Las preciadas lluvias renuevan esperanzas del sector agrícola

El Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio) ha compartido su más reciente informe sobre el pronóstico de precipitación en Paraguay para los próximos días, brindando buenas noticias para el sector agrícola. Se anticipan condiciones climáticas favorables en diversas regiones del país, con un pronóstico de lluvias significativas para el centro, este y norte de la región Oriental, así como para varias áreas del Bajo Chaco.

Este patrón de lluvias se espera que se mantenga desde el 23 hasta el 30 de octubre y se proyecta que los niveles de precipitación superen los 50 milímetros en las áreas mencionadas, lo que será beneficioso para mantener adecuados niveles de humedad en el suelo.

La noticia de estas precipitaciones es particularmente alentadora para el sector agrícola, ya que se espera que facilite la reanudación de las actividades de siembra de diversos cultivos. Después de enfrentar la fuerte sequía de tres periodos anteriores, la llegada de estas lluvias es crucial para garantizar un suministro óptimo de humedad en el suelo y apoyar la producción agrícola en el país.

Es importante destacar que Paraguay se encuentra bajo la influencia del fenómeno climático El Niño, que generalmente trae consigo un aumento de las lluvias. Sin embargo, este comportamiento climático ha experimentado retrasos, en parte debido a la sequía que previamente afectó a la región. A pesar de estos retrasos, la llegada de las precipitaciones actuales representa un alivio bienvenido para el sector agrícola.

El informe del Inbio también incluye pronósticos sobre las temperaturas máximas. En particular, se espera que sectores específicos del departamento de Alto Paraguay, en el alto Chaco, alcancen temperaturas extremadamente altas, entre 43 y 44 grados. En otras partes del país, como la zona sur, este y noreste de la región Oriental, se prevén variaciones más moderadas en los registros de temperatura, con temperaturas de alrededor de 32 a 33 grados.

El pronóstico de precipitación favorable y las condiciones climáticas adecuadas proporcionan un respiro necesario para el sector agrícola en Paraguay, permitiendo la reanudación de las siembras y generando optimismo en medio de los desafíos climáticos previos.