¿Seremos compatibles?

POR Lic. Sandra Lustgarten

Psicóloga y sexóloga.

¿Quién dijo que las parejas son parejas? La unión entre dos personas no significa que sean compatibles, que tengan los mismos gustos, que estén en sintonía, ni mucho menos aún.

La vida de una pareja se ve reflejada en esta suerte de empatía entre ellos que hace que se exhiba como son en su cotidianidad. Algunas parejas, por ejemplo, viven en silencio, se las nota en general como si no tuvieran conexión, pueden acompañarse, pero el silencio es notorio, la vida íntima es casi nula y expresan una emoción baja o deprimida en público.

Cuando dos personas se conocen y sienten atracción, hay una conexión que estimula entre ellos y eso que se vuelve visible, se llama apasionamiento, hay un estímulo permanente que despierta el deseo. Así es como entran a la etapa de enamoramiento; sin embargo, nada asegura que serán compatibles de por vida.

¿Qué es ser compatibles?

Es tan fundamental la compatibilidad en una pareja, ya que es la señal que determinará la funcionalidad en forma armoniosa, el límite es tan finito que a veces es confuso sobre todo cuando algunas parejas distorsionan el significado y creen que son compatibles porque tienen una tarea en común o porque tienen un objetivo semejante, claramente es necesario mucho más que eso para entender que es lo que determina que una pareja sea duradera y que hace que un conflicto arrase con todo lo emocional y afectivo.

Dos personas pueden estar juntas durante muchos años, sin embargo, ser diferentes en cuanto a la personalidad, tener deseos distintos, y querer alcanzar diferentes metas. Algunas personas se manejan con un concepto que identifica al término y es la complicidad entre dos personas, eso que surge cuando sin tener la misma intensidad de deseo por algo lo haces o experimentas para acompañar a tu pareja.

¿Compatibilidad es atracción física?

No tienen ninguna semejanza; sin embargo, cuando existe atracción entre dos personas, la idea de acompañar gustos y experimentar juntos es algo que no resulta forzado sino con total naturalidad.

La compatibilidad en esto, conocida como empatía, exacerba el deseo y activa estimulando la atracción. Así es como muchas parejas relatan como en el momento que tienen una fantasía inmediatamente imaginan que van a cumplirla con la pareja con la que se experimentan compatibles. Sin embargo, algunas parejas manifiestan su falta de compatibilidad en la intimidad y el gran esfuerzo que deben hacer para tener una vida sexual satisfactoria, ya que esto suele ser un gran problema. Una pareja armoniosa es compatible, ya que fluye la buena comunicación que facilita una gran conectividad.

Algunas manifiestan que se entienden sin hablar con miradas o gestos y que pueden adelantarse a entender sin tener diálogo lo que la otra persona necesita o quiere decir, resignifican la comunicación por medio del lenguaje verbal y para verbal.

Sin embargo, algunas personas confunden el término creyendo que si el otro no piensa como uno no es compatible, o si no tiene los mismos ideales también. Hay formas de ir definiendo la pareja que uno quiere lograr y hacia donde se dirigen los proyectos que pueden ser considerados en común y los que se transitaran solos para saber si la elección está bien encaminada.

Algunas personas a mitad de sus caminos reconocen no haber tenido recaudos de replantearse sobre la elección sobre la persona que los acompañará y terminan entendiendo que cometieron un error, se dejaron guiar por la ilusión, esta es momentánea hasta que en determinado momento se supera esta etapa y la razón aclara como es la realidad, entonces la magia se termina y es cuando la razón interviene.

Las parejas suelen reconocer que estaban dentro de una burbuja mágica y como encantados sin poder ver o entender las diferencias. Hay parejas que tienen cosas en común, sin embargo, eso no significa que sean iguales, y si lo fueran quizá no sería bueno para el vínculo.

¿La compatibilidad sexual alcanza para sostener el vínculo?

Algunas parejas tienen una química sexual muy fuerte y dicen que esa forma extraordinaria de satisfacerse hace que todos los conflictos se superen o es lo que sostiene la relación; sin embargo, después del acto sexual, algunos instantes más tarde reaparecen los reclamos, las inseguridades, las cuestiones conflictivas.

La cama solo sirve para distraerlos del conflicto. O sea, lograr complacerse no implica que esa pareja haya sorteado otros problemas de la convivencia.

También debemos mencionar que existen parejas que arreglan todo en la cama, las dificultades cotidianas y todo aquello que no se puede resolver, mágicamente se esfuma en la alcoba, por un tiempo luego llega la armonía porque canalizaron la libido, pero luego llamativamente aparece la falta de entendimiento y las fisuras que provocan los conflictos.

Si una pareja tiene deseos sexuales compatibles llegarán a entenderse mejor, esto se trabaja en muchas parejas que no pueden lograr acuerdos sexuales y que tienen gustos diferentes o que hacen grandes intentos por complementarse en el juego sexual. No hay nada que no se pueda negociar en este ámbito y lo más importante es que la aceptación sobre cumplir deseos sexuales de otro contemplara siempre la plena aceptación por decisión propia y no por exigencia o temor.

Sin duda hay situaciones que surgen en el ámbito sexual que pueden provocar dudas, si el sexo es frecuente y aun así no hay satisfacción plena de alguno de los integrantes habría que analizar y buscar cuál es la situación que hace que no lleguen a disfrutar de las relaciones. No siempre la cantidad asegura el placer, existen notorios estudios sobre porcentajes altísimos de personas insatisfechas que tienen una gran frecuencia a causa de una adicción sexual.
Algunas personas también se vivencia sin interés, con falta de motivación para tener sexo, este puede ser un indicador de incompatibilidad sexual, lo ideal sería consultar a un especialista para reaprender posiblemente la forma de conectarse con el otro y encender nuevamente el deseo.

La compatibilidad en el sexo muestra armonía en la pareja que se manifiesta en la comunicación y se expresa en la forma en que ambos funcionan en ese terreno.

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