Sector pecuario analiza eliminar vacunación antiaftosa luego del 2025

El sector cárnico de Paraguay considera la posibilidad de abandonar la vacunación contra la fiebre aftosa después del 2025 debido a las exigencias de los principales compradores internacionales. Aunque el país ha logrado altos niveles de inmunidad en su ganado, existen temores en el sector sobre la pérdida de mercados y la aparición de brotes de la enfermedad. Sin embargo, a largo plazo, no se descarta esta opción para cumplir con las demandas de los compradores.

El presidente de la Cámara Paraguaya de la Carne (CPC), Randy Ross, señaló que están hablando de un escenario posterior al 2025, posiblemente en el 2026. Mientras tanto, seguirán vacunando al ganado y observando las acciones de los países vecinos para definir su estrategia a futuro. Ross mencionó que Brasil y Bolivia están llevando a cabo proyectos exitosos para declararse libres de fiebre aftosa sin vacunación, lo que podría llevar a Paraguay a enfrentar las mismas expectativas por parte de los mercados, ya que representan el 60 % o 70 % de las exportaciones.

El presidente de la CPC expresó preocupación por la posibilidad de que ocurra un brote de fiebre aftosa, a pesar de que el sector cárnico se encuentra en una posición mucho mejor que en el pasado. Señaló que países como Taiwán, Chile e Israel ya han manifestado su interés en la eliminación de la vacunación, y en la última reunión de la Organización Mundial de Sanidad Animal (Omsa) se recibió presión, especialmente por parte de la Unión Europea, para que Paraguay deje de vacunar.

El estatus actual de país libre de aftosa con vacunación es fundamental para mantener los mercados internacionales abiertos. Por lo tanto, los productores y las industrias temen que la suspensión de la vacunación pueda resultar en la aparición de casos y la pérdida de mercados, especialmente considerando la densa fauna silvestre que aún existe en Paraguay. Ross destacó que una disminución en la defensa y la inmunidad del ganado podría tener consecuencias graves, como ocurrió en los años 2000 y 2011, cuando se perdieron mercados importantes.

La decisión de dejar de vacunar contra la fiebre aftosa representa un desafío importante para el sector cárnico paraguayo, ya que implica un equilibrio entre los requisitos de los compradores internacionales y la protección del hato ganadero. La observación de los países vecinos y la evaluación de los riesgos serán clave en la definición de la estrategia a seguir en los próximos años.