Casi 9.000 empresas sucumbieron a la crisis en lo que va del año

¡Se alquila! Calles vacías, negocios sin clientes, facturas atrasadas sin fecha para cobrar, despidos… Esta es la situación por la que atraviesa gran parte de los agentes económicos del país como consecuencia de la estanflación, es decir, una caída económica acompañada de la disparada de precios y desempleo.

Los más de 60.000 nuevos desempleados que se registraron en los primeros meses del año son consecuencia directa del cierre de empresas, principalmente las micro y pequeñas, que no están pudiendo hacer frente a la complicada coyuntura. En este marco, en entrevista con Ñanduti, el viceministro de Tributación, Óscar Orué, informó que entre enero y mayo, 8.889 empresas cancelaron su Registro Único de Contibuyente (RUC).

Este fue uno de los motivos por lo que el Ejecutivo decidió prorrogar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) diferenciado a establecimientos gastronómicos, hoteles y otros servicios, al menos hasta setiembre próximo. Tanto Orué como el titular de Hacienda, Óscar Llamosas, vienen reconociendo que la recuperación se está haciendo más lenta de lo esperado, efecto de la incertidumbre en los mercados internacionales.

El bajón se hace sentir fuerte en la economía familiar. Datos del Banco Central del Paraguay (BCP) dan cuenta de un fuerte endeudamiento en consumo, que pasó de 3,6 a 17,3 % en relación al Producto Interno Bruto (PIB) en un año. Los bancos y comercios que venden a créditos, por su parte, registran incremento en cuanto a la morosidad, es decir, retrasos en pagos de cuotas de deudas de consumo principalmente.

La nueva amenaza para las Mipymes formalizadas es el aumento del salario mínimo legal a G. 2.550.307 -que, en realidad, representa G. 3 millones desde el punto de vista de la erogación del empleador- visto que les costará cumplir con la obligación hacia los suyos debido a que no logran salir a flote. De hecho, los trabajos en negro y mal remunerados no paran de crecer desde que llegó al país la pandemia Covid-19.

Señales positivas

La noticia positiva es que hubo un aumento de recaudaciones como consecuencia directa de la formalización de otras empresas, que incluso duplicaron en cifras a las empresas que bajaron el telón.

La recaudación acumulada desde enero a junio de este año alcanzó una cifra preliminar de 9.680.285 millones de guaraníes, lo que representa un crecimiento del 15,2 % respecto a la recaudación de los seis primeros meses del año pasado.

De hecho, la recaudación efectiva del 1 de enero al 30 de junio creció en un 17 % alcanzando 9.230.014 millones de guaraníes. Sin embargo, en materia de impuestos cancelados con créditos fiscales, se registró una diferencia negativa respecto al año pasado, lo cual configura el total acumulado en materia de recaudación.

En lo que respecta específicamente a los números del sexto mes del año, la recaudación efectiva registró una variación positiva del 10,2 %  respecto a junio del año pasado, alcanzando un ingreso de 1.181.889 guaraníes.

Lo que queda por mejorar es la calidad del gasto público, hoy más que nunca amenzado por la carrera electoral.