Aprovechan residuos orgánicos para generar energía

La Asesoría de Energías Renovables, dependiente de la Dirección General Paraguaya de Itaipú, continúa con sus acciones de promoción de la eficiencia energética, para lo cual emplea un biodigestor de 4.200 litros que genera biogás y tiene la capacidad de evitar la emisión de 20 toneladas de dióxido de carbono (CO₂) al año. El equipo está instalado en el Salón de los Trabajadores de la Central Hidroeléctrica (CHI), ubicada en Hernandarias.

Se trata de un sistema de aprovechamiento de residuos orgánicos para la cocción de alimentos y la generación de abono orgánico. Impide la emisión de metano – CH4 (1 tonelada de metano equivale a 28 toneladas de CO₂ para la generación del efecto invernadero a la atmósfera) permitiendo generar energía térmica y neutralizando el metano a través de la quema del biogás.

La utilización de biodigestores propicia la mitigación de las emisiones de gases de efecto invernadero, a través de la maximización del aprovechamiento energético y minimización de la contaminación mediante los residuos orgánicos generados en la cocina y comedor del Salón de los Trabajadores de la Entidad.

Esta actividad contempla la capacitación constante de los usuarios sobre la importancia de la disposición y uso adecuado de los desechos orgánicos, así como el correcto funcionamiento del biodigestor, a fin de garantizar el uso eficiente de la energía para la cocción de alimentos de manera sostenible.

Este proceso cuenta con la importante colaboración de las superintendencias de Servicios Generales, de la Dirección Administrativa Ejecutiva, y de la Superintendencia de Gestión Ambiental de la Dirección de Coordinación de Itaipú.

La primera instalación de un biodigestor tuvo lugar en las reservas naturales de la Binacional en el año 2017. Actualmente, están siendo utilizados en todas ellas, así como en el Centro Ambiental Tekotopa de Itaipú.

En total, se tienen instalados 9 unidades de 1.200 litros y 2 de 4.200 litros; los cuales en conjunto pueden evitar hasta 94 toneladas de CO₂ al año, en el marco de las Prácticas EREE (Energía Renovable y Eficiencia Energética).