Estar con vos más allá del amor

POR Sandra Lustgarten

Psicóloga y sexóloga.

¿Somos incondicionales o somos víctimas?

El amor lo supera todo, el amor nos autoengaña, nos cegamos creyendo que el sentimiento que tenemos es definitivamente amor. Sin embargo, diversos estudios llegaron a la conclusión que ese sentimiento solo manifiesta “dependencia afectiva o emocional”. Las relaciones que se mantienen solo por el que dirán, o por conveniencia económica, las que se quedan por los hijos, o porque uno siempre quiere más que el otro, un tema común que se vuelve insostenible; incluso en el caso de las infidelidades, con tal de sostener un vínculo aunque sea dañino.

Las personas más sufridas y con baja autoestima, conocidas como “mendigas del amor “se autoconvencen que la situación que padecen algún día va a cambiar; se crean expectativas y se inventan una fantasía de curación o transformación, con la idea de la superación avalan la conducta del infiel; sin embargo, al poco tiempo se frustran ante la evidencia de que nada cambia,” la infidelidad” sigue siendo parte de la convivencia.

¿Por qué existe la esperanza de que la vida en pareja cambie la personalidad del infiel?

“El miedo a perderlo todo”, “el temor a lo que pasará quedando solos”, “la ilusión de que todo pasará”, “que por amor volverá”, “que se dará cuenta de que no hay mejor que una “, la negación encubre el fantasma del desamor” y así entre discursos se viven agonías.

Los hombres también lloran por amor

Hay hombres que no pueden soltar, soportan todo tipo de desplantes, celos, presiones, boicoteos, se dejan utilizar, pagan por tener el amor incondicional. Y eso aún no les da la certeza que se enamoren de ellos.

Enséñame el camino sin estar a tu lado

La importancia de aumentar la autoestima, es crear individuos seguros o vínculos más fortificados, ya sea personas que sepan lo que quieren, que se amen a sí mismas, que se protejan y que valoricen sus logros. De esta forma se aprende a tener el control de la vida propia y no dejar que el otro controle sus vidas.

Hay mujeres que han vivido siempre sometidas y que sienten que no sabrán salir adelante solas y que sus únicas opciones son con esa persona con la que han estado años, aun cuando el vínculo fue temeroso, angustiante y hubiera afectado la autoestima, al punto de sentir que las afecta en su personalidad, se desdibuja y son lo que el otro pretenden que sean, no ellas mismas.

Cuando la culpa la tiene la química sexual

Las veces que a modo de excusa se autoconvencen, que siguen en relaciones inestables por la buena química que tienen en el sexo y se desentienden de todo lo demás, como si el sexo fuera el único rol protagónico en la relación de pareja, sin importar la comunicación ni la empatía.

Recuperar la autoestima para vivir la vida

“Amarnos ante todo es el lema para sobrevivir”. El tiempo provoca una sensación de desasosiego cuando se vive una vida de sufrimiento, lamentablemente muchas son las mujeres víctimas de relaciones que no eligen para quedarse, se resignan ocupando un rol que no quieren tener, junto a un déspota, o un psicópata se vuelven víctimas aceptando el dolor, siendo así parte de vínculos tóxicos. Sin duda algo de la herida narcisista pinta este escenario, el impacto en el ego, suele ser trágico, porque nada es más angustiante que no sentirse amada. Por eso lo primero es aprender el amor hacia uno mismo para poder extender el amor a otros.

El cuerpo que habla

“Sin el martirio no hay destino posible”. La creencia de que para ser feliz hay que sufrir se ha implantado en muchas niñas que fueron viviendo en sus hogares un modelo de vínculo violento, es un modelo aprehendido de una estructura familiar, durante generaciones se repiten sin posibilidad de salir de ese estilo. En la mayoría de los casos las mujeres confunden el amor con el sometimiento, con la creencia de que cuanto más se aguanta más se ama y el hombre confiado de que si ella tolera todo entonces lo que él hace no es malo. Sin embargo, lo que provoca esta conducta es rechazo, afectando el contacto y la vida íntima de la pareja.

En otros casos nadie puede admirar a una persona que exhibe sus debilidades,” el autoritario” siente que tiene el poder y que puede hacer lo que quiera sin importar las consecuencias, porque la persona que recibe el maltrato es débil y no sabe defenderse. El peligro radica en las consecuencias clínicas que conlleva un vínculo con características psicópata donde se somatiza la angustia y se perpetúa el dolor.

Salir de la oscuridad

“Un callejón sin salida, aunque alguna vez habría una luz detrás del túnel”

… Y sin lugar a dudas que donde hay luz, hay otra vida.

Las mujeres que sufren toda la vida tratando de convencer al otro y a sí mismas que la vida que tienen es la única posible, mujeres que no pueden renunciar a la infelicidad. La pérdida de conciencia de la realidad las hacen aceptar y tranzar con el sufrimiento de los hijos y de la familia, todos están dentro del conflicto y todos están en un vínculo enfermo y que enferma.

So pena de que se me pase la vida

Las palabras no alcanzan La suma de hechos que van sucediéndose en el ámbito de la pareja tiene esta patología que van dejando huellas significativas, la vida se detiene por momentos y se pierde el deseo, algunas personas entran en estados emocionales angustiosos que no pueden eludir. La terapia es la indicación para el grupo familiar, las infidelidades son partes del comportamiento típico en este sistema. La gran mayoría termina siendo ayudado en terapia, tratando el problema como adicción al sexo. Esto marca una tendencia, no se trata de que el infiel impacte en el hogar por culpa de la mujer con situaciones desbordantes, esto es lo que estas personalidades intentan inferir, cuando la causa es producto de la forma en que se vinculó en su infancia y de los traumas que afectaron su personalidad.

Quienes más sufren son las personas que no pueden tomar distancia, quedan aferradas a estos vínculos “el apego” que distorsiona las emociones, así es como las mujeres de los hombres infieles no aceptan lo que les pasa y se quedan por tiempo inmerso en este modelo de vínculo, ya que en su infancia se sintieron poco amadas, no elegidas, inseguras, rechazadas. Esta es la forma en que justifican sus dificultades. Entre lo que acontece, sin duda los familiares y amigos comienzan a tomar distancia cuando observan cómo se retroalimentan este tipo de vínculos.

¿Amor o enfermedad?

A veces se piensa que es amor, sin embargo, es enfermedad y se la llama “dependencia emocional”, es destructiva, implica el efecto de la idealización como mecanismo defensivo. Hay mujeres que toda la vida esperan que su pareja reconozca sus valores, en un vínculo asimétrico y disfuncional eso no sucede nunca y como un roto para un desconocido, se encuentran en un mismo sentido; quién necesita que la cuiden con quien necesita cuidar, así se establece este enredo del que no es fácil desenredarse.

Las Parejas en una suerte de acostumbramiento no logran superar el miedo a la soledad y eligen una vida de tristeza y apatía, sin impulsar nuevas oportunidades que abriguen una nueva esperanza lejos de la toxicidad. Hoy el fenómeno de la terapia Psicológica, grupos y lugares de autoayuda brinda una nueva esperanza para salir adelante y superar los traumas de la infancia, vivir una vida digna y comprender el amor de otra forma más sana.

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