¿La salud es un derecho humano o un negocio?

Días atrás, el Círculo Paraguayo de Médicos se pronunció tajante y pidió la renuncia del titular del Consejo Nacional de Educación Superior (Cones), Federico Mora, a raíz de la habilitación reciente de facultades de Medicina que fueron clausuradas por no cumplir con los requisitos y parámetros científicos que lo demandan para la formación de las personas que estarán encargadas de la salud humana. Este hecho pone en la vidriera la poca seriedad con que se manejan los temas relevantes en el país.

Pero, además de ser cuestionada la poca importancia con que se manejan en materia de salud, también evidencia una grave situación que no es un hecho menor, que son las habilitaciones de las facultades nada más y nada menos para el negociado de unos pocos y el lavado de dinero de narcotraficantes apoyados por ciertos políticos, de acuerdo a lo denunciado por el doctor Alfredo Boccia, miembro del gremio de médicos.

Ambos son puntos sumamente importantes, la salud y el narcotráfico disfrazado de empresa para seguir perpetuándose libremente con la apariencia de una actividad comercial lícita, fuente generadora de empleos y a la vez formadora de profesionales.

Una lluvia de acusaciones mutuas generó este hecho entre Mora y los médicos denunciantes.

El funcionario responsabilizó a Narciso Velázquez, su antecesor, y resaltó la falta de cupo para estudiantes por parte de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), Facultad de Ciencias Médicas. Mencionó que cuando esto ocurra se podrán cerrar las otras facultades.

Mora, sin embargo, aclaró que no se trata de cantidad de facultades, sino más bien de calidad de las mismas, así como las prácticas de residencias de los estudiantes, para lo cual actualmente la UNA no tiene capacidad.

Mientras que los médicos resaltan la falta de experiencia y conocimiento por parte de Mora en el área de la medicina sostienen que se da lugar a la mediocridad en la formación. Además, piden dejar de lado la politización del cargo a fin de contar con alguien preparado para poder llevar adelante la institución.

En tanto sigue el cruce de acusaciones sobre las responsabilidades, el ciudadano seguirá echado a su suerte, siendo atendido en los centros médicos tal vez por personas con poca y /o nula formación para atender la salud humana a raíz de la falta de control y supuesta complacencia por parte del Cones en las habilitaciones de estas facultades.