Rodolfo Kliewer: “Paraguay necesita un Gobierno que ponga al país sobre los intereses personales”

POR Martín Ramírez Machuca

Dr. en Lingüística, Lenguas, Filosofía, Educación y Didáctica. Universidad de Kiel, Alemania.

Al Paraguay se lo conoce como un país agroganadero por su suelo fértil (todo crece en el suelo del país). Esto hace que la ganadería también se vea beneficiada de ello y se convierta en un rubro que genera riqueza al país.

Paraguay llegó a estar entre los 10 mejores exportadores de carne vacuna en el mundo, pero en estos últimos tiempos, fue desplazado al puesto número 11. ¿Cuáles serían los factores que determinaron este descenso? Para responder esta pregunta, se debería realizar un análisis exhaustivo del rubro ganadero, especialmente para determinar el rol que cumple el Estado en este complejo rubro.

El Nacional se ha comunicado con el Ing. Rodolfo Kliewer, quien tiene una vasta experiencia en la ganadería extensiva y en la agricultura de confinamiento (feedlot). En esta nota, Kliever nos ilustra con datos técnicos la problemática actual de la ganadería paraguaya.

¿Cómo ves en general la situación en el campo?

Al campo lo veo con cierta preocupación. Venimos arrastrando varios años de vacas flacas, tanto en agricultura como ganadería. En cuanto al agro, vemos altísimos precios de soja y maíz, pero de nada nos sirven los precios en Chicago, cuando acá las cosechas se pierden y los costos prácticamente se han multiplicado. La ganadería ha tenido un buen año en cuanto a los volúmenes de exportación, pero a precios bajísimos. Después están los pequeños productores, ellos están peor aún. Aunque debo admitir que siempre tengo algo de esperanza, que las cosas puedan mejorar. Mi trabajo me permite recorrer bastante el interior del país. La semana pasada estuve por Caazapá, uno de los departamentos más pobres del Paraguay. Me llamó mucho la atención la cantidad de caminos pavimentados. La gente me decía: “Acá antes no llegaba ni el diablo, ahora entran macateros, acopiadores de piña, tomate, mandioca, chancho”. Ojalá en la próxima vea escuelas, colegios y centros de salud y por qué no, pequeños productores organizados en cooperativas. El problema de ellos es la eficiencia productiva. Los insumos caros elevan los costos, su producción se pierde porque no tienen herramientas de comercialización y suman y siguen los problemas.

En cuanto a la ganadería, específicamente del Chaco, ¿cuál es la situación actual?

Para hablar de la situación actual de la ganadería paraguaya, necesariamente debemos remontarnos unos años atrás, para entender mejor de dónde venimos y adónde vamos o queremos llegar. El Chaco, específicamente la región semi árida, que afecta los departamentos de Boquerón y gran parte de Alto Paraguay, ha sido golpeado por tres años seguidos de sequías (2020, 2021 y 2022), siendo la más grave, la del año 2020, año en el cual veníamos levantando números en el hato ganadero. Tal es así que habíamos superado nuevamente los 14 millones de cabezas, cifras únicamente superadas en los años 2014 y 2015. Cabe mencionar que la primera disminución del hato se da por las inundaciones en el 2015, cuando se perdió la producción de unos 200 mil terneros, que luego repercutió en la tasa de procreo del año siguiente. Volviendo al Chaco, esa sequía conllevó a que la mayoría los ganaderos se vieran en la necesidad de vender a precios irrisorios su ganado. Fue desesperante, como no había dónde colocar los animales jóvenes, se llevaba a faenar vacas preñadas y pariendo terneros. Otras categorías grandes, como toros, novillos y vaquillas se llevaba a confinamientos de la región Oriental. Muchos productores han tenido que refinanciar sus deudas en bancos y cooperativas.

En las últimas semanas han caído algunas lluvias importantes, ahí es cuando se produce esa magia de la naturaleza chaqueña, que en pocos días el infierno seco y polvoriento se transforma en un paraíso verde. Afortunados aquellos productores que han removido sus pasturas degradadas, enmalezadas o infestadas de hormigas cortadoras, consecuencias de la sequía y el sobrepastoreo. La gente está con mucha fe y esperanza que este año 2023 será un buen año, tanto para la ganadería como para la agricultura.

Según las noticias, Paraguay dejó de estar entre los 10 mejores exportadores de carne vacuna, ¿que repercusión tendrá eso para la economía del país?

