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Economía

Blanca Ceuppens: “Los colaboradores deben ser tratados como familia”

La N.º 1 de la industria nacional del pollo, Blanca Ceuppens, nos cedió gentilmente unos minutos en el marco de un evento en el cual su empresa, Granja Avícola La Blanca -que opera bajo la marca Pechugón- recibió el reconocimiento como Exportador del Año, en su rubro.

La CEO de Pechugón destacó la importancia del trabajo en equipo, la delegación de responsabilidades y la confianza en su filosofía de gestión.

La empresa está en proceso de abrir mercado en Taiwán y ha logrado aumentar su producción logrando exportar más de 100 mil toneladas.  Se describe como una persona comprometida y de palabra, y destaca el orgullo de tener preparada a la tercera generación para continuar con el negocio.

También enfatiza la importancia de la diversificación de productos para aumentar el consumo. Destaca que lo más importante de ser empresaria es el grupo humano con el que trabaja, el poder dar trabajo y formar una gran familia.

-¿Qué se necesita para ser un buen CEO a tu criterio?

Y la verdad que pienso que para dirigir una empresa uno no puede hacer solo. Es realmente un capital humano importante detrás. Y uno tiene que ser equipo, tiene que saber delegar y tiene que saber confiar y distribuir las responsabilidades para poder hacer todos juntos un producto, así como el nuestro, que es perecedero, que estamos hablando de que trabajamos con animales, que hay que alimentarles y cuidarles 24 horas.

-¿Proyectos para abrir mercado internacional?

Sí, realmente estamos a la espera del mercado de Taiwán, que ya nos reconocieron libre de influencia y en cualquier momento nos debería de llegar la notificación en qué fecha van a venir a hacer la inspección de los frigoríficos en Paraguay. Pero creemos que a más tardar en el mes de agosto estaremos habilitados y será un nuevo mercado y muy interesante para nosotros.

Creemos que a más tardar en el mes de agosto estaremos habilitados para exportar a Taiwán”.

-Precios para el consumidor local

-La verdad que nosotros somos un transformador de maíz y soja. Casi el 70% de lo que vale un pollo es lo que come y eso es de acuerdo al precio que se compran los granos. Muchas veces sí se da de que el precio internacional en la bolsa de Chicago está diferente a lo que el mercado local, pero eso también es porque las multinacionales, las agroexportadoras, tienen volúmenes importantes que enviar al exterior y tienen que cumplir esos compromisos. Nosotros lo que hacemos es tratar de compartir el precio del costo con el consumidor final, sea mercado de exportación o sea mercado local.

-Cifras de su negocio

-El año pasado cumplimos un récord y llegamos a 101.000 toneladas, que era nuestro objetivo y este año estamos de vuelta superando ese volumen y así que tenemos una proyección muy buena para este 2024.

-¿Quién es Blanca Ceuppens, detrás de la empresaria?

-Soy una persona de palabra y que no me gusta asumir compromisos que no voy a poder cumplir. Me siento muy comprometida tanto sea con mi familia como con mis padres, de los cuales heredé la empresa, y también con el consumidor.

 Me siento muy comprometida tanto sea con mi familia como con mis padres, de los cuales heredé la empresa, y también con el consumidor”.

-¿Está preparando ya a la nueva generación?

-Sí, gracias a Dios. Estamos ya trabajando con la tercera generación y ese es uno de los grandes orgullos de poder contar. Y creo que tenemos el tiempo suficiente para que ellos estén preparados y listos para hacerse cargo.

-Sofisticación de productos

-Hay algo que como consumidor también me llama la atención. En los últimos años, se diversificó la cantidad de productos. Hoy ya no es solo el pollo o solo la pechuga, es un montón de productos. Realmente nosotros tratamos de facilitarle tanto al ama de casa o al rubro gastronomía para que nuestra materia prima o su materia prima sea lo más acorde a las necesidades y por eso es la variedad de productos. Y también eso ayuda a que el consumo sea superior. Es muy difícil hacer que el consumo sea alto si uno siempre come la misma presentación y de la misma forma de cocinar. Sin embargo, ahí abrimos un abanico enorme con las hamburguesas, con los nuggets, con las pechumilas y que cada uno también pueda elegir la presa o la parte del pollo que más le gusta.

-El ser empresaria, ¿qué aportó en tu vida personal?

– Para mí lo más importante de ser empresaria es el grupo humano con el que uno trabaja. Realmente la cantidad de horas que trabaja hace de que esa gente pasa a ser realmente no solamente colaboradora, sino familia. Y yo creo que eso es el honor más grande, poder dar trabajo y poder formar una gran familia.

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