A seis meses del secuestro, la FTC no sabe nada de Oscar Denis

El 9 de marzo se cumplieron seis meses del secuestro del exvicepresidente Oscar Denis Sánchez, a manos de un grupo vinculado al autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), sin que hasta ahora se haya sabido nada del paradero y la suerte del empresario y político liberal de Concepción; y si aún continúa con vida.

En medio de la crisis política que mantiene bajo asedio al gobierno desde el 5 de marzo pasado, y de la carrera contra el tiempo para asegurar la provisión de vacunas para el Covid-19 en el peor momento de la pandemia, la fecha pasó prácticamente desapercibida, tanto en los medios como también a nivel oficial.

“No está mediáticamente nomás, para nosotros está siempre”, afirmó a El Nacional el ministro del Interior Arnaldo Giuzzio, sin adelantar detalle de las operaciones en el norte del país contra los grupos armados irregulares que obligan al Estado a mantener una significativa presencia policial y militar, y especialmente sobre la búsqueda de Denis Sánchez.

El coronel Luis Apesteguía, de la Fuerza de Tareas Conjuntas (FTC), con asiento en la localidad de Arroyito, en Concepción, afirmó a este diario que “las labores en el norte son incesantes en varios frentes, tanto en inteligencia como en asistencia a la población de nuestra zona de influencia”.

Sobre los secuestrados en manos del EPP, el jefe militar informó que la FTC tiene “trabajando agentes de inteligencia, uno relevando datos sobre grupos criminales que operan en la zona, pero infelizmente hasta este momento no hemos podido rescatarle a los secuestrados con vida, que es lo que todos deseamos”. “Pero los trabajos siguen”, agregó.

Reclamo familiar

Sin embargo, la familia del político de 75 años no ha cejado en todos estos meses por acciones que conduzcan al regreso de Oscar Denis, sano y salvo, a su casa en Concepción.

El 7 de marzo, dos días antes de cumplirse los seis meses del secuestro, las hijas del político y ganadero emitieron un nuevo comunicado en que reiteraron la predisposición familiar de negociar con el grupo armado para lograr la liberación de su padre.

Beatriz Denis, portavoz familiar, leyó el comunicado en que apeló al dolor causado por el plagio, y la preocupación por la salud de su padre, dada su avanzada edad y que al momento de ser secuestrado presentaba dolencias de diabetes e hipertensión.

Las hijas de Oscar Denis no cejan en la búsqueda de su padre. Foto: Archivo

“Les pedimos que se comuniquen de la forma que sea”, leyó Beatriz, reiterando la voluntad de la familia para entablar negociaciones con los secuestradores. Asimismo, volvió a reclamar al gobierno y a las fuerzas de seguridad por acciones determinadas que lleven al rescate de Denis.

También pidió a la sociedad no olvidar a su padre, ni tampoco a los otros dos hombres secuestrados que siguen con paradero desconocido, el policía Edelio Morínigo y el ganadero Félix Urbieta, desaparecidos desde 2014 y 2016 respectivamente

Las hermanas Denis venían negociando la intermediación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) con sede en Suiza, con el EPP a los fines de poder establecer un canal de comunicación con los captores de su padre, pero el gobierno rechazó tal posibilidad con el argumento de que la participación del organismo humanitario podría derivar en el reconocimiento del estatus de beligerancia al grupo armado.

El caso

Oscar Denis Sánchez fue secuestrado en su estancia “Tranquerita”, junto a su peón el joven indígena Adelio Mendoza, que fue liberado cinco días después, en un caso que desde un primer momento el gobierno interpretó como una respuesta del grupo armado por el ataque a su campamento, el 2 de septiembre en Yby Yaú, donde fueron supuestamente abatidas las dos niñas argentinas de la familia Villalba, Lilian Mariana y María Cármen.

A los pocos días de ocurrido el suceso, el gobierno de Abdo Benítez ordenó un despliegue de tropas y equipos de combate inédito desde la caída de la dictadura, en 1989. La FTC dispone de unos 1.000 hombres, blindados y transporte, además de contar con el asesoramiento de expertos colombianos en contrainsurgencia, con tecnología de rastreo de última generación. Se trata de un esfuerzo que sin embargo no ha rendido los resultados esperados hasta el momento.

En un principio, la liberación de Mendoza, concretada tras un primer y único contacto de los captores de Denis con la familia, donde pasaron una lista de exigencias por su liberación y adelantaron que dejarían en libertad al joven trabajador, aumentó las expectativas por el pronto regreso del exvicepresidente, pero pronto también esas esperanzas se esfumaron con el correr de los días y la falta de noticias.

La familia Denis cumplió con la parte que le tocaba de las exigencias del grupo armado, que volvió a requerir al Estado la liberación de sus líderes presos Carmen Villalba y Alcides Oviedo Brítez, una demanda imposible de cumplir.

Beatriz y sus hermanas distribuyeron miles de kits de alimentos y herramientas exigidas por el EPP por la liberación de su padre, entre comunidades campesinas e indígenas de Concepción, Amambay, San Pedro y Canindeyú, pero nunca más volvieron a saber de su padre.