Análisis sobre la industria paraguaya en su día

El 8 de septiembre de cada año se celebra en Paraguay el Día de la Industria Nacional. Se hace esta celebración para conmemorar a la rama de la economía que ha logrado un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) promedio del 3,7% cada año durante los últimos 10 años, hasta el 2019 y que ha empleado al 11,1% de la población ocupada al último semestre del año anterior.

Sin embargo, ante la crisis ocasionada por la llegada del Covid-19 al país, el Banco Central del Paraguay (BCP) estima un decrecimiento del 3,5% para el sector manufacturero, lo que se debe al impacto generado en la producción como consecuencia del menor nivel de demanda tanto interna como externa.

Esta situación ha generado que de enero a julio del corriente año el total de exportaciones en el nivel de procesamiento de manufactura de origen industrial (MOI) haya disminuido 38,6 mil toneladas, es decir, 15,9% menos comparado al mismo periodo del año anterior, lo que se traduce en USD 101,1 millones menos.

Capacidad

Así, la capacidad de mantenimiento de personal en el sector industrial se ha ido deteriorando, con lo que al segundo trimestre del 2020 tan solo el 10,7% de la población ocupada se encuentra en el rubro, es decir, 0,4 puntos porcentuales menos que al final del 2019, afectando a aproximadamente 31 mil personas.

Es por esto que la necesidad de acceso al crédito de este sector será importante a modo de mitigar de cierta manera el impacto en su economía y no verse obligados a incrementar el desempleo. Así, al cierre del mes de julio, el total de préstamos concedidos a las industrias representa el 7,8% del total de la cartera, con un crecimiento 0,8%, sin embargo, al mismo mes del 2019 se registraba un crecimiento de 7,6%, por lo tanto, el dinamismo del sector está limitado.

En este día donde el sector industrial está evaluando su impacto a la economía nacional, se debería realizar un esfuerzo mayor en la flexibilización de los requisitos para la concesión de créditos al sector y se den más incentivos a la creación de nuevas industrias, para que la manufactura local pueda emplear a una mayor cantidad de trabajadores en el mediano y largo plazo.

Fuente: Mentu