Es cierto, hemos sido desplazados al 11.° puesto como exportador de carne bovina. Si bien solemos escuchar que la agricultura y la ganadería son parte de la macro y no permean la microeconomía, es justo recordar, que más del 80 % de los tenedores de ganado en Paraguay son pequeños y medianos productores. Cuando vemos las estadísticas de la pobreza extrema, esta ha disminuido en los años de mayor producción agroganadera, las exportaciones de commodities, subproductos y derivados. La caja de ahorros y por qué no decirlo, el seguro médico de muchos compatriotas en el interior, ha sido por décadas y siguen siendo justamente esos animales domésticos (vacas, cerdos y gallinas) para cubrir las emergencias.

No logramos despegar. Tenemos una tasa de procreo del 46 %, cuando nuestros vecinos están en 57 % (Uy) y 60 % (Arg), baja productividad por hectárea y por unidad ganadera. Para darte un ejemplo: Estados Unidos, con un hato de 92 millones de cabezas, produce casi la misma cantidad de carne que el Mercosur con 295 millones de cabezas. Su ganancia diaria por unidad ganadera es de 750 gramos; la nuestra es de 250 gramos. A eso se suma una industria cárnica en zona confort, de donde aparentemente viene la oposición a la creación del Instituto de la Carne, que en otros países tiene el objetivo de promover, regular, coordinar y vigilar las actividades de producción, transformación, comercialización, almacenamiento y transporte de productos cárnicos. Ni siquiera tenemos trazabilidad del hato ganadero. El mercado es cada vez mas exigente y no logramos conquistar los mercados premium. Por suerte este año se implementa la nueva tipificación de las reses en la faena. Eso permite en cierta manera premiar al productor por la calidad de carne.

Para los que no estamos involucrados directamente con la ganadería, ¿cuáles son las razas más criadas en el país?, ¿ventajas y desventajas?

Primero, mencionar que en Paraguay no tenemos genética propia. Las razas criollas que se habían formado desde la época colonial a partir de algunas razas españolas y británicas, como el Criollo Ñeembucú, Criollo Arroyense, Criollo Pilcomayo y el Pampa Chaqueño, hoy están desaparecidas, salvo el último que aún sobrevive, gracias a un pequeño grupo de ganaderos de bajo Chaco.

Voy a hablar brevemente de las cuatro razas de mayor importancia productiva que se han introducido y que han demostrado una excelente adaptación a nuestras condiciones climáticas: Nelore, Brahman, Brangus y Braford. Luego trataré de resumir una respuesta a tu repregunta sobre ventajas y desventajas.

La raza Nelore, que tiene su origen en el ganado Ongole, provincia del mismo nombre de la India, fue introducida al Brasil a mediados del siglo XIX, con el propósito de mejorar razas locales. Su rápida adaptación al trópico llevó a esta raza a un crecimiento exponencial y es hoy la raza más difundida en el vecino país. Ese animal elegante, a la vez rústico, de gran resistencia a ectoparásitos, su piel fina, pelaje blanco de pelos brillosos cortos, que lo defienden de los rayos solares, las hembras con aptitud materna única, fue la primera raza índica de gran aceptación y difusión en nuestro país, sobre todo en las extensas praderas naturales y campos anegables de Ñeembucú, Misiones y los Palmares del Bajo Chaco.

La raza Brahman tuvo su origen en el ganado vacuno importado en Estados Unidos desde la India. En la formación de esta raza intervinieron cuatro razas cebuinas, que son la Nelore, la Gyr, la Guzerat y Krishna Valley. La capacidad de tolerar altas temperaturas y humedad se debe a sus características raciales tales como; pelo corto, grueso y sedoso; piel suelta, de pigmentación oscura y con pliegues y mayor cantidad de glándulas sudoríparas por área superficial. Estas características raciales le dan al Brahman una resistencia natural a una gran variedad de insectos responsables de la transmisión de innumerables enfermedades tropicales. El ganado Brahman se sitúan como la raza de carne ideal para nuestro clima sub-tropical y también de gran adaptación al semi árido del Chaco central. En el Chaco, sin dudas, el Brahman es el Rey. La raza Brahman también ha participado en la formación de las siguientes dos razas de importancia productiva en nuestro país y que se han adaptado bastante bien a nuestro ambiente: Brangus y Braford.

