Inflación en trayectoria de estabilidad: señales positivas para la economía

El panorama inflacionario sigue evolucionando hacia una mayor estabilidad de precios, generando optimismo entre los analistas económicos. Con un proceso continuo de convergencia, se vislumbra que esta tendencia se consolidará en los próximos meses. Los riesgos e incertidumbres que antes amenazaban la estabilidad inflacionaria han disminuido notablemente.

Mientras se aguardan los resultados de agosto, las expectativas de los actores económicos respecto a la inflación se mantienen sólidas y pronostican posibles disminuciones interanuales debido a las reducciones que diversos productos experimentaron en los últimos meses. Este panorama sugiere que el indicador podría acomodarse dentro del rango meta para finales de 2023.

Conforme al informe más reciente, los precios lograron estabilizarse en julio tras la caída del 0,1% en junio pasado, lo que tuvo un efecto considerable en la medida interanual, que ya alcanzó el 3,5% para el séptimo mes del año. César Yunis, Gerente de Estadísticas Económicas del Banco Central del Paraguay (BCP), señaló que el proceso de convergencia continúa y resaltó que la incertidumbre a nivel mundial ha ido disminuyendo.

Yunis explicó, que el conflicto entre Rusia y Ucrania persiste, y por ende, los riesgos para la evolución de los precios aún están presentes. Sin embargo, el control ejercido en las principales economías globales da indicios de una posible estabilización de los precios. En el ámbito local, la reducción de los precios se relaciona directamente con las disminuciones observadas en los alimentos y el combustible en los últimos meses. Es relevante destacar que estas reducciones siguen vigentes, lo que continuará impactando en el indicador inflacionario.

Ante este panorama económico favorable y, en especial, la tendencia a la baja en la inflación, el Comité de Política Monetaria (CPM) tomó la decisión la semana pasada de realizar el primer recorte de tasas de interés, ubicándola en 8,25 puntos básicos. Los analistas proyectan que en los próximos meses estas decisiones se mantendrán, apostando a la consolidación de la estabilidad económica. Con cada vez menos riesgos en el horizonte, la economía parece estar encaminada hacia una mayor solidez y previsibilidad en el frente inflacionario.