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Cultura

“La isla sin mar”

Acaba de aparecer “Cartografía literaria del Paraguay”, colección de siete ensayos de Sonja Maria Steckbauer, publicada por Intercontinental Editora. Compartimos aquí la introducción de la autora, quien aborda en este libro las obras de Josefina Pla, Gabriel Casaccia, Augusto Roa Bastos, Renée Ferrer, Guido Rodríguez Alcalá, Juan Carlos Herken y Susana Gertopán.

Sonja Maria Steckbauer. Cartografía literaria del Paraguay, 2024.

Sonja Maria Steckbauer. Cartografía literaria del Paraguay, 2024.

En uno de mis viajes lejanos, descubrí una isla. De vuelta, visité a un célebre geógrafo. Me oyó, consultó largamente libros y planos, y me dijo:
— La isla que ha descubierto no existe. No está en el mара.
Rafael Barrett, El dolor paraguayo [1] 

 

Con esta reconocida cita, Rafael Barrett resumió la situación de aislamiento tanto geográfico como político, pero también cultural, que caracterizó al Paraguay durante más de cien años. La cita la escribe desde Francia, adonde se vio forzado a migrar en 1910 y donde murió el mismo año. La acusación oficial que había recaído sobre Barrett, por haber escrito informes políticos y económicos, era de producir “literatura subversiva”, aquello que Juan Carlos Herken identifica en parte por su “[e]stilo claro, cristalino, de frases breves y terminantes” [2]. Al interpretarla en su contexto, tanto histórico como personal, la frase de Barrett adquiere otra connotación y sirve como primer indicio para entender la difícil producción y promoción de obras literarias en esta isla rodeada de tierra.

Luis Alberto Sánchez, Historia de la literatura americana, 1937. Cortesía

Luis Alberto Sánchez, Historia de la literatura americana, 1937. Cortesía

En 1937, el peruano Luis Alberto Sánchez elaboró, en su Historia de la literatura americana, el tópico de “La incógnita del Paraguay” [3], que fue replicado como título de libro por parte de Hugo Rodríguez Alcalá [4]. La imagen pintada por Barrett y Sánchez fue retomada e ilustrada a lo largo del siglo XX, tanto por autores paraguayos como por críticos internacionales. A pesar de las críticas a esta estigmatización, la reputación de la literatura paraguaya en el extranjero no ha mejorado ni se ha beneficiado a pesar de las contribuciones de los escritores del país. Tal es así que, al final del siglo pasado, Augusto Roa Bastos explica en una entrevista dada a Mar Langa Pizarro:

Paraguay no tiene literatura. […] Tenemos tres o cuatro o cinco libros, que no son tampoco de muy buena calidad […]. Este país ha vivido bajo una placa de plomo durante más de cien años, ¿y cómo quiere usted que respire?
Con su situación mediterránea geográficamente, su aislamiento, por tanto, de las culturas tanto superiores como de los demás países de América Latina […] ha permanecido como un islote [5].

Augusto Roa Bastos representa parcialmente una excepción al canon paraguayo: fue un escritor reconocido como participante del boom literario latinoamericano que, por sus temas literarios configurados a través de elementos indígenas o “exóticos”, así como por sus textos adscritos al realismo mágico, fascinó a lectores y críticos en todos los rincones del mundo. Pero, los demás autores del Paraguay con sus obras igualmente interesantes no llegaron a un público tan amplio, por lo que José Vicente Peiró los compara con “robinsones que, desde su trabajo individual y solitario, llegan a caer en la desesperanza” [6]. El crítico español enumera una serie de razones por las que este “pozo cultural” sigue existiendo al final del siglo XX, entre las cuales pueden listarse: el peso de las dictaduras históricas, la carencia de difusión de la industria editorial, la falta de una investigación universitaria coherente y, por último, la inexistencia de una crítica literaria local.