Brangus, una raza sintética originaria de los Estados Unidos, formada a partir dos razas, Bos indicus (Brahman) y Bos taurus (Aberdeen Angus). Los primeros cruces para llegar a obtener la formación de esta noble raza, se empezaron a hacer a comienzos del siglo XX en Texas. La raza tiene en su composición genética 3/8 de raza Brahman y 5/8 de raza Angus, es decir 37.5 % y 62.5 % respectivamente. La raza Brangus es probablemente hoy la de mayor crecimiento en Paraguay. Ha demostrado un buen desenvolvimiento, mansedumbre, buena aptitud materna, excelente conversión alimentaria tanto en pasturas con en confinamientos. Su aptitud carnicera, el marmoleo que ha aportado el Aberdeen Angus y la rusticidad contribuida por el Brahman, hacen al Brangus, desde mi punto de vista, la raza que va seguir creciendo por mucho tiempo en Paraguay.

La raza Braford también se origina en Estados Unidos como una raza sintética, a partir de cruzamientos del ganado Brahman por Hereford, en la década del 50, en el estado de Florida. Es una raza joven, que se está posicionando muy bien en Paraguay, de buena aptitud carnicera. Algunas de sus características son: Precocidad reproductiva y productiva, facilidad de parto, temperamento dócil y eficiencia de conversión alimentaria. Las vacas producen buena cantidad de leche para sus terneros, que se traduce en destete de terneros pesados.

En cuanto a ventajas y desventajas te puedo decir lo siguiente: Hasta hoy día, por nuestras condiciones climáticas no hemos conseguido adaptar las dos razas británicas Angus y Hereford, de aptitudes carniceras extraordinarias, que sí son la base del ganado en el centro y sur de Argentina y de Uruguay, pero lo que queremos es producir carne de calidad. Entonces, lo que hacemos para lograr la calidad de nuestra carne y a la vez animales cada vez más productivos, trabajamos en la selección de los mejores ejemplares, cualquiera sea la raza. De esta manera generamos un mayor vigor híbrido en nuestro rebaño, en base a mejoramiento genético por hibridación. De esa manera también vamos incorporando otras razas, como Santa Gertrudis, Charolais, Limousin, Montana, Senepol y otras. Siempre cuidando la base genética de las cuatro razas principales, que te mencioné anteriormente: Nelore, Brahman, Brangus y Braford.

Se viene un año electoral muy reñido, ¿qué ideología política contribuiría al desarrollo de la ganadería en el país?

Con solo ver el ánimo de los productores rurales de nuestros países vecinos, sin eximir de responsabilidad de muchos fracasos al partido de gobierno de las últimas décadas en nuestro país, te puedo decir con toda franqueza, que el Paraguay necesita un Gobierno que ponga al país por delante de los intereses personales, ideológicos o partidarios. Necesitamos seguridad jurídica para trabajar, invertir y atraer inversiones extranjeras, seguridad social, educación y salud. No te estoy diciendo que todo debe ser gratis, al contrario, el gobierno debe brindar las condiciones para que el ciudadano pueda acceder a los servicios básicos. Eso significa reactivar la economía, lo cual no se consigue con más impuestos o impuestos a ciertos rubros, que equilibran o inclinan favorablemente la balanza comercial del país, ingresan divisas y contribuyen a que hoy no estemos lamentando la galopante inflación que sufren algunos países vecino nuestros.

El Chaco tiene una biodiversidad muy peculiar, es decir, todo cuesta el doble, ¿qué estrategias son las más utilizadas para lograr una buena producción en el año?

El suelo chaqueño es muy fértil y a la vez muy frágil. En condiciones agro-climatológicas óptimas, durante la primavera y el verano es cuando se debe producir todo el alimento que va consumir el ganado durante el año. El productor chaqueño está consciente que después del otoño vienen los meses más duros, seis a siete meses de sequía al año es algo normal. El problema es cuando eso se alarga. Para eso es necesario integrar la agricultura a la ganadería. Hoy existen métodos muy eficientes de conservación de heno, ensilados y granos, sin necesidad de hacer grandes inversiones. Hay equipos y empresas que se dedican exclusivamente a prestar servicios tercerizados, hasta de preparación de suelos, cuidados culturales, posterior cosecha y almacenamiento de granos. El otro factor y no menos importante es el agua. Se debe contar con reservorios.

El agua es el oro líquido en el Chaco, ¿cómo hacen para sobrevivir cuando hay largas sequías?

Lo primero que uno mira y se pregunta al iniciar un proyecto agropecuario en el Chaco es: ¿dónde y cómo junto agua? En algunas zonas el agua subterránea es apto para consumo animal, pero generalmente contiene enormes cantidades de sal. El método más utilizado es la excavación de tajamares en lugares bajos y suelo arcilloso donde en épocas de lluvias se junta el agua. Esa misma tierra que se extrae es utilizada para la construcción tanques australianos, que consiste en armar una base de unos 4 a 5 metros de altura, luego en círculo se va levantando las paredes del tanque. Todo eso con la tierra que se obtiene de la excavación del tajamar. Una vez que llueve y se llenan los tajamares, mediante bombas con paneles solares se cargan los tanques australianos. Desde allí el agua es distribuida a los bebederos en los potreros o piquetes. De esa forma el ganadero contribuye también con la vida silvestre, que aprovecha perfectamente el agua.

