Lenín Moreno: “Hay que valorar la paz y la libertad antes de perderlas”

El expresidente de Ecuador, Lenín Moreno, habló en exclusiva para El Nacional acerca del convulsionado momento que vive su país tras el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio, quien fuera acribillado al salir de un acto de campaña en Quito. Además, dio su opinión sobre la actualidad política de Paraguay, ya que vive aquí desde hace más de un año. En declaraciones a algunos medios, señaló que en su país enfrenta lo que describe como una “persecución” por haber “evitado que Ecuador se vuelva otra Venezuela”.

¿Quién o qué organización está detrás del asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio en Ecuador?

Es muy difícil saberlo con claridad por ahora. Solo hay especulaciones y presunciones. Pero la verdad es que Ecuador se ha vuelto un país de terror, un estado fallido, donde las bandas internacionales -sobre todo, ligadas al narcotráfico- se encargan de hacer “ajusticiamientos” de personas que les resultan incómodas porque prometen enfrentarlas, que es lo que le pasó a Villavicencio.

¿Cómo se dio el ingreso de estos grupos criminales a Ecuador y qué consecuencias tendrá que sean cada vez más poderosas?

Es difícil predecir las consecuencias futuras -aunque no serán nada alentadoras- pero entre las causas, la principal es que durante el gobierno de Rafael Correa fueron excesivamente permisivos con las pandillas, es más, las integraron al sector público. Además, expulsaron del país a la base estadounidense de Manta, una ciudad costera de Ecuador, y que se dedicaba al control del narcotráfico y la delincuencia organizada de grandes grupos criminales. La otra causa es que, por alguna razón, hubo varios radares que compraron pero que nunca funcionaron.

Esto que vivimos hoy en mi país es parecido a lo que vivieron en Colombia en los años 80, cuando mataron a Luis Carlos Galán (enfrentado a Pablo Escobar), así como a Jorge Eliécer Gaitán en los años 50 o a Luis Donaldo Colosio en México, en los 90.

¿Cuál será el efecto de este asesinato en las elecciones de Ecuador y cómo cree que el pueblo ecuatoriano está observando lo que pasa?

Los ecuatorianos lo viven con rabia y con temor. Las elecciones deben realizarse de todos modos porque es lo que establece la ley y la presidenta del Consejo Nacional Electoral ya ha confirmado que se realizarán. Es más, también debe realizarse el debate presidencial que está previsto para hoy domingo.

La norma electoral también establece que si por alguna razón fallece un candidato presidencial, el partido político lo debe reemplazar con otra persona. Si no lo reemplaza, la papeleta queda exactamente igual y si el candidato fallecido resultara el ganador, la candidata a vicepresidenta asumirá el cargo de presidente y deberá enviar a la Asamblea Nacional una terna de la cual los congresistas deberán elegir al vicepresidente de la república.

¿Qué similitudes y diferencias ve usted entre Ecuador y Paraguay, ahora que lleva algún tiempo viviendo en nuestro país?

Nosotros hasta el gobierno anterior vivíamos en paz, no una paz total, pero la verdad que la paz de Paraguay es muy envidiable. Aquí la criminalidad es bastante menor que en Ecuador y eso hay que cuidarlo. Es un tesoro, pero lastimosamente a los tesoros como la libertad y la paz no se los se valora en su real dimensión sino hasta cuando se los pierde.

¿Usted cree que en América Latina hay un resurgimiento de actitudes y gobiernos autoritarios?

Por alguna razón el “socialismo del siglo XXI” siempre va acompañado de ese tipo de actitudes. Provocan maniqueísticamente una polarización entre distintos sectores sociales, un odio al otro, algo que no había antes. En el pasado se respetaba al contrario, al que opinaba distinto.

Durante el periodo en el que me tocó ejercer la presidencia de Ecuador, entre los candidatos no había ni siquiera golpes de puño, mucho menos lo que estamos viendo ahora. Hay muchas razones y no sé si la responsabilidad es sobre todo del actual presidente Guillermo Lasso o del exmandatario Rafael Correa, pero se perdió la paz.

¿Cómo analiza la actualidad política paraguaya ahora que estamos por iniciar un nuevo periodo de gobierno?

Tienen un nuevo presidente que ha ganado con mayoría clara de votos en unas elecciones pacíficas, en las que solo hubo algunos reclamos esporádicos. A Santiago Peña lo visité hace algunos días en su casa y me pareció un joven muy entusiasta y con muchas buenas intenciones.

Respecto al presidente saliente, Mario Abdo Benítez, también es un joven que ha sabido mantener la paz y la estabilidad de la república y ha generado mucha obra pública para el beneficio de los paraguayos. Eso me parece extraordinario.