Augusto Roa Bastos. Cortesía

Augusto Roa Bastos. Cortesía

Sólo a partir del fin del siglo XX comienza a emerger, por lo menos desde el exterior, un cierto interés por la literatura escrita en esta isla literaria [7]. Cabe mencionar las primeras tesis de doctorado que se escribieron en Francia y España, por Claude Castro [8] y por Mar Langa Pizarro [9], quienes analizaron novelas históricas de Guido Rodríguez Alcalá. Así también, el voluminoso estudio de José Vicente Peiró Barco Literatura y sociedad. La narrativa paraguaya actual (1980-1996), concluido en 2001 y que en casi 1.800 páginas comprueba que en el Paraguay hay más de un escritor que merece mencionarse [10]. En el mismo año (2001), terminé mi tesis de postdoctorado en Alemania Insel ohne Meer. Prosa Paraguays von 1980 bis 2000 (Isla sin mar. Prosa paraguaya de 1980 hasta 2000) [11], que abarcó por casualidad el mismo período, sin que José Vicente Peiró y yo conociéramos por entonces nuestros respectivos trabajos. Por su parte, los críticos europeos siguieron dedicándose, a comienzos del siglo XXI, a la obra de Augusto Roa Bastos; resultado de una de las más profundas labores es la tesis de Carla Fernandes [12].

De tales estudios, se deduce un mayor interés en la literatura paraguaya en las universidades europeas y, por tanto, en la docencia como en las actividades de sus profesores. Como primera consecuencia, se organizan simposios dedicados a la literatura y cultura paraguayas, y menciono aquí solamente tres en los cuales tuve el honor de participar, que son los encuentros en Toulouse en el 2000, en Alicante en el 2003 y en Lyon en el 2008. Con el apoyo de la cónsul del Paraguay en Alemania, Norma Stengel, pude organizar en 2008 las “Jornadas culturales del Paraguay” en el Instituto Cervantes en Múnich, donde también estuvo presente su madre, la infatigable escritora Maybell Lebrón. Y, finalmente, hay que mencionar a la tenaz Carla Fernandes quien, hasta hoy en día, sigue organizando regularmente simposios relacionados con diferentes temas de la cultura paraguaya.

Fruto de estos encuentros, en los cuales se despertó cada vez más el interés por esta isla de tesoros literarios, fueron las publicaciones de varios números de revistas especializadas y de ediciones de libros. En primer lugar, deben mencionarse dos números especiales sobre el tema que salieron el mismo año 2002, uno en América sin nombre, en Alicante; el otro en Hispanorama, en Núremberg. En segundo lugar, cabe destacar la edición de Mar Langa Pizarro Dos orillas y un encuentro: la literatura paraguaya actual [13] y el volumen de Carla Fernandes Un siglo de Augusto Roa Bastos (1917-2017) [14], entre otros. En 2003, la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes en Alcalá abrió su página web, la cual, aunque hoy en día desgraciadamente no se encuentra totalmente actualizada, sigue facilitando el acceso a la literatura paraguaya del siglo XX desde todos los rincones del mundo.

La crítica literaria sobre temas locales por parte de los mismos paraguayos ha comenzado y, hasta el día de hoy, está liderada por Teresa Méndez-Faith, una estudiosa incansable, quien publica en 1994 su Breve antología de la literatura paraguaya [15], así como su Breve diccionario de la literatura paraguaya [16]. A lo largo de los 40 años transcurridos desde su tesis de doctorado, Exilio e imaginación: la novelística paraguaya del destierro via cinco textos en contexto (1979), ha promovido desde los Estados Unidos la literatura de su país. Lo ha hecho tanto a través de ediciones de textos literarios –recientemente, en agosto de 2023, lanzó los primeros tres tomos de Cuentos y relatos de mi tierra colorada [17]–, así como en lecturas y charlas en la web.

“Cuentos y relatos de mi tierra colorada… en Youtube”. Cortesía

Cuentos y relatos de mi tierra colorada… en YouTube, de Teresa Méndez-Faith. Cortesía

La lista de los estudios realizados por críticos paraguayos y extranjeros podría alargarse mucho más y, aún así, nunca estaría completa. Además, habría que añadir obras de teatro, así como las colecciones de cuentos y de poesías paraguayas en español y las traducciones a varios idiomas extranjeros. Al parecer, el interés por la literatura paraguaya no ha disminuido con la llegada del nuevo milenio.

Al llegar al final de este deslinde de los hitos en el estudio de la literatura paraguaya, ¿se puede sostener el mito de la isla sin mar? Según el escritor y crítico paraguayo Damián Cabrera, las producciones simbólicas del país pasan desapercibidas ante las miradas críticas que se centran en América Latina [18]. Estoy de acuerdo con él hasta cierto grado ya que, de todos modos, el interés por la literatura y la cultura latinoamericanas ha disminuido en las últimas dos décadas, al menos en el ámbito universitario de Europa occidental. En contraposición, la producción literaria del país se muestra más rica que nunca y más conectada gracias a los nuevos medios de comunicación.