Otro tema esencial es el cultivo de la correcta pastura para la alimentación adecuada del ganado, ¿podrías comentarnos sobre tu experiencia en esta problemática?

El pasto más utilizado hoy en el Chaco es el Gatton panic (Megathyrsus maximus), una gramínea perenne rizomatosa, de la familia de las poáceas, originaria del sur de África. Este pasto luego ha sido mejorado en Australia y ha logrado la clasificación superior de Panicum máximum. Hay mediciones que se han hecho en pasturas limpias y condiciones climáticas óptimas, donde se pudo demostrar que el Gatton panic produce hasta 12.000 Kg por hectárea de materia seca al año. Conozco varias versiones de cómo llegó al Paraguay esta especie. Lo cierto y concreto es que se trata de un pasto resistente a largas sequías, de buena palatabilidad, de importante valor nutricional incluso en el invierno, excelente para conservación en forma de heno seco, tanto rollos como prensado. Su principal enemigo son las hormigas cortadoras (akekê).

En el país tenemos dos grandes realidades: 1) los grandes productores y 2) los pequeños productores, ¿qué planes estatales actualmente existen para fortalecer y optimizar la producción de ambos sectores?

Los grandes productores agropecuarios, en cuanto a asistencia técnica no necesitan del gobierno, poseen tecnología mucho más avanzada y sofisticada de la que cualquier gobierno o el Ministerio de Agricultura y Ganadería les pueda ofrecer. Los grandes solo esperan seguridad jurídica y alguna que otra intervención diplomática para exportar la producción o colocarla en la industria nacional, ya sea molienda de granos o industria textil, lo que fuese. Los pequeños productores, si es que producen, no tienen mercado o no poseen las herramientas para vender su producción. Si hay mercado, producen ineficientemente y eso eleva sus costos. Desconozco los planes estatales para ese sector. Algunas gobernaciones brindan una asistencia mínima. Veo que hay alguna actividad con el cáñamo y el sésamo, pero estos programas del gobierno generalmente están totalmente politizados. El remedio es peor que la enfermedad.

Europa contamina y América apuesta al verde, ¿cómo impacta actualmente el cambio climático en el rubro de la ganadería?

Creo que existen dos tipos de cambio climático, uno que es real y cíclico, que existe desde que mundo es mundo y prueba de ello son las eras de hielo y los calentamientos globales por las que durante miles y millones de años ha atravesado nuestro planeta. El otro es el que se estudia desde mi punto de vista erradamente solo a partir de la revolución industrial a nuestros días. Pero si vamos a pelearnos con todo el mundo sobre este tema, lo mas probable que choquemos contra la pared. Algunos culpan a las vacas, que liberan metano, pero el Ch4 en la atmósfera se convierte en Co2 y vuelve a ser secuestrado por la misma pastura donde pastaba la vaca. La pregunta que me hago a veces es la siguiente: Si cada día hay más personas dispuestas a pagar un precio más elevado por un producto al que llaman “ecológico” o “Carbono Neutral”, ¿por qué no le mostramos al mundo que nuestras vacas caminan libremente sobre una pastura y cada vez que arrancan un bocado, éste pasto en 72 hora se regenera mediante fotosíntesis, secuestrando así el carbono del aire, depositándolo en el suelo. Podemos certificar nuestra carne como un producto “Carbono Neutral” o “100% grass fed beef”.

¿Si te llamaran a ser ministro del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), qué acciones tomarías para modernizar el agro en el país?

La agricultura empresarial o mecanizada en Paraguay es bastante moderna. El 98 % de la siembra de soja, maíz, trigo, girasol, etc. es con sistema de siembra directa, eso significa que no se realiza movimientos de suelo. También contamos con tecnología bastante avanzada, maquinaria con piloto automático, aplicaciones de agroquímicos muy puntuales, agricultura de precisión. Donde hay para modernizar, son medianos y pequeños productores, pero modernizar requiere de mucha capacitación. Hay que empezar por ahí. En cuanto al llamado para ser ministro del MAG, el actual ministro Bertoni es un profesional altamente calificado. Es muy bueno.

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