¡Racing es campeón de la Copa Sudamericana 2024!

Racing se consagró campeón de la Copa Sudamericana 2024 este sábado tras superar por 3-1 a Cruzeiro en la gran final que albergó el General Pablo Rojas (Nueva Olla).

La Academia sorprendió a Cruzeiro en el arranque del partido. A los 2’, Maximiliano Salas recibió un balón a profundidad sobre la punta izquierda. Desde allí lanzó un centro al área, donde esperaba Adrián Martínez. En su hábitat. Aguantó la marca, giró y abrió a la derecha. Apareció entonces Gastón Martinera para romperle el arco a Cássio, pero el gol no subió al tanteador. Se anulo vía VAR por un supuesto offside de Salas en el inicio de la jugada. De igual manera, Racing mostraba sus armas.

No tardó nada Martinera en quitarse las ganas. A los 14’, tiró un centro que terminó metiéndose en el ángulo superior derecho de Cássio. Se hacía justicia. Porque Racing era más intenso. No dejaba jugar a Cruzeiro, incómodo en todos los sectores.

Y el 2-0 llegó ahí nomás, 5 minutos después. Salas, intratable, envió otro centro desde la izquierda. Atropelló Adrián Martínez. Los brasileños no entendían qué pasaba. Recién promediando la media hora fueron un poco más incisivos. A los 29’, Matheus Pereira cruzó un centro desde la izquierda Kaio Jorge conectó, pero la pelota salió por encima del travesaño. Más clara fue la que dispusieron sobre el final del primer tiempo: Lucas Villalba remató tras córner desde la izquierda. Capturó Arias.

Cruzeiro descontó apenas se puso en marcha la segunda etapa. Gran jugada colectiva que terminó en un cabezazo de Kaio Jorge. Tapó Arias, pero Jorge estaba atento y en el rebote no perdonó. Al ponerse a tiro de empate, ganó confianza. De hecho, al minuto siguiente, Arias tapó un remate de media distancia para evitar el 2-2.

Los dirigidos por Gustavo Costas se iban quedando sin energía. Así y todo, no pasaron mayores sobresaltos. Incluso, fueron los que más apeligraron en los ataques. Transcurría el minuto 94 cuando Salas quedó mano a mano ante Cássio para liquidar el expediente, pero definió mal: el esférico se alejó del palo izquierdo del portero brasileño. Pero Cruzeiro ya estaba jugado, con sus líneas adelantadas. Y en la siguiente acción se produjo el 3-1. Roger Martínez, en soledad, pateó con todas sus fuerzas. Ahora sí. Infló la red y desató la locura. Ya no hubo tiempo para más. Ganó de forma merecida. Después de 36 años vuelve a conquistar un título internacional.