Dende revisa a la baja su estimación de crecimiento económico para 2023

En un giro inesperado, Desarrollo en Democracia (Dende) ha ajustado a la baja su proyección de crecimiento económico para Paraguay en 2023, reduciéndola del 6,5% al 4,8%. Este cambio significativo se atribuye a varios factores, siendo uno de los más influyentes la caída en el sector cárnico, junto con ajustes en el déficit fiscal de la nueva administración y la menor producción de commodities como maíz y trigo.

Cesar Barreto, economista jefe de Dende, destacó que a finales del año pasado se esperaba un crecimiento del 6,5%, impulsado por el repunte en el sector agrícola, especialmente la soja. Sin embargo, el desempeño decepcionante del maíz, el trigo y el sector cárnico obstaculizó este pronóstico optimista. La situación fiscal complicada, derivada del exceso de gastos del gobierno saliente, obligó a fuertes ajustes en la inversión pública, especialmente en construcciones.

La incertidumbre climática también se cierne sobre Paraguay, ya que su crecimiento está estrechamente vinculado al desempeño del sector primario. Aunque la recuperación agrícola, liderada por la soja, ha actuado como un “salvavidas económico” este año, otros commodities no han logrado un rendimiento similar, arrastrando hacia abajo el potencial repunte económico.

Barreto subrayó que la disminución en la producción de carne fue un factor significativo en la revisión a la baja de las proyecciones. Factores como la inestabilidad en los mercados y los precios llevaron a una menor faenamiento por parte de los productores, afectando las exportaciones, especialmente a China y Rusia.

El cambio de gobierno también dejó su huella, con un aumento del 22% en la inversión pública hasta octubre, pero las elecciones generaron incertidumbre, postergando la convergencia fiscal. El economista elogió la postura del ministro de Economía y Finanzas, Carlos Fernández Valdovinos, quien ha pospuesto la convergencia del déficit fiscal al 1,5% hasta 2026, aunque esto podría retrasar la obtención del grado de inversión para Paraguay.

A pesar de estos desafíos, Barreto resaltó algunos aspectos positivos, como el control de la inflación gracias a la independencia del Banco Central del Paraguay. Sin embargo, advirtió sobre la posibilidad de pausar la disminución de la tasa de política monetaria para mitigar riesgos de salida de capitales, considerando el umbral de la tasa de referencia de la Reserva Federal de Estados Unidos.

Para el próximo año, Dende espera un aumento del 3,7% en la economía paraguaya, impulsado por la apertura del mercado estadounidense en el sector de la carne y un posible crecimiento del 3% en Brasil. Sin embargo, el panorama internacional complicado, marcado por conflictos geopolíticos, podría afectar las decisiones de los bancos centrales y, por ende, la economía paraguaya. La atención se centra en los desempeños de los principales vecinos, Argentina y Brasil, con quienes Paraguay mantiene estrechos lazos comerciales.