Lifestyle
Pionera y provocadora: cómo Naomi Campbell cambió el modelaje para siempre
Naomi Campbell. Vogue
Este 2020 Naomi Campbell cumplió 50 años. La diosa de ébano es de las pocas top modelos de los noventa que sigue en activo en la industria de la moda. Por ello, en este año tan especial, la editora jefa de ‘Vogue’ América, Anna Wintour, ha rendido un merecido homenaje a la británica, que ha sido elegida para protagonizar la portada de la edición de noviembre de la publicación que está dedicada a su importante papel en el sector.
En un reportaje fotográfico sin precedentes, Vogue define a Campbell como “pionera, narradora de la verdad, provocadora y mentora de modelos de todo el mundo”. Unas palabras que también se pueden leer en el texto que acompaña a las imágenes, donde la top aparece con varios jóvenes modelos negros que ha inspirado y ayudado para labrarse en un futuro en la industria.
La entrevista
Naomi me pregunta si necesito pruebas de que es seguro estar en su presencia. Después de haber comprado todos los elementos de protección que pude encontrar antes de entrar en la casa que está alquilando en una parte antigua y adinerada del centro de Londres, esperaba ser yo quien la tranquilizara. Después de todo, Naomi no es solo una supermodelo reconocible instantáneamente en todo el mundo, es la profetisa de la limpieza de la era Covid-19.
Pero Campbell me recibe calurosamente, animándome a quitarme varias capas de plástico transparente, látex y tela resistente a barreras: “No tienes que usar todo eso para mí”, dice. A un mundo de distancia de “Pandemic fly on the runway, in my hazmat” Campbell (inmortalizada en “Black Parade” de Beyoncé), la mujer que me saluda es una capa suave por todas partes: piel suave, camisola y pantalones de satén negro, parte central elegante en su cabello.
Está adornada con un collar colgante de mal de ojo, un teléfono que vibra constantemente y un paquete de cigarrillos que coloca frente a ella en la amplia mesa de la cocina donde elegimos sentarnos.
“Dejé de fumar durante la cuarentena, pero un amigo mío se suicidó y eso realmente me afectó”, me dice rápidamente, como si la información pudiera ser menos dolorosa al entregarla más rápido (no quería decir quién amigo era). “Llamé a mi chico en Israel, es genial para el azúcar, los cigarrillos y las adicciones, y vamos a hacer una sesión. Me dijo que primero pasara esta semana “.
Semana de extremos
La semana ha estado llena de extremos de dolor y amor. El día antes de conocernos, Campbell enterró a Ruby, la abuela que la crió y murió este verano a la edad de 94 años. El funeral tuvo lugar en Streatham, el mismo vecindario multicultural del sur de Londres en el que Campbell creció.
Hoy, amigos y familiares se han congregado en esta casa, unidos por su pérdida comunitaria. Más de una vez mientras hablamos, Campbell deja discretamente la mesa para buscar un pañuelo para secarse el ojo. También es felizmente caótico, ya que amigos y familiares van y vienen mientras sus hijos adolescentes toman platos de espagueti y se los comen en taburetes.
La abuela medía un metro ochenta y era de una comunidad agrícola de Jamaica”, me dice Campbell. “No conozco esas familias en las que ponen a un hombre a la cabeza. La abuela era la cabeza de familia “.
Campbell había llegado aquí desde Nueva York justo a tiempo para ver los últimos momentos de su abuela, impulsada en gran parte por una corazonada. “Sabía que tenía que llegar hasta ella”, dice. “Me entró el pánico por volar, pero estoy muy agradecido de haber decidido venir”.
La madre de Campbell, Valerie Morris-Campbell, se une a nosotros en la mesa mientras hablamos sobre su madre. Al igual que Campbell, ella no ha logrado rendirse a las normas habituales del envejecimiento, su cabello enmarca cuidadosamente un rostro apenas maquillado, su equilibrio inconfundiblemente el de una bailarina.