Este libro tiene como objetivo trazar un nuevo mapa de la literatura paraguaya, una cartografia literaria en la que se ponen de relieve las valiosas contribuciones de esta tradición a la literatura mundial. Un mapa va más allá de ser simplemente un dibujo de caminos y fronteras, sirve para la orientación en diversos sentidos. Con la ayuda de un mapa es posible descubrir lugares que uno ni siquiera habría buscado ni esperado y así se pueden abrir nuevos caminos, ya sean reales, mentales o, en este caso, literarios. Por esta razón aspiro a diseñar un mapa literario del Paraguay del siglo XX. Es importante aclarar que en este mapa no se esboza la literatura escrita en la segunda lengua oficial del país, el guaraní. Eso no se debe a un olvido ni, mucho menos, a un menosprecio hacia esta lengua tan rica en metáforas y propicia para la invención y la ficción. Muy al contrario, se debe a mi respeto hacia esta lengua y al hecho de que escribir sobre literatura en una lengua que no hablo siempre me ha parecido poco satisfactorio; en ese caso solo podría ser una reproducción de lo que otros han expresado.

[…] En este mapa literario se representan algunos de los lugares que albergan figuras de obras literarias, tales como Caacupé, adonde varios personajes de Josefina Pla anhelan ir, o Tebicuary, ubicado en el río del mismo nombre, por donde descienden los carpincheros con sus tambores en los cuentos de Augusto Roa Bastos.

Con este libro, no pretendo escribir una historia literaria paraguaya, sino más bien presentar mis estudios sobre algunas de las obras más importantes del siglo XX. La gestación de este libro ha abarcado muchos años y es el resultado de más de 25 años dedicados a la literatura paraguaya. Gran parte de los estudios se han presentado en otros contextos y se han vuelto a repensar para esta edición. No fue posible incluir a todos los autores con sus obras, que merecerían un análisis crítico profundo, por lo que pido benevolencia tanto a aquellos que están representados como a los que no lo están.

Me alegraría mucho poder continuar la investigación y completarla en un segundo volumen dedicado a otros temas con nuevos enfoques. En última instancia, este libro aspira a ofrecer una visión caleidoscópica de una literatura rica en diferentes temas y estilos, abundante en lectores nacionales, pero hasta ahora carente del reconocimiento internacional que merece. Se trata de una crítica literaria realizada por una persona y, por lo tanto, algo subjetiva debe ser y no pretende excluir otras opiniones. De hecho, a través de un caleidoscopio, el objeto cambia de forma, e incluso de color, cuando se le mueve un poco.

Dentro del panorama de la literatura paraguaya se han seleccionado obras narrativas representativas de un total de siete autores, con el objetivo de presentarlos y trazar un mapa que abarque tanto su calidad literaria como su temática. De cada autor se han escogido algunas de sus obras más representativas o interesantes en el contexto de la temática estudiada. Aunque algunas de estas obras fueron publicadas ya a principios del nuevo milenio, la referencia a otras creaciones del mismo autor me permitió e incluso impulsó a incluirlas también en este volumen. La imposibilidad de establecer un sistema cronológico entre los estudios –ya sea basado en la fecha de publicación o en la época temática– ha llevado a organizar los capítulos según la fecha de nacimiento de los autores. Esta elección se fundamenta en la idea de que, según los círculos en los que se movían, se les puede adscribir a cierta época y este es el único registro que permite reconstruir de manera aproximada una cronología de las distintas etapas de la literatura paraguaya. De todos modos, la estructura caleidoscópica del libro le ofrece a cada lector una lectura variada […]

Notas

[1] Barret, Rafael. Obras completas. I. El dolor paraguayo. Asunción: RP Ediciones, [1911] 1988, p. 141.

[2] Herken, Juan Carlos. “La diplomacia británica en el Río de la Plata: el caso Rafael Barrett (1908-1910), Caravelle, Toulouse, 1983, 41, p. 50.

[3] Sánchez, Luis Alberto. Historia de la literatura americana (Desde los orígenes hasta 1936). Santiago de Chile: Ercilla, 1937, pp. 627 y ss.

[4] Rodríguez Alcalá, Hugo. La incógnita del Paraguay y otros ensayos. Asunción: Arte Nuevo Editores, 1987.

