Financiamiento del FMI no impone condiciones al sector productivo, aseguran

El reciente respaldo financiero del Fondo Monetario Internacional (FMI) a Paraguay, que se traduce en una financiación de US$ 400 millones a través del Servicio de Resiliencia y Sostenibilidad (SRS), no impone condiciones al sector productivo del país, según afirmó Carlos Javier Charotti, viceministro de Economía.

Charotti destacó que el programa de financiamiento no conlleva restricciones que afecten al motor de crecimiento de Paraguay, representado por el sector privado, y en particular, la vital industria ganadera. Aseguró que el acuerdo técnico alcanzado y aprobado no incluye medidas relacionadas con la producción de gas metano.

El viceministro subrayó el compromiso de Paraguay en realizar reformas centradas en la preservación y expansión de la matriz de electricidad limpia. Esto implica continuar la producción de energía limpia y renovable, como se ha venido haciendo con proyectos como Itaipú y Yacyretá.

Charotti especificó que Paraguay no se encuentra en la transición que muchos países del mundo están experimentando hacia la producción de energía limpia y renovable, ya que el 100% de la energía consumida en el país proviene de fuentes limpias y renovables.

El funcionario detalló que algunas reformas están vinculadas a la gobernanza de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), incluyendo la realización de una auditoría externa internacional y la promoción de energías renovables no convencionales. Se destacó la importancia de reducir las pérdidas de la ANDE mediante la instalación de medidores inteligentes.

En relación con las condiciones propuestas por Paraguay y aceptadas por el FMI, Charotti mencionó la promoción de la reutilización, reciclaje y el uso responsable de envases plásticos, así como la instalación de puestos de carga eléctrica para vehículos. También resaltó el fortalecimiento de instituciones como el Infona (Instituto Forestal Nacional) y el Mades (Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible), así como el registro de usuarios de biomasa para comprender la demanda existente.

Esta aprobación del financiamiento por parte del FMI se produce una semana después de la promulgación de la Ley de Supervisión de Pensiones, un elemento clave en el plan de reformas propuesto por el Gobierno para recibir asistencia técnica del organismo internacional.