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Puntitos sanadores

Jess Jiménez con varios de sus trabajos. Foto: Jess Jiménez

Jess Jiménez con varios de sus trabajos. Foto: Jess Jiménez

Jess Jiménez es una joven que en la adversidad encontró la pasión por el arte, y hoy lucha contra una enfermedad, plasmando en sus trabajos todas las ganas de encontrar en cada día una nueva oportunidad de sonreír.

Hace unos meses ella trabajaba en una oficina y estudiaba Psicología, tras unos estudios le diagnosticaron cáncer y un grave tumor neuroendocrino carcinoide con lesiones óseas. Lejos de caer ante esta situación decidió combatirlo con arte y talento.

Actualmente es feliz viviendo el momento sin hacer planes para mañana. “Aprendí a valorar cada momento que vivo, desde mirar el sol por las mañanas hasta acostarme por las noches abrazada a mí almohada” nos dice Jess.

Con el apoyo de su mamá, hermanos, sobrinas y una tía que también está siempre al pendiente, además de sus amigos que se hacen sentir, nunca baja los brazos. Empezó buscando una actividad que la ayude a despejar su mente para no pensar en la enfermedad.

Puntillismo sanador

Afirma que siempre le gustó la pintura, aunque nunca antes pintó. Decidió mirar videos tutoriales en YouTube y así fue practicando, hasta crear espejos decorativos con tonos vibrantes en la técnica del puntillismo. Los promocionó en las redes sociales contando su historia y se volvió viral, generando más de 50 mil interacciones.

Extraordinario trabajo de la Virgen de Schoenstatt. Foto: Jess Jiménez

Le sorprendió lo ocurrido y  le emocionó el reconocimiento hacia su trabajo, lo considera una satisfacción personal muy grande. “Lo más significativo para mí,  es que a través de mí historia personal y de mis ganas de seguir adelante a pesar del diagnóstico médico, otras personas se sienten identificadas y eso es algo grandioso, la empatía” indica.

Tratamiento

Su tratamiento oncológico, conocido como quimioterapia, la ayuda a controlar el tumor al igual que las lesiones óseas. No es curativo porque en Paraguay no cuenta con el tratamiento adecuado, pero la ayuda para controlar los síntomas. Mensualmente requiere de varios estudios que sirven para ver el estado del cáncer.

Los gastos son muchos cuando se es paciente oncológico, no sólo son los estudios sino la misma alimentación. La venta de sus espejos ayuda a costearlos. Su idea también es poder ir a Brasil, donde tienen radioterapia metabólica, que sería el tratamiento indicado para el tipo de tumor que tiene.

Los espejos vienen en diferentes colores, tamaños y los hace a partir de pedidos. Los costos varían de entre 100.000 hasta 300.000 guaraníes. Los interesados pueden escribirle a las redes de @jessjimeneza y también podrán encontrar más fotos de sus trabajos.

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