[5] Roa Bastos, Augusto, citado en Mar Langa Pizarro. Guido Rodríguez Alcalá en el contexto de la narrativa histórica paraguaya. Alicante: Tesis de doctorado, Biblioteca Virtual Cervantes, 2001, p. 194.

[6] Peiró Barco, José Vicente. “El robinsonismo de la narrativa paraguaya” en Carmen Alemany Bay y otros (eds.). La isla posible. Alicante: Asociación Española de Estudios Literarios Hispanoamericanos, 1998, p. 437. 

[7] En lo siguiente, me concentraré en la recepción y divulgación de la literatura paraguaya en Europa, puesto que esta es en la que participé y que, por lo tanto, mejor conozco.

[8] Castro, Claude. Historia y Ficción: “Caballero” de Guido Rodríguez Alcalá. Asunción: Don Bosco, 1997. Traducción de la tesis de doctorado: Histoire et fiction dans la littérature paraguayenne actuelle. “Caballero” de Guido Rodríguez Alcalá. Toulouse: Université Toulouse-Le-Mirail: GRAL-IREALT, 1997.

[9] Mar Langa Pizarro, op. cit.

[10] Peiró Barco, José Vicente. Literatura y sociedad. La narrativa paraguaya actual (1980-1995). Madrid: Tesis de doctorado; UNED; Biblioteca Virtual de Cervantes, 2001.

[11] Steckbauer, Sonja Maria. Insel ohne Meer. Prosa Paraguays von 1980 bis 2000. Eichstätt: Universidad Católica de Eichstätt-Ingolstadt. Tesis de postdoctorado, 2001.

[12] Fernandes, Carla. Augusto Roa Bastos. Écriture et oralité. Paris: L’Harmattan, 2001.

[13] Langa Pizarro, Mar (ed.). Dos orillas y un encuentro: La literatura paraguaya actual. Alicante: Universidad de Alicante, 2005.

[14] Fernandes, Carla (ed.). Un siglo de Augusto Roa Bastos (1917-2017). Alcalá: Universidad de Alcalá, 2018.

[15] Méndez-Faith, Teresa. Breve antología de la literatura paraguaya. Asunción: El Lector, 1994.

[16] Méndez-Faith, Teresa. Breve diccionario de la literatura paraguaya. Asunción: El Lector, 1994.

[17] Méndez-Faith, Teresa. Cuentos y relatos de mi tierra colorada. Asunción: Intercontinental Editora, 2023. 3 vols.

[18] El caso de la literatura paraguaya es paradigmático dado el estatuto de insularidad cultural y mediterraneidad geográfica […] y, por el otro lado, por la constatación […] de que la sociedad paraguava y sus producciones simbólicas han pasado desapercibidas por las miradas críticas que sobre América Latina se han arrojado como conjunto; salvo excepciones, y la obra de estos autores y sus afirmaciones son algunas de ellas. (Cabrera, Damián. “Literatura paraguaya/guaraní-transversalidades”, Revista de Estudos Culturais, São Paulo, 2019, 3, s. p.). 

 

Nota de edición

El libro de Sonja Maria Steckbauer está constituido por una introducción y siete capítulos, cada uno de los cuales está dedicado a un autor. Ellos son: “La ‘paraguayidad’ en la cuentística de Josefina Pla”; “El realismo psicológico en Los exiliados de Gabriel Casaccia; “El trueno entre las hojas de Augusto Roa Bastos: un trueno entre verdad e invención, sol y luna”; “Luz y sombra en Los nudos del silencio de Renée Ferrer”; “La independencia del Paraguay en la narrativa y crítica de Guido Rodríguez Alcalá”; “Exilio e ilusión en la obra de Juan Carlos Herken: El mercader de ilusiones” y “Susana Gertopán y la memoria colectiva de la diáspora judía”. Agradecemos a Intercontinental Editora la autorización para publicar esta introducción, que ha sido reproducida casi en su totalidad. 

Sonja Maria Steckbauer. Cartografía literaria del Paraguay, Asunción: Intercontinental Editora, 2024, 190 páginas.

1 Comment

1 Comentario

  1. Aníbal Cardozo

    10 de marzo de 2024 at 14:40

    Excelente nota: da un excelente panorama de nuestra realidad cultural y su ubicación dentro de la complejidad cultural de Latinoamérica y que, evidentemente, merece ser actualizada y difundida a nosotros mismos, desde nosotros mismos y posteriormente, al exterior
    Felicitaciones
    Aníbal Cardozo Ocampo

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