos los habitantes de nuestro país. Esta actividad que se realiza nuevamente después de 10 años de la última oportunidad, en el 2012, resulta absolutamente crucial para la marcha del país, el desarrollo nacional y la confección de políticas públicas acordes, que puedan ser ejecutadas de manera favorable para la población paraguaya.

En Paraguay se realizan censos oficiales cada 10 años, desde el año 1950 (primer censo oficial), hasta el último censo del 2012. El organismo encargado de realizar los censos a nivel nacional es el Instituto Nacional de Estadística (INE), conocido hasta el 2020 como Dirección General de Estadísticas, Encuestas y Censos (DGEEC).

Los censos oficiales a nivel nacional se realizaron en 1950, 1962, 1972, 1982, 1992, 2002 y 2012.

El censo paraguayo del 2012 inició el 15 de octubre de 2012, donde más de 6 mil censistas aproximadamente visitaron los hogares del país para recolectar los datos del censo. El censo finalmente alcanzó una cobertura de apenas el 74,4%,2​ por lo cual el censo no pudo ser validado, ya que según los estándares internacionales, se requiere al menos un 90%-95% de cobertura para que un censo de población sea válido.

Hasta el 2002, en todos los censos llevados a cabo en el Paraguay se aplicó el método de relevamiento de datos denominado “Hecho o Facto” y en cuestionario en papel. Para el censo de 2012 se adoptó por primera vez la metodología de recolección de datos de “Derecho o Jure”. También fueron utilizados por primera vez dispositivos electrónicos de captura de datos en el terreno, en vez de cuestionarios en papel.

Gente deberá permanecer en casa

Este miércoles se detiene prácticamente toda la producción y todo el consumo durante la mayor parte del día, ya que la gente tendrá que quedarse en su casa en el horario establecido. Esto atendiendo a la importancia de contar con un censo confiable, conforme a metodología internacionalmente homologada.

El Censo permitirá a las próximas autoridades dimensionar en su justa magnitud a la población, ubicarlo en la realidad y contrastarlo con hechos verificados. Algunas de las preguntas que podrán ser respondidas serán; ¿Cómo tratar de solucionar un problema que se desconoce? ¿Cómo saber exactamente cómo se componen los distintos sectores de la comunidad y qué necesitan? ¿Cómo llevar adelante una política pública que no se puede medir ni evaluar? ¿Cómo saber si está dando resultados? ¿Cómo saber si existe una relación razonable de costo/beneficio? ¿Cómo decidir si se está yendo por el buen camino o si se tienen que probar estrategias alternativas?

De ahí la gran relevancia de tener estadística fidedigna, profesional, actualizada, comparable, que posibilite observar las tendencias, afrontar los desafíos presentes y adelantarse, tratar a tiempo e intentar desactivar las potenciales crisis futuras. Dentro de ese cuerpo estadístico, el primordial punto de partida, en cualquier país, es siempre el censo nacional.

Paraguay necesita más nunca conocerse

Y este de 2022 es especialmente significativo en Paraguay porque viene a subsanar un serio déficit que se arrastra desde la fallida experiencia de 2012, cuando se probó otro método sin los resultados esperados. Tal vez con buenas intenciones, pero con muy deficientes organización y ejecución, en aquella oportunidad se quiso hacer un “censo de derecho”, consistente en registrar a las personas según el lugar donde viven efectivamente, con largos cuestionarios, lo que requería un período censal de varias semanas, con un manejo complicado y gravoso de los recursos en general, y de los recursos humanos en particular. El experimento terminó prácticamente en un caos y, si bien posteriormente se hizo lo que se pudo para sistematizar los datos recabados, la realidad es que el país está sin propiamente un censo desde hace veinte años.

Ahora, tras una larga pandemia que afectó de sobremanera a toda la población paraguaya, en términos sociales, económicos y políticos, surge la imperiosa necesidad de conocer dónde estamos parados y qué necesitamos, para intentar dar una respuesta a la ciudadanía y a sus necesidades.

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