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“La actualidad nos muestra que los trabajos ya no son para toda la vida”

Deysi González, Magíster en Dirección de Recursos Humanos.

Deysi González, Magíster en Dirección de Recursos Humanos.

Las nuevas formas de trabajo son uno de los mayores retos propiciados por la crisis del coronavirus. Aquellos trabajadores clásicos que tenían asumida su vida laboral, acostumbrados a realizar sus tareas de la misma forma, con la misma tecnología y los mismos métodos, al parecer, no les quedó otra que “renovarse”, porque en los tiempos que corren el mercado laboral exige colaboradores capaces de adaptarse a las nuevas tecnologías, el trabajo en equipo, las multitareas, etc.

La pandemia llevó a las empresas a innovar en sus estrategias de llegada al público. Se produjeron cambios en el ámbito laboral y se seguirán produciendo, señalan expertos en la materia. “La actualidad nos muestra que los trabajos ya no son para toda la vida. Por lo tanto, necesitamos adaptarnos constantemente y aprender cosas nuevas”, comenta para El Nacional, Deysi González, Magíster en Dirección de Recursos Humanos.

“Los datos son el combustible de la cuarta revolución industrial que estamos experimentando hoy. Otra capacidad laboral importante de cara al futuro es la habilidad tecnológica o las llamadas competencias digitales”, señaló.

“La cuarta revolución industrial está reuniendo muchas de las principales tendencias tecnológicas. El trabajador del futuro se verá en la necesidad de operar en equipos cada vez más globales y trabajar en equipos multiculturales. Será un reto difícil, pero estimulante”, añadió.

“Se considera un buen plus que un trabajador no solo sea excelente en su disciplina, sino que pueda enriquecerla con el trabajo de disciplinas circundantes. Esto, de hecho, se irá imponiendo cada vez con mayor fuerza hacia una nueva visión de empleabilidad en el que el trabajador deberá renovarse continuamente”, explicó la experta.

¿Cómo sería eso?

Te explico. Creciente automatización: un número cada vez mayor de cargos tal y como los conocemos hoy en día puede desaparecer en un futuro cercano, o pasar a ser reemplazados por máquinas, computadoras, o sistemas.

Microempresas y auto-empleo: cada vez más personas en todo el mundo se están volcando al auto-empleo. Es decir, a emprender y manejar su propio negocio.

Balance vida-trabajo: una tendencia importante es que el trabajo ya no es el centro en la vida de las personas sino más bien un medio para lograr objetivos a nivel personal y profesional. El tiempo de ocio, vínculos con otras personas, realizar deportes, voluntariados, etc., son temas importantes para ciertas personas y que requieren de un equilibrio entre las cosas de las que disfrutan hacer. Tener el espacio para uno mismo es sano y necesario para dar lo mejor de nosotros.

Teletrabajo: gracias a la tecnología, un gran número de personas puede trabajar desde una amplia variedad de lugares: cafeterías y bares, desde el hogar, aeropuertos, mientras están viajando de un lugar a otro, etc. La oficina clásica ya no es más la regla y esto es una tendencia que al parecer continuará desarrollándose.

¿Cómo debería ser hoy en día el trabajador? ¿Cómo debe prepararse?

Activo, curioso, informado, con competencias que valore el mercado, con inteligencia emocional y social, debe tener presente la creatividad, la innovación, la capacidad para resolver problemas, autogestionado y sobre todo apasionado por lo que hace. Debe formarse no solo académicamente sino con habilidades blandas que le permitan desarrollar al máximo su potencial. Hoy día existen diferentes plataformas, cursos, evaluaciones, profesionales de consultoría que brindan un servicio de orientación y de detección de necesidades y que ayudan a elevar el perfil.

¿Cómo se deberá buscar trabajo con el escenario que se dará tras la pandemia?

A través de una buena red de contactos. Eso no quiere decir que no se acerque a aquellas empresas cuyos integrantes desconoce, al contrario, debe crear un puente que los una de manera a conectar. Esto es muy importante y también existen las redes profesionales como LinkedIn que ayudan a tener un currículo vitae en línea y un perfil disponible para los empleadores o posibles socios en el caso de los emprendedores, a la vez que te permite estar informado y con fácil acceso a aquellas organizaciones de tu interés. Así como también a través de plataformas virtuales, de bolsa de empleo, de redes sociales, entre otras.

