Primer año sin el gran Osvaldo Domínguez Dibb

Un 5 de agosto como hoy, pero de 1940, nacía en Asunción el hijo de Julio Domínguez y Emilia Dibb: Osvaldo Domínguez Dibb, el dirigente más exitoso del deporte guaraní.

De su padre heredó la habilidad para el comercio; de su madre, el amor por la Franja Negra. Sus primeros pasos en el Olimpia los dio como aguatero del equipo de fútbol. Según cuenta en su libro “Memorias de la Gloria, Mi vida”, su padre le daba dinero para los pasajes y para la entrada a los partidos; sin embargo, “de puro pícaro”, él se metía como aguatero. Así ingresaba gratis y se ahorraba el dinero para las naranjas.

Tuvo una corta carrera como futbolista. Probó en Sol de América y no tuvo suerte. Más tarde, se desempeñó como central en Mbiguá. Allí le vio un técnico de Cerro Porteño y le invitó a jugar en el Ciclón. “Jugué medio tiempo en reemplazo de uno de los hermanos Monín, que era el back central de Cerro. Entonces escuché un comentario en el vestuario: ‘A este turco ra’y le vamos a dar con un palo porque viene a sacarle el puchero a tu hermano’. Eso hizo que no me fuera más”, relató ODD.

Fue entonces cuando decidió dedicarse al básquet. Comenzó en el Sport Unión, donde se formó desde los 13 hasta los 17 años –también jugando los intercolegiales con Fulgencio Yegros–. Dos años después pasó al Olimpia, equipo que tenía grandes basquetbolistas entre sus filas. Pero ODD supo sobresalir gracias a su disciplina.

Precisamente, fue durante esa etapa que le bautizaron El Rata. “Me llevaron al combinado de Asunción, un plantel que se armó para un amistoso en Corrientes, Argentina. Fue en uno de los partidos preparatorios, en el Estadio Comuneros, cuando comencé a escuchar que los muchachos me gritaban desde afuera: ‘¡Dale, Rata! ¡Dale, Rata!’ Después lo volví a escuchar en otras canchas. Y quedó. No me molesta. Nunca me molestó. El Rata Domínguez”, cuenta su libro autobiográfico.

Defendió los colores del Franjeado hasta los 29 años. Luego fue director técnico de sus compañeros, así como del equipo femenino. Pero fue cuatro años más tarde, a los 33, cuando todo cambió… Aquel joven aguatero se convertía en presidente de su amado club. Bajo su gestión, Olimpia creció patrimonialmente y en lo deportivo.

Colocó al Decano entre los más grandes del fútbol sudamericano, pues, durante sus 23 años –en distintos periodos– de presidencia, Olimpia logró 14 títulos nacionales y siete copas internacionales. Entre ellas, tres Libertadores y una intercontinental.

Hoy cumpliría 84 años. Las redes sociales del Olimpia publicaron un emotivo mensaje por esta fecha tan especial: “Nos dejaste un legado imborrable. Te atreviste a soñar, llevaste la bandera del Olimpia hasta las cumbres más altas del deporte y cambiaste la historia del fútbol paraguayo. Osvaldo Domínguez Dibb, siempre vas a estar en el corazón de cada olimpista. ¡Un abrazo al cielo, Presidente Eterno!”.

Osvaldo Domínguez Dibb falleció el 2 de febrero de este 2024. Recibió todo tipo de tributos. El remodelado estadio del Olimpia llevará su nombre. Otro de los tantos homenajes que no alcanzan para agradecer su colosal legado al deporte paraguayo.