Mucho protocolo anti Covid pero…¿cómo están los colegios en cuanto a infraestructura?

¿Cuántos colegios vuelven a clases? Esta es la incógnita que deambula en la cabeza de padres, alumnos  ante la información que en un gran porcentaje de maestros y directores se niegan a retornar a las clases debido a la falta de dinero y estructura edilicia para sostener el regreso de los alumnos a sus aulas.  

Mediante  resolución 832/2020 del Ministerio de Educación y Culto (MEC) establece la vuelta a clases “de forma opcional” de los alumnos del último año de la secundaria.

A criterio del ministro de Salud, Julio Mazzoleni, “los alumnos deben dar un cierre emocional”. Este fue el único  argumento esgrimido por la principal autoridad de Salud para firmar el visto bueno al ministro de Educación, Eduardo Petta, y lograr la apertura de las aulas antes de fin de año. Incluso dejando a un lado los índices preocupantes de contagios y muertes por Covid-19.

Sin embargo, la realidad en los colegios de la República, que es administrada por directores y profesores, no condice con las expectativas. El protocolo sanitario, elaborado por los técnicos del MEC y de Salud Pública, similar al que manejan gobiernos como Uruguay y Chile, cuenta con 41 páginas de medidas que deben ser aplicadas en colegios que “no existen en el país”.

“Yo me niego a comenzar las clases en estas condiciones e informé de la decisión a la supervisora”, dice Máximo Aquino, director del principal colegio de Areguá Cadetes del Chaco.

El director comentó a El Nacional que la decisión ministerial de volver a clases  derivó en una reunión de urgencia de profesores de la institución a fin de analizar las condiciones del Colegio para adecuar,  a la triste realidad, el exigente protocolo sanitario.

“Decidimos por unanimidad no volver. No tenemos baños suficientes. En casa aula por lo menos por lo menos 40 a 50 jóvenes. Si aplicamos la orden del protocolo de que por aula solo debe haber 15 alumnos donde enviamos a los demás. En estas condiciones es difícil y se suma a nuestra triste realidad que no tenemos dinero para adquirir los productos de limpieza y nuestros maestros están enfermos”, sostuvo el docente.

El Nacional realizó un recorrido por los pasillos, aulas y baños de la institución donde se pudo constatar la situación de abandono de los principales espacios de estudio de los alumnos. Esta realidad es palpable, según estadísticas del MEC, en 5.000 escuelas y colegios a nivel nacional. El nivel de carencias se traduce en la falta de baños, reparación de muebles, espacios para bibliotecas. Los departamentos con escuelas en ruinas son Central, Caaguazú, Itapúa, Cordillera y Paraguarí.

Todas las mañanas vengo  a limpiar el colegio, por lo menos el patio, afirmó el director que cuenta con un doctorado en Educación,  al tiempo de admitir que si el MEC tiene intenciones de iniciar las clases el 2021 “ahora debe iniciar las construcciones y mejoras edilicias en las escuelas y colegios” o de lo contrario, pasarán las fiestas, y en febrero volveremos a decir “no vamos a iniciar las clases”.

Eladio Benítez, presidente del Sindicato Nacional de Educadores (UNE) aseguró a medios de prensa que la realidad en las escuelas y colegios no es tenida en cuenta con las máximas autoridades de la cartera Educativa.

“No solo no hay dinero para enfrentar los gastos que establece el protocolo sanitario sino también nuestros maestros están enfermos”, sostenía de forma reiterada ante la consulta de que si se podrá regresar a las clases el lunes.

Otros gremios fueron más lejos. Este es el caso del Sindicato Nacional de Directores, liderado por Miguel Marecos que, la semana pasada, presentó un amparo constitucional de manera que la Corte Suprema de Justicia evite la vuelta de clases de los jóvenes de último año.

“Si regresan y si se da un contagio masivo. Nosotros tenemos directores enfermos de Covid. No existe una instalación educativa en condiciones para volver a clase incluso las privadas tienen problemas para adecuar el protocolo a su realidad. Está mal asesorado Mazzoleni o los asesores no le están contando toda la verdad”, indicó.

Según el cuestionado viceministro de Educación, Robert Cano, alrededor de 65 mil alumnos cursan el último año de la media. De los cuales aproximadamente 20 mil cuentan con la venia de sus padres para regresar a sus aulas. “Si un 30% vuelve a las aulas, como máximo serían 20 mil estudiantes a los que estaríamos recibiendo si se mantiene la tendencia del 30%”, explicó a una emisora radial.