Por todo esto, es muy importante tener una huella digital atractiva que llame la atención de los reclutadores, así como también una buena hoja de vida que genere impacto y estar preparado para la posible entrevista. El desarrollo de la Marca Personal es clave en este sentido.

En cierto modo, ¿la pandemia brindó algún beneficio al trabajador?

El trabajo en remoto, en ocasiones, hace que el trabajador se sienta más solo y que tenga que adaptarse a esta nueva situación, que puede generar mayores picos de estrés o ansiedad. Por supuesto que hay pros y contras, pero si hablamos de beneficios al trabajador le permitió organizarse de manera más independiente, de manejar sus tiempos de trabajar más en base a resultados que acorde a la llegada temprana o tardía al trabajo, trabajar desde la casa o desde cualquier lugar fuera de la oficina, de lograr un equilibro y bienestar en cuanto a poder estar cerca de sus seres queridos como la familia mientras se está trabajando.

Se dice que, durante los próximos años, el trabajador va a ser considerado por la empresa como su más importante inversor: aquél que invierte su capital intelectual y que, lógicamente, espera un rendimiento a cambio. ¿Es así?

Siempre me refiero a que Recursos Humanos es un término que simplifica el valor de la persona ya que lo reduce a eso: un recurso. Por ello, me gusta cambiarlo y decir Humanos con Recursos resaltando así a la persona y su talento, que es lo que finalmente colabora para que la compañía logre los resultados que desea. De allí se desprende este nuevo paradigma que menciona al personal como su capital más importante, actualmente esta visión es compartida por los empresarios y emprendedores que comprenden el valor del aporte de cada uno de sus colaboradores y su impacto en el éxito de su negocio. De esto también surge lo que conocemos como retención del talento que trata de que a un buen colaborador se lo beneficia con ciertas capacitaciones, salario emocional, premios, incentivos, etc., de manera a que mantenga su compromiso y su aporte a la organización.

¿Algún consejo para los jóvenes?

Adaptabilidad: es imprescindible saber fluir con el cambio. El entorno VICA (volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad) nos obliga a estar al ritmo de cambio, ya no es posible mantener formas de trabajar que estén desfasadas de la realidad en la que vivimos. La resistencia al cambio es uno de los peores enemigos del progreso.

Actitud: actualmente, el ritmo de vida lleva a que cada vez más personas estén apuradas y estresadas, por lo que la actitud positiva es sumamente valorada en una compañía.  La actitud es la combinación de tus pensamientos, sentimientos y acciones, que en consecuencia determinan tus resultados. Si se tiene buena preparación académica, pero no va acompañada de una buena actitud se pierde valor en el perfil y tarde o temprano será destinado al estancamiento o peor aún al fracaso.

Preparación: muchas veces la gente joven se queja de que no existen oportunidades, pero a veces sí las hay y no las provechan por no estar preparados. Es muy importante capacitarse y ganar experiencia de algún modo (emprendiendo, ayudando al negocio familiar, haciendo pasantías, etc.). Hoy día estamos aun clic de la información y aún así muchas personas y en especial los jóvenes se “dejan estar” y no forman son protagonistas del propio cambio que quieren en sus vidas. Hago un llamado a la acción, estos tiempos vertiginosos en los que vivimos nos obligan a estar a la altura de las nuevas necesidades si queremos lograr resultados exitosos.

Especialista en Recursos Humanos

Deysi González es especialista en Recursos Humanos y Relaciones Laborales. Licenciada en Psicología, graduada en la Universidad Nacional de Asunción, Magíster en Dirección de Recursos Humanos de la EAE Bussines School de Barcelona, España (Becal). Interviene en procesos de desarrollo de personas y grupos dentro de organizaciones hace más de 10 años. Realizó un Post Grado en Didáctica Universitaria y tiene experiencia como docente en la Universidad Nacional de Asunción y en la Universidad Comunera. En la actualidad lleva cátedras de Liderazgo Relaciones Públicas y Humanas. Culminó un Diplomado en Liderazgo democrático en la Konrad Adenauer (Guatemala), otro en Coaching Ejecutivo en la Universidad Comunera (Paraguay) y en Comunicación Política en la Accep–Kas (Argentina). Asistió a varios cursos realizados en el país y en el exterior. Es miembro de la Red Humanista por Latinoamérica y del Equipo Nacional de Estrategia País (ENEP). También es socia de la Fundación Feliciano Martínez. Fundadora y coordinadora del Voluntariado “Amba’apose”, que brinda herramientas para la búsqueda de empleo a los jóvenes de todo el país.

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