El sexo y las drogas

POR Sandra Lustgarten

Psicóloga, sexóloga. Matrícula N.º 19529.

Una combinación explosiva pero con consecuencias fatales

Adolescentes en la mira son quienes más consumen en la actualidad y la novedad es que se amplía a los adultos entre 40 y 60 años, en especial separados. En el consultorio de una sexóloga se escucha de todo, y es que llama la atención la necesidad de los adultos de explorar otras sensaciones, aquello que se sienta como sumisión sin ser consciente de incursionar en esta.

Algunos adultos refieren sobre la intensidad de las sensaciones cuando están bajo los efectos de las drogas, cualquier estímulo se intensifica y disfrutan más del sexo que en estado totalmente consciente. Las relaciones con jóvenes los hacen perder la cabeza y en pos de lograr sus objetivos aceptan transitar puentes que nunca antes habían sido recorridos como una experiencia inigualable.

Los adolescentes abiertos a explorar todo lo que la vida sexual les propone, aceptan que para ciertas experiencias algunas drogas son ideales ya que los lleva a intensificar la sensibilidad y manifestar el placer de otra forma con mayor intensidad. La vivencia que tienen resulta acertada ya que al estar bajo los efectos de ciertas drogas pueden sentir el placer de otra forma, todo se exacerba en este contexto.

Pero hay muchos adultos que deben caer en la ingesta de drogas no por intensificar el placer sexual a la hora de tener intimidad, algunas drogas necesarias para la salud son contraproducentes en el resultado sexual, una gama de esos medicamentos atacan sin duda la potencia sexual, inhiben los orgasmos, alteran la eyaculación, provocan deseo hipoactivo, etc. Sin duda, podemos hacer una gran nómina de medicamentos que dificultan la buena sexualidad, en esos casos en que se está en una dicotomía entre aceptar la medicación para evitar un desenlace crítico en la salud o elegir la vida sexual placentera y es cuando el médico debe aconsejar al paciente dando prioridad a lo más significativo.

La sexualidad es algo sumamente importante para el paciente que llega en un estado emocional muy depresivo cuando este terreno es el afectado. Las drogas muchas veces provocan efectos irreversibles en las personas, algunos ejemplos son aquellos que deben tomar medicamentos para la presión o para la depresión, algunos antipsicóticos y ansiógenos.

Algunas drogas que en la actualidad son miradas positivamente por los adolescentes, jóvenes y adultos, suelen provocar efectos a corto plazo y en algunas ocasiones la magia termina siendo un problema serio, no solo el peligro de caer en la adicción, sino también el riesgo de caer en problemas de tipo patológico, ej.: tener un brote psicótico o esquizofrénico que se caracteriza en general por las alucinaciones.

La depresión es una enfermedad que anuncia la pérdida de interés por el sexo, a su vez la forma de tratarla es por medio de antidepresivos, en algunos casos suelen provocar dificultad de llegar al orgasmo en las mujeres. Muchas mujeres se sienten aprisionadas con esta situación en un camino sin solución. Se acortan las opciones cuando la salud está en juego.

En el caso de las drogas recreativas, la sensación es que la experiencia será extraordinaria, que los efectos permitirán sumergirse en una entrega total y absoluta, eliminando todo tipo de represión que impida lograr el clímax tan anhelado. Sin embargo, detrás de la fantasía, la realidad informa sobre la negatividad de sus efectos. En el caso del cannabis o marihuana, por ejemplo, de uso bastante común, que produce una sobreestimulación en el estado mental de quien la consume, si las personas la consumen durante mucho tiempo, sin duda se verá afectada la sexualidad. La cocaína produce efectos de retraso de eyaculación y dificultades de alcance del orgasmo y con el tiempo producen una pérdida del interés sexual. Otras drogas como la heroína y el éxtasis también afectan el deseo sexual, y con el tiempo la eyaculación, el orgasmo. El éxtasis, si bien la sensación es de calidez emocional, y sensación agradable, no implica que aparezca el deseo.

Algunas personas que eligen el alcohol como muleta para animarse en el ámbito sexual a lo que no se animan en un estado de conciencia, sienten que así se pueden relajar, pero la experiencia clara es que cuando desean concretar y llegar al éxtasis se sienten impedidos, si bien el alcohol es un desinhibidor sexual, provoca consecuencias de tipo vasoconstrictor, lo cual repercute en la potencia y virilidad masculina.

A mis pacientes pretendo enseñarles que estas modalidades momentáneas y poco efectivas solo les traerán consecuencias a largo plazo, sin solucionar el verdadero problema en su sexualidad, poder encontrar el origen de lo que a cada quien le sucede y no taparlo utilizando estrategias que, si bien provocan cierta ilusión o fantasía de erotismo, en lo concreto el efecto es dejar de desear para volver a encontrarse con la problemática por la cual se llega a la decisión de buscar artilugios que eviten enfrentarse con la realidad.

En el caso de que sea necesario revertir algunos síntomas de las drogas, el cuerpo después de la abstinencia, durante esta etapa, debe recuperarse, por lo cual la indicación es que no entren en un estado angustioso si observan que las cosas demoran en volver a su estado natural, si la sensación es que se ha perdido por el efecto el deseo e interés sexual o si aparecen síntomas de disfunciones sexuales que antes no se tenían.

En tiempos tan difíciles y luego de la pandemia que provocó duros estragos en muchas personas, la vivencia de cómo experimentar el sexo cambió, las personas quieren sentir todo aquello que durante años no experimentaron o que nunca les sucedió, atreverse a vivir la vida como si fuera el último día, y explorar el sexo como si cada encuentro fuese único. Las expectativas cambiaron, los objetivos y planes también, ya no existe la presunción de que las parejas serán para toda la vida, el sexo se volvió más idealizado como algo inalcanzable, donde cada día que no se experimenta la sexualidad es un día perdido. El sexo nutre de otra forma, tiene otros preceptos, los viejos prejuicios y tabúes quedaron atrás luego de haber sobrevivido, ahora el miedo funciona como motor para animarse a todo a toda edad.

Instagram: @Sandralustg

Celular: +54(11)61827888