Paraguay, exportador emergente de té: potencial y desafíos en el mercado global

Conoce cómo Paraguay, a pesar de no ser un productor tradicional de té, se destaca en la exportación de esta bebida milenaria, desafiando los paradigmas del mercado internacional y abriendo nuevas oportunidades para su industria de infusiones.

El próximo 21 de mayo se celebra el Día Internacional del Té, Paraguay emerge como un actor significativo en la exportación de esta apreciada bebida, a pesar de no ser un productor convencional de la planta Camellia sinensis. En un contexto donde la producción de yerba mate, hierbas medicinales y aromáticas ha sido su sello distintivo, el país ha encontrado una veta promisoria en el negocio del té.

Jennifer Snaider, experta en mezclas de té y sommelier, enfatiza la importancia de reconocer la distinción entre el té convencional y las infusiones que caracterizan la oferta paraguaya. Si bien la producción de té en Paraguay es mínima, la calidad y diversidad de sus infusiones son excepcionales, gracias a la rica herencia cultural y las técnicas tradicionales de cultivo.

El mercado mundial de té e infusiones ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, proyectándose a alcanzar un valor cercano a los USD 319.000 millones para el 2025, según datos de Statista. En Sudamérica, Chile lidera las importaciones de té en la región, mientras que Argentina se posiciona como el noveno exportador a nivel mundial. En este contexto, Paraguay emerge como un actor prometedor en el panorama internacional, ofreciendo productos únicos que captan la atención de consumidores exigentes.

Cabe resaltar que en 2022, Paraguay exportó un total de USD 70.3 mil en té, consolidándose como el exportador número 127 a nivel mundial. Aunque estas cifras puedan parecer modestas en comparación con los principales actores del mercado, el crecimiento constante de las exportaciones paraguayas refleja un potencial que no debe subestimarse. Destinos como Canadá, República Checa y Estados Unidos han mostrado un interés creciente en los productos de té paraguayos, abriendo puertas a nuevas oportunidades comerciales.

Resultado del esfuerzo

Este crecimiento no es fortuito; representa el resultado de un esfuerzo continuo por parte de diversas marcas locales que han sabido capitalizar la riqueza de las hierbas autóctonas y el conocimiento ancestral en la preparación de infusiones. Además del impacto económico, la producción de té, yerba mate y hierbas medicinales contribuye de manera significativa a la generación de empleo en comunidades locales, promoviendo la agricultura familiar y las huertas sustentables.

El cambio generacional en los hábitos de consumo también ha impulsado el crecimiento del mercado del té en Paraguay. Las nuevas generaciones, especialmente los jóvenes de 20 años en adelante, muestran una preferencia creciente por el té, buscando adoptar un estilo de vida más saludable y explorar nuevas experiencias gastronómicas.

Microempresa

La marca que se está posicionando a pasos agigantados y que maneja Jennifer, llamada Ñande Té, este mes estuvo celebrando su primer envío a Estados Unidos, sumándose así a las otras grandes empresas que se destacan por su compromiso con la calidad, la sostenibilidad y la innovación.

Empresas como Santa Margarita, con su icónico Té Guaraní, han logrado trascender fronteras, exportando a países como Estados Unidos, España, Brasil, Bolivia, Japón y Polonia. Christian Cieplik, gerente general de Santa Margarita, destaca el compromiso con la calidad y la tradición como pilares fundamentales de su éxito en el mercado internacional.

Otra empresa que destaca en este panorama es Arcoiris, que con sus 16 sabores de té se introduce con presencia en mercados tan diversos como Estados Unidos, Bolivia, Polonia, Canadá y España. Este amplio alcance evidencia la versatilidad y la capacidad de adaptación de las marcas paraguayas para satisfacer las demandas de un mercado global cada vez más exigente.

A pesar de estos logros, Paraguay enfrenta desafíos significativos en su camino hacia una mayor consolidación en el mercado mundial, ya que no somos específicamente productores de la planta Camellia Sinensis.

En un mundo donde el consumo de té se ha convertido en un símbolo de estilo de vida saludable y sofisticado, Paraguay tiene la oportunidad de posicionarse como un proveedor confiable de productos únicos y de calidad. La celebración del Día Internacional del Té es más que una ocasión para honrar una tradición milenaria; es un recordatorio del potencial transformador que esta humilde hoja puede tener en la economía y la cultura de un país.