El Gobierno de Chile presenta un nuevo pacto fiscal para seducir a empresarios y opositores

El presidente chileno, Gabriel Boric, dará a conocer los contenidos y el itinerario del esperado pacto fiscal, como se ha denominado al nuevo acuerdo tributario que impulsa su Administración. Más tarde, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, que en los últimos días ha sostenido reuniones con empresarios y parlamentarios de diferentes sectores políticos para concretar una de las promesas del actual Gobierno –clave para concretar su programa– entregará mayores detalles de la propuesta.

El anuncio se realiza a contrarreloj. En su cuenta pública del 1 de junio ante el Congreso, el mandatario chileno adelantó que insistirían en el mes de julio con su proyecto de reforma tributaria ante el Senado, luego de que la idea de legislar la iniciativa fuese rechazada por la Cámara de Diputados en marzo pasado, en su primer trámite en el Parlamento. Tras dos meses de trabajo, durante los últimos días el ministro Marcel ha acelerado las negociaciones para no pasarse del plazo autoimpuesto por el Ejecutivo. De hecho, se esperaba que el proyecto fuera presentado lunes, pero aún faltaban detalles por afinar para dar a conocer públicamente el documento.

“Hemos tenido, me parece, que 32 reuniones con distintos actores. Todos han llevado propuestas interesantes y muchas de ellas las hemos recogido. En ese sentido, estamos bien satisfechos de lo que se ha hecho hasta ahora. Eso es parte de lo que mostraremos en la propuesta de nuevo pacto fiscal”, mencionó Mario Marcel el lunes por la mañana en radio ADN.

Durante la tarde, el secretario de Estado junto a la directora de Presupuestos, Javiera Martínez, se reunieron con el presidente Boric para revisar el contenido legal de las medidas que serán anunciadas. Luego, Marcel dio a conocer la propuesta a los ministros que componen el comité económico del Gabinete. Y más tarde, el economista tuvo un encuentro con los parlamentarios que componen la Comisión de Hacienda del Senado y de la Cámara de Diputados. Ya por la noche, se reunió con los presidentes de los partidos del oficialismo, a quien adelantó detalles del anuncio.

El pacto fiscal que busca Marcel consiste en un acuerdo entre empresarios, congresistas y el Gobierno para sacar adelante una agenda conjunta que no sólo incluya materias tributarias, sino también mecanismos para impulsar el crecimiento -el último Indicador Mensual de Actividad Económica de mayo pasado arrojó una caída de 2 % respecto del mismo mes del año anterior-, una agenda de modernización del Estado y propuestas concretas para aumentar la recaudación fiscal.

Aunque el ministro no adelantó los contenidos, parte de los elementos del acuerdo ya fueron anticipados por él a principios de julio cuando planteó a la Confederación de la Producción y el Comercio, CPC -el principal gremio empresarial de Chile- 36 medidas para aumentar el crecimiento, inversión y productividad. Lo hizo como respuesta a una declaración de la CPC que cerró la puerta a discutir nuevas alzas de impuestos, lo que marcó un cambio respecto de la posición que el empresariado había mostrado en febrero. En términos generales, la propuesta incluye seis pilares: principios para un sistema tributario moderno; prioridades de gasto público; modernización del Estado; impulso al crecimiento; medidas tributarias; y seguimiento y evaluación de políticas públicas.

“En el diseño va a haber espacio para seguir trabajando en múltiples frentes. Así que el espacio y la disposición al diálogo siempre van a existir”, afirmó Marcel este lunes. Asimismo, la ministra portavoz del Gobierno, Camila Vallejo, señaló que frente a los resultados de la encuesta Casen (un estudio que mide la pobreza en Chile y que fue dado a conocer la semana pasada), “el pacto fiscal toma toda lógica para que la riqueza sea mejor distribuida y para abordar el crecimiento económico, tener mejores ingresos autónomos, modernización del Estado y para que los que más tienen tengan enfrente normas antielusivas efectivas”.

En este segundo intento del Gobierno de Boric para poner en la agenda legislativa un acuerdo tributario, las negociaciones con el partido de derecha tradicional, Unión Demócrata Independiente (UDI), se encuentran paralizadas. Los timoneles de esa fuerza política, liderados por el diputado Javier Macaya, condicionaron su participación en la salida del ministro de Desarrollo Social y compañero de ruta del mandatario chileno, Giorgio Jackson, tras el Caso Convenios y el robo de computadores desde la cartera que dirige.

“Con la oposición nos vamos a ir reuniendo en la medida que ellos estén disponibles. Hay una reunión que en principio sería esta semana, pero todavía me la tienen que confirmar”, acotó el ministro de Hacienda, que espera un acercamiento de las posiciones con la derecha. El Gobierno no tiene mayorías en ninguna de las dos cámaras y en un escenario político complejo. Marcel, de hecho, fue el político que más subió en desaprobación, según la encuesta del Centro de Estudios Públicos, CEP, dada a conocer la semana pasada.

Fuente: El País.