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Emprendimiento

Marcelo Lee: emprendimiento detrás de las rejas, éxito fuera de ellas

Marcelo Lee, propietario de "Prisioneros del Sabor. Foto: Gentileza

Marcelo Lee, propietario de "Prisioneros del Sabor. Foto: Gentileza

En un gesto inspirador de superación y emprendimiento, Marcelo Lee, una persona privada de libertad (PPL) de la Penitenciaría Regional de Emboscada, ha logrado convertirse en un empresario exitoso con su salsa de ají picante “Prisioneros del Sabor”. A pesar de las circunstancias adversas, Marcelo ha demostrado que el ingenio y el emprendedurismo no conocen barreras, y los errores del pasado pueden ser enmendados.

La historia de Marcelo es un ejemplo de redención y esfuerzo. Con el apoyo del Ministerio de Justicia, a través de programas de reinserción social y laboral, Marcelo ha logrado llevar adelante su emprendimiento desde dentro de la penitenciaría. Su salsa de ají picante ha alcanzado un notable éxito, llegando a más de 200 puntos de venta en cadenas de supermercados y restaurantes, con una producción mensual de 16.000 botellas.

El Ministerio de Justicia, confiado en el potencial de la sinergia entre empresarios y PPL, ve en proyectos como el de Marcelo una oportunidad para sentar las bases de una penitenciaría industrial, donde la reinserción social y laboral sea una realidad palpable.

Equipo emprendedor detrás de "Prisioneros del sabor".

Equipo emprendedor detrás de “Prisioneros del Sabor”.

La receta de la salsa “Prisioneros del Sabor” es el resultado del talento culinario de Marcelo, quien ha utilizado ingredientes como pasta de ají seleccionada, manzana, ajo, jengibre y cebolla para crear un producto único y delicioso. Esta misma receta, de origen oriental, ya era parte de su repertorio antes de su reclusión, bajo el nombre de salsa picante de sabor kimchi.

El éxito de la marca ha trascendido las rejas y ha ganado popularidad entre los consumidores. Se vende en varias cadenas de supermercados y establecimientos gastronómicos, siendo uno de los productos más solicitados en ferias especializadas.

El emprendimiento ha generado empleo para 20 PPL, quienes trabajan arduamente para satisfacer la demanda del mercado. La iniciativa también ha involucrado a la comunidad local, ya que Marcelo ha coordinado con agricultores de la zona para asegurar la calidad de los ingredientes utilizados en su producto.

Marcelo Lee, a pesar de su situación legal, se muestra orgulloso de su emprendimiento y hace un llamado a sus compañeros PPL a confiar en los programas de rehabilitación como una vía para la reivindicación social y la reinserción laboral. Para hacer pedidos de “Prisioneros del Sabor”, se puede contactar a través del correo electrónico [email protected] o al teléfono (0985)156808.

Esta historia es un recordatorio de que el talento y la determinación pueden superar cualquier obstáculo, incluso tras las rejas, y que el emprendedurismo puede abrir puertas hacia un futuro mejor.

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