Actitud imprudente

Una vez más, Estados Unidos se pronunció contra los hechos de corrupción y terrorismo aplicando la Ley Magnitsky para imponer sanciones financieras. En esta ocasión la medida apuntó al expresidente de la República -y flamante presidente del Partido Colorado-, Horacio Cartes, y el actual vicepresidente de la República, Hugo Velázquez. Ambos fueron declarados significativamente corruptos meses atrás por el país norteamericano.

La Ley Magnitsky autoriza a congelar activos extranjeros y prohibir la entrada a su país. En el caso del exjefe de Estado fueron sancionadas cuatro de sus empresas que operan en EE. UU.

Entonces, considerando la inacción de las instituciones locales ante hechos que atenten las leyes, el Paraguay seguirá soportando acciones de países extranjeros que para muchos son consideradas una intromisión en temas internos, cuando no una violación a la soberanía paraguaya.

Además, es de resaltar que Estados Unidos, por su actuar, no es un país que deje un proceso de investigación sin concluir. Manuel Antonio Noriega, panameño, fue el primer expresidente de la República en ser juzgado por EE. UU. acusado por cargos de lavado de dinero y narcotráfico y de tener vínculos con el cartel de Medellín, de Pablo Escobar. Este hecho se dio hace más de 30 años. Pero no olvidemos el caso más reciente que fue el del expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, quien fue investigado y extraditado a los Estados Unidos por supuesto narcotráfico y posesión de armas. Esto se dio en abril del 2022 luego de años de seguimiento. Otro hecho a no olvidar es el caso de Saddam Hussein, el otrora todopoderoso gobernante iraquí.

Entonces, viendo por un lado la actuación imprudente del exjefe de Estado en seguir adelante a pesar del primer pronunciamiento de EE. UU. que lo designó significativamente corrupto y que le prohibió el ingreso a su país, es posible considerar como un desafío entre ambas partes. Y este no es un hecho menor debido a que el delfín político de Cartes, Santigao Peña, se muestra con estrechos vínculos de relacionamientos con el país norteamericano.

Si bien algunos expertos aseguran que esta medida podría tener una consecuencia judicial de no ser acatadas las sanciones, esto no alteraría el tablero electoral para las próximas elecciones presidenciales del 30 de abril, teniendo en cuenta al candidato de Honor Colorado. Es más, desde las filas coloradas afirman que esta última medida del Gobierno de Joe Biden no es más que un show político para beneficiar a la oposición y que en aras republicanas se viene una unidad mucho más fuerte para hacer frente a los comicios.

Entonces, ¿también se podría considerar una provocación de los colorados para con los Estados Unidos al no tomar en cuenta estas pesquisas y consecuentes sanciones? ¿Se deberían esperar más acciones en caso de irrespetar las disposiciones?