Todo lo que a las mujeres enamora de un hombre

POR Sandra Lustgarten

Psicóloga y sexóloga.

Los tiempos cambian y las generaciones marcan tendencias en algunas cuestiones, pero aquellos tips que enamoran de un hombre nunca pasan de moda. Las mujeres pretensiosas, con el afán de ser conquistadas desde la prehistoria, buscan hombres que tengan dones de seducción, la conquista suele ser un atributo de pocos y de grandes entendedores de la psiquis femenina.

Es llamativo, sin duda, cómo los hombres más robustos, fuertes, que se percibían como reproductores, impresionaban a las féminas deseosas de ser madres y de cumplir con los mandatos sociales, con la idea de formar una familia joven.

El tiempo ha marcado cierta evolución en algunas cuestiones sexuales, tanto ha evolucionado la mirada de la mujer hacia lo que precisa de un hombre que en la queja constante en terapia, lo que más reclama la mujer para alcanzar el placer sexual es sentirse segura, saber que ese hombre es afectuoso, considerado, atento, que la escucha y utiliza diversos tipos de comunicación para empatizar con ella, la pasión entonces se logra con diversos factores que intervienen en ese tipo de vínculo, el hombre que es servicial y atento algunas veces no es el vencedor y eso ha llamado la atención en muchos profesionales que intentamos encontrar el punto ideal para que resulte una relación, el amor romántico y sexual.

La personalidad en un hombre es arrolladora cuando algunas mujeres dicen que lo que las atrajo es la confianza que ese hombre tiene sobre sí mismo, cualidad que favorece la mirada deseosa de las mujeres y que sin duda provoca apego emocional, una variable que crece en un gran porcentaje de mujeres y claramente tiene que ver con el estilo y el magnetismo que se produce en el vínculo.

La tan nombrada química que existe en una pareja no es una fórmula tan perfecta, pero sin duda es una manera de potenciar el apego emocional en la pareja, esa química se logra con un modelo de vínculo específico en donde el varón entiende la necesidad femenina de comprensión, comunicación, percepción, atención.

En el consultorio y en terapia de grupo, las mujeres describen al hombre perfecto o al que invade la imaginación y se instala en su mente, dominando la ilusión de cada una en encontrar alguien afín. Sin duda, las mujeres construimos ideales provenientes de cuentos de hadas que escuchamos de pequeñas, así construimos un modelo de hombre ideal, el que muchas veces intentamos en forma forzada inventar, creemos que es ese, aunque claramente nada sea más equívoco.

El poder físico en el hombre actualmente tiene cierto magnetismo, aunque un gran porcentaje de mujeres últimamente se sienten atraídas por hombres más simpáticos, naturales y confiados, menos narcisistas y machistas, estos incentivan rápidamente el deseo, estimulan el amor, motivan el sexo, despliegan una suerte de encantamiento. Algunas mujeres más aficionadas a hombres mujeriegos, relatan sus experiencias cuando quedan apegadas a hombres que solo se quieren a sí mismos, con la clara impresión de que ellas serán las salvadoras de estos hombres insensibles que no saben amarlas, o sea que algunas mujeres más interesadas en ser la elegida quedan entrampadas en la creencia ficticia de un amor real, que claramente no existe ni jamás existirá.

El poder que siente el varón que logró la mirada de la mujer que busca conquistar es indescriptible, ese sentimiento los viriliza y potencia. Así mismo se vuelve claro cuando observamos en el consultorio cómo el rechazo de la mujer deja al varón abatido, deprimido y con una gran afección en la autoestima, a veces llamativamente quedan fijados a esa mujer que no los elige a causa de una gran herida narcisista.

La pérdida de la confianza va en detrimento de la función sexual masculina, provoca serios problemas de tipo funcional, resultando siempre una disfunción como respuesta sexual. La triste agonía de la confianza mutila al hombre con un sentimiento que lo caracteriza, y es el creerse impotente. La mujer maneja muchas veces muy bien este comportamiento, que de algún modo le sirve para asegurarse de vengarse de algunas faltas de atención de parte de su pareja.

Cuando una mujer deja de sentirse atraída por un hombre, según muchos varones que sienten la apatía, se observa sobre todo en la pérdida del deseo, la vida íntima se ve afectada, impactando en su virilidad nuevamente y en el deseo de ellos; esto provoca distanciamiento y el origen del conflicto.

El hombre amante de la naturaleza siempre quiere ser seducido por la mujer, soltarse y dar lugar a la experiencia nueva de las fantasías para enriquecer la intimidad, por eso las mujeres de la actualidad no temen sobre liberar sus fantasías y animarse a jugar roles distintos, mientras exploran otras maneras de acercamiento y de transmitir lo que quieren en la cama a fin de fortalecer la atracción con su pareja.

En algunos casos la imagen juega a favor claramente, pero también existen mujeres que sienten que el mayor atractivo de un hombre se encuentra en su personalidad, esta refleja cómo se para frente al mundo y transmite seguridad a la mujer y confianza, factores necesarios para motivar la pasión. También hay hombres que no saben cómo seducir a una mujer, piensan en el tamaño de su miembro como el mayor poder que pudiera tener para la conquista; sin embargo, hoy en día, para la mujer es una característica menor, la ciencia ha avanzado tanto que hoy unas manos mágicas que encuentren los lugares donde priman las zonas erógenas, el interiorizarse acerca del mapa erótico femenino y la constancia en la previa son las mejores herramientas para lograr respuestas placenteras y la total aceptación femenina.

Los tiempos cambian y las creencias populares de antaño dejan de ser mitos, para poder descubrir que los misterios que encierran las pasiones de una alcoba van más allá de algunos cuentos infantiles con príncipes; y aunque las mujeres se aferren al atractivo físico nada de eso sirve en la cama. Sin embargo, es sutil la diferencia cuando algunos modelos intentan ponderar los efectos de la imagen escultural, minimizando la importancia que tienen dulces palabras al oído y las mágicas manos descubriendo la sensualidad de un cuerpo. Y es que el encanto se encuentra en el lugar menos pensado, porque los tiempos cambian, porque los ideales se modifican, porque aparecen otros valores que toman un lugar de preponderancia a la hora de entender por dónde pasa la química entre el hombre y la mujer.

La magia debe existir todos los días para que se mantenga la ilusión y que el deseo se intensifique, ya que las mujeres somos sumamente sensibles a los cambios, algunas cosas nos asustan y rápidamente nos desencantamos de aquellos varones, que no saben ser constantes en lo que a atenciones se refiere. Pero también resulta extraño que algunas mujeres en forma incomprensible se sienten atraídas por hombres infieles, y es que el poder de seducción que exhiben las atrae indescriptiblemente.

Hoy la mirada cambió, las mujeres buscamos habilidades prácticas en el varón, algunas de ellas con rasgos más femeninos y, aunque parezca absurdo, es lo que más los acerca a un rasgo contenedor y cariñoso, pero de todo esto lo más interesante es que, aun así, en este nuevo rol masculino, el hombre encaja casi idealmente con la mujer.

En definitiva, muchos estudios llegaron a la conclusión de que hombres y mujeres no somos tan diferentes y que es lógico entender por qué existen hombres que aman demasiado como mujeres que prefieren el sexo.

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