De hecho, una carrera de danza la llevó por todo el mundo cuando Campbell era joven, y durante esos años Ruby intervino para cuidarla. La cercanía entre los dos solo se intensificó en los últimos meses.
Faceta doméstica
“Muchas de las cosas que la abuela me enseñó cuando era niña entraron en juego en el encierro”, dice Campbell sobre los meses que pasó sola en Nueva York. “Estaba muy feliz de estar solo. Sé cómo cocinar. Sé limpiar. De hecho, es bueno conocer realmente todos los rincones de su hogar. Quiero decir, tengo que ser realmente honesta ”, le dice a su madre. “Nadie lo hace como tú.” Morris-Campbell asiente con aprobación.
Ver a Campbell con su madre y sus tías (la tía Yvonne, que acompañó a la joven modelo en su primer viaje a París, de 16 años, está aquí, al igual que la tía June, escolta para el primer viaje de Campbell a Milán) es colocarla en lo que se siente como el contexto adecuado. Campbell se crió en comunidad, rodeada de una narrativa clara sobre el poder de las mujeres y de ejemplos de negritud sin complejos y dramáticamente bellos.
“Ahora comprendes la fuerza de mi familia”, dice Campbell, señalando alrededor de la mesa a sus muchas madres. “Entiendes de dónde vengo”.
La comunidad de mujeres negras de Campbell ayuda a explicar la actitud que ha adoptado hacia una generación más joven de modelos y el papel de mentora que la ha convertido en una especie de madre sustituta para muchos en su industria.
Sus aprendices incluyen a Adut Akech, quien cariñosamente llama a Campbell su “mamá”: “¡Noemí es mi familia y siempre lo será!” dice Akech. “Ella es mi ídolo hasta el día de hoy”.
“El modelaje puede ser un mundo aterrador, y obtener el apoyo de cualquiera, y mucho menos de los pioneros, lo significa todo”, dice Ugbad Abdi. “Em. Naomi ha tomado tantos modelos bajo su protección. No estaría aquí si no fuera porque ella es quien es sin disculpas. Ella es el plano “.
Kaia Gerber, la hija de Cindy Crawford, es literalmente hija de la generación de supermodelos de Campbell. “Naomi siempre ha defendido las relaciones auténticas con diseñadores, editores, fotógrafos, etcétera, y siempre me ha animado a hacer lo mismo”, dice Gerber sobre el papel que Campbell ha desempeñado en su floreciente carrera.
Directa y controversial
Existe la sensación de que Campbell no se disculpa por su franqueza por la fuerza, en parte, al menos, debido a la cobertura de prensa incesantemente hostil que ha recibido en su país de origen.
Hubo hechos: dos condenas por agresión, por arrojar un teléfono móvil a su ama de llaves en 2006, y por agredir a dos agentes de policía después de ser expulsada de un vuelo en 2008. Hubo períodos en rehabilitación por adicción.
Como profesora de derecho, enseñé a los estudiantes sobre sus batallas finalmente exitosas con la prensa: cuando Campbell demandó a un tabloide en 2004 por fotografiarla asistiendo a Narcóticos Anónimos, sentó un nuevo precedente constitucional sobre el derecho a la privacidad.
Ella sostiene que otro periódico sensacionalista había estado pirateando ilegalmente su teléfono celular durante una década. En la cuenta de Instagram de Campbell, se identifica como modelo, actriz, innovadora cultural,
Campbell ha admitido regularmente sus fallas personales (“Soy un trabajo en progreso” es una frase que he visto repetida en casi todas las entrevistas que ha dado, incluida esta) y ha logrado una adorable irreverencia a su alrededor. Recordó su paso por el servicio comunitario de alta costura en 2007, cuando se puso una camiseta inolvidable que decía: NAOMI ME GOLPEÓ… ¡¡Y ME ENCANTÓ !!
Fuente: Vogue
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